Homem by Natura

Este perfume del año 2006 es el primero de una serie exclusivamente masculina dentro de la marca de cosméticos Natura, empresa fundada en Brasil en 1969 y que se ha expandido mayoritariamente hacia América Latina siguiendo un formato de venta directa por catálogo por medio de consultoras establecido a mediados de los años setenta, con Homem incluyendo productos de cuidado personal como jabones, after shaves, cremas de afeitar, desodorantes y lociones humectantes, sin dejar de lado la simplicidad y el lado práctico. El envase consiste en una botella tipo cantimplora con un spray giratorio que bloquea la aplicación y que es aprovechada por las siguientes ediciones de fragancias de la misma línea, en particular con Homem usando un vidrio de color celeste que la distingue de sus pares. En el sitio de Natura no dan una descripción explícita de su composición, por lo que no se cuenta con un listado de sus notas aromáticas.

En partida la fragancia presenta un punto dominante y muy breve de menta ligeramente al mentol que desaparece en menos de 30 segundos, dejando paso a una base más clásica con rasgos de lavanda que se aproxima mucho a las capas principales de Drakar Noir de Guy Laroche, con retornos a la menta después de 10 minutos que tienden a diferenciarlo de un clon de Drakkar Noir. En fase media a 30 minutos la fragancia mantiene una mezcla en que destacan líneas de lavanda fresca y menta fría, con aumentos de profundidad hacia el lado de los especiados amaderados tipo nuez moscada que refuerzan la idea de mentol por picores esporádicos en nariz, aumentando la presencia de polvosos suaves asociados a sándalo al llegar a 1 hora de la partida y que dan impresiones vagas de florales discretos por el lado de la flor de azahar y la albahaca, reforzándose la lavanda a las 2 horas en un formato frío y mucho más mentolado que se aleja del estilo mediterráneo más floral y a la violeta, moviéndose en paralelo con una línea de nuez moscada también fría y con un dejo alimonado discreto que se hace más notorio a las 3 horas. Hacia las 5 horas se sostiene la lavanda la cual cambia de estilo mentolado a uno más clásico que trae un recuerdo vago de las capas básicas de Azzaro pour Homme incluyendo un rastro en ascenso de ámbar y madera, retornando la menta y la nuez moscada fría a las 7 horas. Sobre las 9 horas la nuez moscada y la madera se vuelven más verdes y rústicas dando un paso también hacia dulzores que absorben al ámbar e inclinan los especiados hacia variantes más suaves tipo jengibre y cardamomo que se alinean también con cercanías a terrosos, con aires mezclados de tabaco que se suman a las 10 horas y que dan oscilaciones florales neutras cruzadas con menta fría al alcanzar las 12 horas. En fase final al llegar a 24 horas el perfume retorna a la línea de lavanda clásica y fresca común a Drakkar Noir y a la base fresca de Azzaro pour Homme sustentado sobre una base ligera de cardamomo y jengibre poco especiado y con mayor inclinación a maderas, con parte de la lavanda ampliándose a un floral neutro blanco complementario.

La fragancia sigue un formato aromático similar al de algunas fragancias masculinas de la línea Avon, diferenciándose en la profundidad aromática que suele ser más simple y en la estela aromática que se proyecta con más facilidad a mayor distancia, factores que suelen influir en la perfumería brasileña al ser productos que deben cumplir con la exigencia de ser gratos y no molestos bajo un clima caluroso y húmedo, calzando bien esta fragancia en un escenario de diario veraniego a pleno sol e incluso en actividades deportivas, tal vez con el punto de lavanda siendo mejor aprovechado a nivel social o funcional en situaciones más calmas. En oficina el aroma cumple con dar una imagen limpia tipo salida de ducha nuevamente veraniega y que balancea ideas cotidianas y correctas a la vez, sin llegar a la complejidad de un perfume clásico pero sacando del paso en reuniones fuera de agenda. En el caso nocturno la fragancia tiende a perder potencial sintiéndose más cotidiana y más simple con respecto a una posible competencia, con el aroma todavía consiguiendo buena proyección pero quedando relegado a lo que podría entenderse como un perfume de diario usado de manera tardía. En el caso romántico el aroma también presentas líneas simples que no llegan a la complejidad de perfumes más seductores o que pretenden encajar de mejor manera en un evento especial de imagen, entendiéndose como un perfume grato de oler con mucho mejor potencial a nivel personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.