Sensuous Noir by Estée Lauder

Esta fragancia del 2010 corresponde a una nueva edición de Sensuous aparecida durante el 2008, proponiendo un enfoque más sensual y nocturno basado en una formulación diferente centrada en el jazmín Reina de la Noche, también conocido en español como Dama de la Noche (Cestrum nocturnum) para no confundirse con la otra flor también llamada Reina de la Noche y que corresponde a un cactus (Nightblooming cereus) al parecer usado por Dior Addict, manteniendo algunas líneas de miel y madera del original. En el sitio de Estée Lauder declaran las siguientes notas principales para el perfume: rosa púrpura, rosas, jazmín Reina de la Noche, pimienta negra, mezclas de maderas, crema negra, pachulí, lirio especiado, benjuí, vainilla, miel y ámbar.

La fragancia en su partida presenta notas de resina marcadas e intensas sin llegar a un extremo denso, combinado con ideas de vainilla chocolatada y aires de incienso y maderas tipo cedro con dejos de verde de bosque y tierras húmedas tipo musgo, sobre una base de características animales algo confusas ya que por momentos dan ideas de aromas distorsionados. En fase media a unos 30 minutos de aplicado la fragancia pierde rápidamente la veta inciensada y de verdes de bosque manteniendo una línea paralela más cercana al ámbar ligeramente tostado, con aumento de capas tibias y limpias que son cercanas al ámbar pero también dan la idea de flores oscuras, con la veta animal al fondo y dando la idea de un cuero natural recién curtido, parecido al aroma de talleres de marroquinería o reparadoras de artículos de cuero. La vainilla baja en intensidad asociándose a la idea de tibieza, apareciendo sobre la hora y media mayores ideas a flores de la familia de las rosas dulces y clásicas, con pequeñas cargas especiadas e ideas licorosas florales oscuras menos intensas que las presentes en Dior Addict y XS Black que también usan flores con una intención oscura. A 3 horas la fragancia comienza a dar sorpresas, con un aumento de la línea verde que llega a recordar un pachulí e incluso un vetiver masculino que sumado al ámbar con cuero y algo de maderas recuerda una fragancia de hombre de los años ochenta, con una intensidad alta que llena una habitación y resultando por momentos intrusiva, con las flores volviéndose neutras y agregando una línea jabonosa que compensa la intensidad del ámbar y cuero, retomando niveles de intensidad normales hacia las 6 horas donde sigue dominante una resina al cedro con un residual de cuero natural al fondo y niveles especiados suaves y secos con un breve recuerdo de chocolate a la vainilla y un punto de mora que parece venir de una rosa. En fase final se sienten cruces de madera seca con adiciones de un pachulí confitado tipo Angel de Thierry Mugler que a la vez tiene mentolados verdes de bosque, con la vainilla uniéndose con las resinas para dar un tono de caramelo untuoso y un poco tostado, intenso pero sin ser denso y con rasgos imprecisos de flores al fondo por una idea de pétalos y polen, marcando todavía algunos residuales de cuero y chocolate, más unos especiados de pimienta y canela amaderadas que perduran como estela ambiental sobre las 48 horas de aplicado.

La fragancia sigue líneas diferentes a su predecesor Sensuous, tal vez conservando un concepto central de maderas pero cambiando el enfoque hacia un estilo más agresivo, más intenso y con mejor poder de memorización al conseguir una combinación inusual de notas que van del inciensado puro al ochentero masculino, pasando por unos verdes de bosque breves. Por la tendencia que tiene el perfume hacia las resinas intensas y por la potencia de su aroma, a nivel de diario la fragancia tiende al invierno y a un uso al aire libre de caminatas elegantes no deportivas en la ciudad y con bastante interacción social, con una estela de gran poder que definitivamente se pierde en solitario y a nivel cotidiano. En oficina la fragancia es impactante e incluso intimidante por momentos, capaz de equiparar la potencia de un perfume masculino y enfrentarlo de par a par, con una tendencia autoritaria que marca presencia en pasillos y en eventos como reuniones o charlas, con la recomendación constante de cuidar la cantidad aplicada para evitar condiciones de intrusividad que son fáciles de conseguir en espacios muy pequeños o mal ventilados. Como aroma nocturno el perfume muestra su punto fuerte en el segmento semiformal a formal tipo galas y matrimonios por el lado elegante y repitiendo una idea de cenas de negocio que hereda del estilo de oficina. Por el lado romántico presenta una situación algo compleja ya que es un aroma que basa su fortaleza en resinas que se sienten sensuales e impactantes, pero que por algunos puntos masculinos puede establecer cierta distancia o intimidación ante los hombres, dando la idea que estas vetas están insertas en el aroma como puntos agradables y atractivos para quien usa el perfume con fines de disfrute personal. Rango de edad entre 30 y 60 años a nivel natural, sobre 25 si se busca una imagen agresiva un poco forzada.