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Jean Marie Farina Extra Vieille by Roger & Gallet

El nombre de Jean Marie Farina (originalmente Johann Maria Farina en alemán) tiene cierto renombre dentro de la historia de la perfumería, ya que fue el creador de la primera agua de colonia en el año 1709 (en la ciudad alemana de Köln, traducida como Colonia y patentada en 1806) y, con bastante acierto, el iniciador de la primera casa comercializadora de perfumes, la cual fue adquirida por Armand Roger y Charles Gallet en 1862. Esta versión busca ser fiel al aroma original de casi 300 años y que cuenta entre los famosos que la han usado a Mozart, Beethoven, Napoleón, la mayoría de la nobleza europea del siglo XIX, Oscar Wilde, Marlene Dietrich, Indira Gandhi y Bill Clinton. La formula se basa principalmente en cítricos como bergamota, limón, nerolí y extracto de petit grain, junto a verdes como romero y tomillo, más agregados de claveles y rosas, apelando a una denominación "Extra Vieille", que viene a ser el equivalente a un "Reserva" haciendo la similitud con licores, vinos o quesos.

En partida la fragancia recuerda mucho a la colonia 4711 (creada 100 años después y por un tiempo colgándose ilegalmente del apellido Farina), retomando el estilo de los aromas tradicionales que giran en torno a todas las variantes el limón: se siente el extracto de limón artesanal mezclado con muchas variantes en torno al limón, como el nerolí y el extracto de petit grain, todos dominando en forma exclusiva esta fase y sin aceptar otras notas paralelas de otras familias como la verde o la especiada. En fase media tiende a separarse del aroma cítrico aromático para desarrollar un tono verde seco y levemente cargado a las raíces, con romero bastante vegetal (no tan aromático como el mediterráneo usado en comidas) y extracto de limón pero más al fondo. El final en primera instancia es verde seco, pero al oler con más detención afloran los tonos de limón que realzan los verdes en un estilo mediterráneo artesanal, con tomillo y romero en estados más naturales.

A pesar que esta es prácticamente la fragancia original que sentó la base para toda la perfumería del siglo XX, este factor juega en contra si se busca exclusividad, ya que el aroma me recordó muchas fragancias que había olido cuando era pequeño, incluyendo la 4711 y más de una colonia fresca nacional que usaba mi mamá, algún pariente cercano mayor o incluso mi hermano de bebé. Se siente de diario, relajada y personal para uso en verano como aroma refrescante para combatir el calor, y aunque en partida es unisex la fase media y final tiene una inclinación maderosa más masculina. En el resto de los escenarios, como el uso de oficina, nocturno o romántico donde es deseable un componente extra que destaque por encima del uso diario, la fragancia no aporta nuevas ideas apegándose a un uso más cotidiano. Rango de edad casi libre y personal, sobre los 20 años.