Amó Provoca by Natura

Esta fragancia del 2013 de la marca brasileña Natura se incorpora dentro de la colección Amó, centrada en proponer aromas que giran en torno a gestos de amor y cariño en pareja, apareciendo junto con Susurro de mujer y sumándose a los ya existentes Chamego, Amasso, Xodó y Esquenta, con Provoca planteando un comportamiento sensual y motivador que busca cuidar el amor en pareja día a día. El envase usa la forma de botella estándar de la colección Amó y que consiste en un cilindro de base ancha y cuello más delgado, con un capuchón de goma cubriendo el spray y actuando como tapón y pulsador a la vez, repitiendo un gradiente que en este caso va de negro a rojo en la base. En los sitios de Natura se destacan las siguientes notas aromáticas para esta fragancia: clavo de olor, canela, madera y café.

En partida la fragancia presenta un tono frío de pimienta cercano a un estilo de barbería y que se siente rodeado por capas verdes discretas que traen aproximaciones simplificadas y más refrescantes del tipo Vetiver de Guerlain, teniendo cruces momentáneos de nuez moscada en los primeros minutos y enfocándose hacia tonos de sándalo y cedro sobre los 10 minutos, retornando a un especiado de nuez moscada con dejos de ámbar en reemplazo del cedro a los 20 minutos. En fase media a 30 minutos la fragancia vuelve a una nota de pimienta con un acabado de vetiver al jabón, aumentando la profundidad del aroma sin alterar la estela que se mantiene mediana y a distancia de conversación, con puntos más sucios de tabaco y cuero que afinan el tono de jabón hacia enebro o lavanda complementarios de bajo impacto, incrementando al acercarse a 1 hora del inicio las partes verdes que se aproximan a vetiver, cardamomo terroso y ciprés ligero. A las 2 horas la fragancia hace un balance entre un cuerpo limpio y al agua basado en especiados mixtos que se mueven como masa aromática sin independencia de notas y dentro de una familia de nuez moscada y canela, sumando capas verdes al jabón que recuerdan vetiver y cardamomo no terroso que van en paralelo con madera y cuero con tabaco, destacando a las 3 horas un picor diferente que incluye trazas vagas de frutales y que se aproxima a bayas de enebro de baja carga mentolada, enfocándose este punto dominante a las 4 horas en un clavo de olor ligero mezclado con madera y que ocasionalmente se confunde con bayas de enebro. A las 6 horas el aroma comienza a girar en torno a especiados más picantes sobre maderas oscuras que no llegan a ámbar, con una pimienta que comparte tonos con vetiver y que se aproxima a simplificaciones frescas de aromas de perfumería clásica masculina, subiendo a las 9 horas una capa de enebro mezclada con una madera con rasgos de chocolate que aumenta momentáneamente la profundidad hacia inciensos no densos, llegando a las 12 horas a un punto estable de madera y nuez moscada con pimienta sobre fragantes de tabaco y ámbar. En fase final a las 24 horas la fragancia mejora tomando un formato más clásico y oscuro con menos partes verdes y sin caer en tonos densos privilegiando un marco frío de estela mediana, destacando una pimienta con cardamomo y aires de vetiver seco que se cruzan con sándalo y trazas de granos de cacao más bajos que un pachulí, con aportes de incienso, tabaco y lavanda que traen recuerdos de los años ochenta.

La fragancia sigue una línea similar a la planteada por otras fragancias masculinas de la marca Natura, destacando vetas clásicas de perfumería masculina que giran en torno a maderas y que son matizadas por especiados, variando de acuerdo a la ocasión y desplante que se persigue la cantidad de capas verdes y sin llegar a mezclar notas aromáticas a niveles demasiado densos que ahoguen en un clima cálido, con este perfume funcionando a nivel de diario con suficiente soltura en épocas de verano y con una aproximación que está entre un informal y un semiformal pero aguantando una actividad deportiva no extrema dentro de un marco social, más cargado a gimnasio y tenis que a fútbol o una maratón. En oficina la fragancia tiende a picar en nariz y a volverse intrusiva si se le usa en exceso, apegándose a un patrón cotidiano del día a día y que tiene un efecto memoria de mediano a bajo al moverse la fragancia como una masa aromática sin puntos destacados o que se proyecten por encima del promedio, donde destaca una imagen limpia y centrada con aires clásicos. A nivel nocturno el aroma tiende a restringirse hacia situaciones de pubs de ambientes relativamente oscuros y evitando situaciones de mayor formalismo, por momentos dando la idea de una fragancia de diario que aguanta un uso tardío en noches veraniegas. En lo romántico el aroma parece tener una intención de uso más personal que sensual o de pareja, en especial por el picor de las especies que por momentos se escapa y pica en nariz a corta distancia. Rango de edad entre 25 y 60 años.