Fantasy by Britney Spears

Creado el año 2005 y un año después de la primera fragancia bajo el nombre de la cantante Britney Spears, Fantasy se diseñó con un grado de libertad mayor (su antecesor Curious seguía un patrón aromático más tradicional, por ser primera vez que entraba a un mercado incierto) y con mayor uso de notas exóticas, como bizcochos, orquídeas chocolate, membrillos y kiwis. La idea de la mezcla es inspirar ciertos recuerdos de la niñez, con mundos fantasiosos de hadas y magia por medio de notas dulces. El hecho de usar este concepto también refleja cierta seguridad en el mercado que seguía a estas fragancias, en su mayoría adolescentes y mujeres bajo los 30 años.

La fragancia la olí junto con un Provocative Interlude de Elizabeth Arden, que me dieron a probar para que comparara ciertas notas similares. Si bien ambos tienen tonos dulces algo vainillosos tipo postre en la partida, el Fantasy presenta notas frutales rojas más intensas, algo acuáticas y jugosas tipo sandía (el sito oficial de Britney Spears dice que son lichís rojos con membrillo y kiwi). En notas medias se carga al dulce levemente vainilloso, que parece ser una nota de extracto de bizcocho (posiblemente aromatizado a la vainilla y azucarado). Hay una nota de fondo, que la vendedora dijo que era chocolate blanco pero revisando el sitio web oficial de la fragancia corresponde en realidad a una orquídea chocolate. La flor efectivamente desprende un aroma dulce, algo achocolatado pero sin acercarse a un aroma de una barra de chocolate bitter o de granos de cacao tostados. Tanto el bizcocho como el tono chocolate cubren al resto de las notas florales (se esperaba jazmín) y las frutas de la partida. Hacia el final las notas dulces de bizcocho se concentran en una sensación de vainilla azucarada, con dejos de chocolate en polvo (la flor chocolatosa se siente seca, no como una barra más grasa de chocolate). Muy en el fondo hay un tono de fruta roja impreciso, que queda nublado por la vainilla, y tonos más secos y levemente orientales de madera.

Aunque se siente dulce el perfume no alcanza tonos exclusivos del invierno, sintiéndose lo suficientemente fresca para un uso de verano. Tiene un estilo no denso agradable para uso diario y no intrusivo en oficina. Desde la fase media la fragancia baja bastante en intensidad, dando una sensación más de día que de noche y en estilo informal. En el lado romántico no aporta mucho ya que los dulces no alcanzan estilo gourmand (a pesar de la nota de bizcocho) y las flores no apuntan a un estilo seductor. Aunque el concepto original apuntaba a un rango adolescente, la fragancia resultante se siente bastante apropiada para un rango de edad algo neutro, entre 20 y 50 años.