Guess Man by Guess

Esta fragancia del 2006 es el primer producto masculino de Guess creado por Parlux, poseedor de la licencia de la marca desde el año 2003. Al igual que la versión femenina lanzada al mercado el año anterior, el frasco del perfume está envuelto en metal dejando libre una zona con la forma de la letra "G" en líneas bastante cuadradas al igual que la botella. En el sitio web de Parlux declaran que las notas aromáticas de este perfume son:  bergamota, ozono, manzana, pimienta blanca, jengibre y nuez moscada.

La partida de la fragancia se siente limpia y clásica, con vetas frescas cercanas a la lavanda que se solapan a menudo con una capa más terrosa entre madera con especies. Se siente la presencia a nivel de soporte de algunos frutales del tipo bergamota que dan el inicio fresco y que tienden a integrarse con la lavanda. En fase media mantiene la lavanda en tono de agua con una sensación de agua de especies, sin llegar a la pimienta pero quedándose en tonos de la familia de la madera hacia la nuez moscada. A 2 horas de aplicado sigue manteniendo la misma línea de lavanda suave sobre agua especiada, con una ligera inclinación al enebro y bastante presencia de maderas y nuez moscada que dan el tono seco a la fragancia. Curiosamente a nivel ambiental la lavanda toma tonos bastante acuáticos, dando la idea que existe un amplificador de aromas como el hedione que ayuda a proyectar los aromas más tenues a más distancia. A unas 6 horas de aplicado tiende a mostrar vetas de raíces tipo vetiver con especies frías más terrosas, al parecer jengibre por un dejo a sílica gel de efervescentes de vitamina C. Hay algunas notas verdes mínimas que dejan la sensación de una loción clásica, especialmente por el lado de las especies. En fase final destaca el jengibre como una capa seca complementada con madera especiada y mayor proporción de pimienta con lavanda, nuevamente en el estilo de una loción clásica sin irse al extremo viejo.

La fragancia sigue un estilo relativamente clásico dentro del grupo de fragancias jóvenes, con un estilo fresco veraniego que se adapta bien a inviernos no muy fríos y que encaja bien en un estilo de diario cotidiano, con mejor presencia en oficina por el corte semiformal que tiene, por la lavanda limpia y los finales especiados a la madera. El mismo estilo limpio clásico parece marcar una preferencia por escenarios de día, perdiendo desplante en un evento nocturno y mostrando menor presencia que en oficina. En el campo romántico el final especiado puede que no sea de gusto general, nuevamente proyectándolo como un aroma de oficina fresco algo serio para destaque personal. Rango de edad entre 30 y 60 años.