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Champs-Elysées by Guerlain

Este perfume de 1996 es una de las fragancias clásicas modernas de Guerlain, inspirada en la Avenida de los Campos Elíseos, uno de los sitios emblemáticos y de mayor atractivo turístico de la ciudad de París, y considerada por los franceses como la avenida más hermosa del mundo, la cual se extiende por casi 2 kilómetros entre el Arco de Triunfo y la Plaza de la Concordia, reuniendo en su longitud la mayoría de las tiendas más elegantes de la ciudad. La fragancia establece un centro floral en torno a rosas y mimosas como símbolo de feminidad moderna, con un frasco de líneas rectas y fuertes que recuerdan la silueta estilizada de una mujer. En el sitio de Guerlain señalan que las notas principales de este perfume son: rosas, hojas de mimosa, casís, flor de almendro, mimosas, budelias (o árbol de las mariposas), semillas de hibisco y madera de almendro.

La partida al menos en la versión Eau de Toilette es limpia, con una idea de flores al borde de lo clásico y lo fresco con un pequeño punto frutal jugoso pero discreto, en principio con un aire aldehídico que pasa rápido a jabonosos pero diferentes a la idea de un jazmín. En fase media se mantiene el tono jabonoso limpio que se afina en ideas de mimosa y almendras como una versión floral más clásica de Kenzo Summer, agregando por el lado de la mimosa ideas de semillas al borde de la madera y trazas de mora y grosellas oscuras residuales y un poco ásperas. La evolución de la fragancia sigue por el lado de las flores en una tonalidad un poco inocente y no agresiva bastante primaveral, distinguiéndose la mimosa con la almendra en forma separada como dos líneas aromáticas independientes y con esto alejándose de la idea de Kenzo Summer, con un frutal oscuro al fondo que aporta un ácido mesurado e ideas de jazmín floral con polen muy limpio, manteniendo este aroma un poco lineal por bastante tiempo, agregando hacia las 5 horas una nota extra más seca tipo madera manteniendo a las mimosas como dominantes aunque en un tono más al agua y con cercanía a los brotes fragantes de rosas de jardín. En fase final la mimosa sigue presente, un poco menos fragante e inclinada hacia el lado dulce y con más predominio de polvosos de pétalos que recuerdan brotes de flores, con la almendra dando un fondo seco que está entre una madera y un ámbar.

La fragancia maneja un estilo que bordea lo primaveral y la idea de naturaleza, pero manteniendo un enfoque de ciudad en torno a dos flores dominantes como la mimosa y la rosa que aportan un estilo limpio y elegante dentro de un prisma joven, dando la idea del aire que se debería sentir al pasear por los Campos Elíseos en París, como también proyectar la imagen de una mujer parisina joven con una fragancia con base clásica de día. Por el estilo fresco que tiene el perfume se siente como un aroma de diario primaveral y veraniego no caluroso pero también con un comportamiento atemporal de interiores por el dulzor de la mimosa y los puntos amaderados de la almendra. En oficina el perfume rescata una idea sobria y pulcra, un poco inocente y de personalidad mesurada no avasalladora, pero también que sale del promedio por una imagen correcta muy femenina y relativamente joven, profesional pero privilegiando empatía por encima de la imposición de ideas. Por el lado nocturno mucha de las flores parecen recordar demasiado la idea de día, perdiendo presencia ante aromas más recargados. En el ámbito romántico la fragancia es correcta y femenina, aunque el cuerpo de mimosa no es precisamente receptivo y tiende a privilegiar un comportamiento más individual que en pareja. Rango de edad entre 25 y 60 años.