Nike the Perfume Woman by Nike Perfumes
Este perfume del año 2017 corresponde a un lanzamiento doble para hombre y mujer perteneciente a la marca española Nike Perfumes, fundada originalmente en 1929 sin tener relación con la marca deportiva estadounidense Nike creada años después en 1964, con la serie The Perfume siguiendo una línea urbana y joven con un trasfondo sensual de pareja. El envase considera una botella rectangular de base gruesa y contornos curvados rematada en un tapón transparente que también es usada por la edición masculina, con la versión para mujer conteniendo un líquido de tono rosado suave. En el sitio de De Ruy Perfumes, poseedor de la licencia de fabricación de la marca Nike Perfumes, no entregan información sobre esta línea de productos pero tanto la caja como la botella de la fragancia llevan escrito en la cara frontal las notas aromáticas que son las siguientes: peras, mandarina, bergamota, orquídea, maracuyá, rosas negras, durazno, frambuesas, musk, pachulí, vainilla y café.
En partida la fragancia comienza con un centro de pachulí confitado similar al propuesto por Angel de Thierry Mugler, derivando a los 5 minutos a vetas de caramelo y tintes de café ligero donde aparecen a los 10 minutos indicios imprecisos de flores clásicas basadas en rosas con vainilla, apareciendo a los 15 minutos un primer desvío hacia una línea chiprés al cuero que es opacada a los 20 minutos por una nota de caramelo de apariencia más rústica similar a la de palomitas de maíz. En fase media a los 30 minutos el aroma mantiene un desarrollo sobre caramelo polvoso donde las rosas cambian a frambuesas, continuando a 1 hora con tonos secos de cuero y café sobre una base estable de pachulí confitado que tiene una mayor presencia de vainilla amaderada. Sobre las 2 horas la fragancia se suaviza apartándose de las similitudes con Angel de Mugler pero manteniendo un centro de pachulí más dulce y polvoso que se acerca a un estilo chiprés de los años ochenta al contener aportes de rosas oscuras con amaderados de vainilla que absorben el aroma de café, con la vainilla dando a las 3 horas pasos por miel y variantes más dulces del café en torno a capuchino con un ligero ácido de naranjas, tomando a las 4 horas un acabado más clásico en vainilla polvosa con referencias florales imprecisas que pasan por jazmín colocando en el fondo una base atalcada de madera con dejos de durazno, resina fresca y granos de tonka. A las 6 horas la fragancia recupera la nota de frambuesa qué se siente más verde y herbal al estar asociada con una base de pachulí recordando en este punto otros perfumes que han aprovechado la combinación de fruta y pachulí dando un cruce rápido por frutales ácidos al mango y piña que restan presencia a la vainilla inclinándola a madera con miel, volviendo a tomar a las 9 horas un enfoque clásico al cambiar las notas de frambuesas por rosas oscuras con rasgos especiados montados sobre tallos de madera que refuerzan el concepto de chiprés con una base verde levemente picante de pachulí con cuero, abriéndose a las 12 horas a un acabado de frutas más dulce y neutro que gira en duraznos manteniendo un fondo polvoso de pachulí con piña. En fase final a las 24 horas el perfume adquiere un acabado clásico tibio donde destaca una nota más alta de pachulí seguida por una vainilla menos precisa que se asocia a tallos amaderados, destacando una segunda nota dulce de rosas especiadas con frambuesas y dejos de chocolate, miel y caramelo.
La fragancia se mueve en un rango acaramelado al pachulí de la familia de Angel de Thierry Mugler y CH de Carolina Herrera, pasando luego a una sección lineal de vainilla que recuerda referencias clásicas similares a las de Dune de Dior o Burberry clásico de mujer agregando vetas joviales muy breves de frambuesa, a nivel de diario mostrando una preferencia de uso invernal sin apuntar a un uso deportivo. En oficina el perfume se siente correcto y no intrusivo, destacando los matices de café que potencian el aroma de la vainilla y con el punto inicial de pachulí produciendo algunas confusiones con otros perfumes que se basan en la misma nota como Angel y La vie est belle de Lancôme, moviéndose en un rango informal de mayor edad y semiformal de edad amplia, teniendo un efecto memoria que está levemente sobre el promedio debido a una proyección ambiental acotada. En el caso nocturno la fragancia toma aires más elegantes de tipo social que caen en lo semiformal dejando una apariencia rígida en situaciones juveniles o informales, faltándole potencia para proyectarse en ocasiones formales. En lo romántico la combinación de notas se siente grata con un aire retro chiprés y con la nota de pachulí teniendo solo un momento breve de alta presencia que se diluye pronto en caramelo y vainilla, funcionando en salidas con pareja conocida al apreciarse el aroma a corta distancia. Rango de edad entre 25 y 60 años.
En partida la fragancia comienza con un centro de pachulí confitado similar al propuesto por Angel de Thierry Mugler, derivando a los 5 minutos a vetas de caramelo y tintes de café ligero donde aparecen a los 10 minutos indicios imprecisos de flores clásicas basadas en rosas con vainilla, apareciendo a los 15 minutos un primer desvío hacia una línea chiprés al cuero que es opacada a los 20 minutos por una nota de caramelo de apariencia más rústica similar a la de palomitas de maíz. En fase media a los 30 minutos el aroma mantiene un desarrollo sobre caramelo polvoso donde las rosas cambian a frambuesas, continuando a 1 hora con tonos secos de cuero y café sobre una base estable de pachulí confitado que tiene una mayor presencia de vainilla amaderada. Sobre las 2 horas la fragancia se suaviza apartándose de las similitudes con Angel de Mugler pero manteniendo un centro de pachulí más dulce y polvoso que se acerca a un estilo chiprés de los años ochenta al contener aportes de rosas oscuras con amaderados de vainilla que absorben el aroma de café, con la vainilla dando a las 3 horas pasos por miel y variantes más dulces del café en torno a capuchino con un ligero ácido de naranjas, tomando a las 4 horas un acabado más clásico en vainilla polvosa con referencias florales imprecisas que pasan por jazmín colocando en el fondo una base atalcada de madera con dejos de durazno, resina fresca y granos de tonka. A las 6 horas la fragancia recupera la nota de frambuesa qué se siente más verde y herbal al estar asociada con una base de pachulí recordando en este punto otros perfumes que han aprovechado la combinación de fruta y pachulí dando un cruce rápido por frutales ácidos al mango y piña que restan presencia a la vainilla inclinándola a madera con miel, volviendo a tomar a las 9 horas un enfoque clásico al cambiar las notas de frambuesas por rosas oscuras con rasgos especiados montados sobre tallos de madera que refuerzan el concepto de chiprés con una base verde levemente picante de pachulí con cuero, abriéndose a las 12 horas a un acabado de frutas más dulce y neutro que gira en duraznos manteniendo un fondo polvoso de pachulí con piña. En fase final a las 24 horas el perfume adquiere un acabado clásico tibio donde destaca una nota más alta de pachulí seguida por una vainilla menos precisa que se asocia a tallos amaderados, destacando una segunda nota dulce de rosas especiadas con frambuesas y dejos de chocolate, miel y caramelo.
La fragancia se mueve en un rango acaramelado al pachulí de la familia de Angel de Thierry Mugler y CH de Carolina Herrera, pasando luego a una sección lineal de vainilla que recuerda referencias clásicas similares a las de Dune de Dior o Burberry clásico de mujer agregando vetas joviales muy breves de frambuesa, a nivel de diario mostrando una preferencia de uso invernal sin apuntar a un uso deportivo. En oficina el perfume se siente correcto y no intrusivo, destacando los matices de café que potencian el aroma de la vainilla y con el punto inicial de pachulí produciendo algunas confusiones con otros perfumes que se basan en la misma nota como Angel y La vie est belle de Lancôme, moviéndose en un rango informal de mayor edad y semiformal de edad amplia, teniendo un efecto memoria que está levemente sobre el promedio debido a una proyección ambiental acotada. En el caso nocturno la fragancia toma aires más elegantes de tipo social que caen en lo semiformal dejando una apariencia rígida en situaciones juveniles o informales, faltándole potencia para proyectarse en ocasiones formales. En lo romántico la combinación de notas se siente grata con un aire retro chiprés y con la nota de pachulí teniendo solo un momento breve de alta presencia que se diluye pronto en caramelo y vainilla, funcionando en salidas con pareja conocida al apreciarse el aroma a corta distancia. Rango de edad entre 25 y 60 años.