Realiza una Búsqueda

Agua Fresca de Rosas by Adolfo Domínguez

Esta fragancia de 1995 es el primer perfume femenino dentro de la línea de perfumes de Adolfo Domínguez y el tercero a nivel histórico, siendo considerado junto con su predecesor masculino directo Agua Fresca uno de los productos más vendidos de esta marca y con los cuales el diseñador español se hizo conocido en el mercado. La fragancia sigue conceptos muy parecidos al de Agua Fresca de hombre con respecto al usar esencias nobles de la naturaleza, en este caso una rosa búlgara, y reinterpretarlas en un aroma de lineas modernas y frescas no recargadas ni densas que pueda usarse durante todo el día. El frasco corresponde a una versión estilizada y más alargada de la botella de Agua Fresca, con el nombre del diseñador grabado en el borde del spray en un detalle que se repite en varios productos de la marca. En el sitio de Adolfo Domínguez señalan que las notas principales del perfume son: pétalos de rosa, lirios del valle, jazmín, sándalo, musgo de encina o roble y musk.

En la partida se sienten grupos de flores muy suaves, lejanas hasta el momento de las rosas y estructuradas en un cuerpo de agua suave y tenue, con ideas de flores de jardín algo lineales en torno a una gardenia o un lirio del valle acompañados de tonos dulces que están entre un ámbar también al agua o un musk, aumentando a los 5 minutos la profundidad y tendiendo a mezclas al jabón de jazmín y de una rosa dulce joven. En fase media la rosa tiende a variar hacia una rosa especiada, con más fuerza en la idea de jabón de flores, aumentando la idea de dulces no azucarados y basados en pétalos de flores a la hora de la partida, con musk dominante y con una tendencia a rosas jóvenes y florales neutros con notas extras al fondo que tienden a oscurecer la mezcla hacia un tinte chiprés fresco de madera oriental. A 2 horas la fragancia queda centrada en musk dulce con una rosa joven con pétalos aromáticos y flores secundarias de baja presencia y fundidas en la idea de un jabón, apareciendo nuevas vetas frescas cítricas que potencian la idea de agua y que van hacia un polen alimonado de flor de azahar o notas de nerolí, con una pequeña componente verde que viene de tallos de flores, todo rebajando el fondo amaderado especiado que se sentía al comienzo y relegándolo a un residual muy al fondo. A 4 horas las rosas siguen destacando pero con una carga cítrica verde secundaria mayor, que no supera a las rosas ni al musk pero da la idea de un agua de bergamotas o de nerolí. Ya a 9 horas de la partida las rosas bajan a un plano secundario privilegiando al musk y a puntos secos especiados suaves de origen floral, con la capa de nerolí dando variaciones residuales que recuerdan a un té verde con polvo de pétalos genéricos. En fase final se siente una rosa fresca con tintes frutales cercanos a peonías aunque manteniendo una línea de agua de rosas clásica rebajada en segundo plano, agregando jabonosos de jazmín que reemplazan al musk de las fases anteriores más una sensación general de interior de flores y de especiados suaves de origen floral.

La fragancia se apega bastante a las ideas de elegancia natural del diseñador, con líneas simples basadas en elementos clásicos como los pétalos de rosas enfocándolo en una fragancia sincera sin ostentaciones extras que se mueve entre un floral y un verde de jardín que se siente grato en usos cotidianos de diario entre primavera y verano tanto en interiores como al aire libre prolongando una sensación de limpieza después de la ducha. En oficina la fragancia aunque tiene una proyección algo tenue tiene como motivo principal el mostrar feminidad y limpieza nuevamente dentro de un estilo sincero y directo, algo relajado y sin edad, con una buena estela a pesar de ser una fragancia de baja intensidad y dando la idea de ser una opción similar a la de Infusion d'Iris e Infusion d'Homme de Prada donde se prefiere un aroma sincero y propio en lugar de un perfume tipo máscara que proyecte una idea de personalidad. Por el lado nocturno la fragancia tiende a perder proyección y a sentirse sencilla, recordando una enfoque de día menos complejo que la competencia y quedando en desventaja incluso ante olores ambientales. En el campo romántico las rosas son jóvenes y gratas con un dulzor tibio receptivo que invita a acercarse aunque sea actuando con una intensidad media más cercana a la piel y con preferencia en situaciones calmadas de clima fresco. Rango de edad entre 20 y 60 años.