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Desire by Dunhill

Esta fragancia del año 2000, de la marca británica Dunhill de artículos de lujo orientados al mercado masculino, es la primera fragancia elaborada luego de la adquisición de la licencia de fabricación de perfumes por parte de Wella y luego Procter & Gamble a partir del 2003, siendo una de las fragancias más antiguas que se mantiene en producción luego de la decisión de descontinuar todos los perfumes previos al año 2000 con excepción de Dunhill Edition de 1984, con Desire proponiéndose como un aroma que sigue una línea aromática más moderna que sus predecesores teniendo un objetivo más seductor que clásico y orientado a un público más joven. El envase posee 2 versiones de botella, una de ellas recordando una cantimplora de bolsillo con un frente rectangular y perfil curvado a modo de riñón con un costado ancho donde aparece escrito el nombre del perfume en vertical, y una nueva versión de perfil hexagonal de costados delgados y con la marca "dunhill" apareciendo en la cara frontal, ambas teniendo hombreras plateadas y un tapón en el mismo color con un sistema de bisagra que refuerza la idea de una cantimplora, destacando el uso de un vidrio de color rojo intenso. En el sitio de Dunhill no aparecen referencias a esta fragancia, con el sitio de Inter-Parfums que posee la licencia de fabricación desde el año 2013 destacando que el perfume se encuentra en producción.

En partida la fragancia presenta un inicio plástico marcado por una flor de azahar con aportes de mandarinas que tienen una inclinación a naranja roja con dejos sintéticos en la línea de Magnetism for Men de Escada, mostrando a 5 minutos aportes de flores neutras con una base de vainilla polvosa que aparece intercalada con musk, volviendo a presentar a 10 minutos una impresión de sintéticos hacia el lado floral que se acercan a un estilo femenino y en particular con los tonos centrales de Far Away de Avon, desarrollando a 15 minutos una base de vainilla que contiene un dulzor breve de peras y que a 20 minutos se centra en capas de naranjas y mandarinas vivas con florales imprecisos. En fase media a los 30 minutos el perfume mantiene una línea centrada en mandarinas con flores de azahar y una base de vainilla que va en retroceso, elevando una impresión cálida que combina mandarinas y bergamotas con influencias todavía presentes de vainilla que incluyen un punto de flores neutras de violetas con una flor de azahar que recupera el aroma de las naranjas en un formato de cáscara a 1 hora del inicio. A las 2 horas la fragancia sigue en líneas cálidas de mandarina en cáscara con variaciones florales que reducen las flores de azahar a lirios del valle con un dejo rojo tipo rosas o peonías que también pueden venir de una mandarina densa, incluyendo nuevas líneas de limón al nerolí en el fondo que gradualmente reemplazan a la flor de azahar y orientan las peonías hacia ámbar, sosteniendo a las 3 horas un aroma nuevamente floral en flor de azahar rodeada de bergamotas y cálidos de musk sobre una mayor presencia de ámbar y resinas dulces, incluyendo aportes discretos de madera con un dejo especiado a las 4 horas. Al superar las 6 horas la fragancia mantiene una faceta cálida pero más fresca al elevar las naranjas hacia mandarinas por encima del ámbar, conservando un tono floral que contiene flores de azahar con acercamiento a nerolí y distinguiéndose un fondo de madera suave con dejos de pachulí y resina, volviendo a las 9 horas con una tonalidad parecida a la de un perfume femenino de los años 80 centrado en un floral dulce y frío de rosas y gardenias con duraznos, tallos especiados y ámbar, volviendo a las 12 horas a un acabado masculino de perfumería clásica de la década de 1990 en vainilla, flor de azahar y bergamota con trazas de madera y pachulí con lavanda. En fase final a 24 horas de aplicado el perfume presenta un aroma compacto y cálido centrado en naranjas y mandarinas menos frescas con vainilla y ámbar, donde persiste la idea de una flor más dulce que una flor de azahar y que tiene características de rosas o peonías.

La fragancia juega con una idea de sensualidad cálida que incluye referencias empáticas femeninas florales a la vainilla, con un centro constante de la familia de las naranjas que también tiene oscilaciones sintéticas a naranja roja en un comienzo, mostrando un comportamiento de diario atemporal que depende de la cantidad aplicada aportando calidez en invierno y aguantando un uso de interiores en primavera y verano, teniendo algunas complicaciones por densidad para ser un aporte refrescante en actividades deportivas. En oficina el perfume llama la atención y tiene una presencia pulcra dentro de un marco de naranjas ambaradas, con un aire artesanal que se adapta al vestuario que se usa dentro del segmento informal a semiformal, con un efecto memoria que se mantiene en mediano en una sensación de aroma compacto en torno a naranjas que puede mejorar a corta distancia. A nivel nocturno el aroma se relaja aguantando un uso en ambientes medianamente contaminados y acercándose a épocas más cálidas, dando un paso fluido por encima del segmento adolescente desde juntas informales con amigos a eventos sociales semiformales, faltándole profundidad y elegancia en el caso formal. En lo romántico el aroma se siente grato, pero por linealidad y por la presencia de las flores dejando una impresión de aroma fresco de corte más personal que sensual. Rango de edad entre 25 y 60 años.