Baby Doll by Yves Saint Laurent
Creada en 1999 y en parte inspirada como una versión más joven y fresca de YSL Paris de la década de los 80, la fragancia sorprende por tener una partida bastante más juvenil que otras fragancias de la línea de Yves Saint Laurent existentes a esa época (como Rive Gauche o el mismo YSL Paris, orientados a un segmento más cuarentón) gracias al uso de notas de frutos rojos y piña como complemento a flores rosadas como la fresia.
La partida que tiene este perfume es bastante frutosa y juvenil, con notas de pomelo y piña que se sienten a la primera olida, junto a frutos rojos que se agregan de a poco y un dejo floral femenino de fondo. En notas medias se mantiene la piña bastante fragante, más otro fruto entre rojo y tropical. La flor que se sentía femenina en la cabeza parece ser una fresia rosada y con el tiempo se siente una rosa, que mezclada con la piña da una fragancia en la línea del Gucci Envy o el Pleasures Exotic, pero con un dejo a frutos rojos y fresia. Con el tiempo la nota de piña se apaga, quedando notas florales clásicas que opacan a la fresia rosada... en especial hay una nota floral que se complementa a la rosa en la veta tradicional, y que parece ser un lirio del valle por su intensidad. En notas de base las frutas se sienten muy acuáticas y rojas, ya no tanto como piña si no más como una sandía o frambuesa suave y no ácida, mezclada con flores también acuáticas hacia las rosas. La madera es mínima en favor de los tonos florales y puede haber una nota de ámbar o vainilla que aporta tonos dulces.
En aspecto general, Baby Doll se siente como la fragancia más juvenil de la línea Yves Saint Laurent, pero manteniendo una base clásica sin caer en un aroma quinceañero. Por frescura, y en especial por la nota de piña, parece apropiada para un verano, pero las notas florales con presencia la hacen también apropiada para un uso invernal. Es agradable para un uso diario y aunque es joven y pudiera dar una idea de informal, tiene una base elegante que la hace bastante adecuada para una oficina. Los tonos rosados dan una idea de feminismo, menos alegre que otras fragancias rosadas en la línea de la fresia, pero adecuada para un uso romántico. Curiosamente, la mezcla de frutas y flores tradicionales da la idea de una fragancia pensada para alguien joven en una situación elegante, lo que calza con una fiesta, matrimonio o gala nocturna. El rango de edad tiene una partida joven, desde los 15 o 18 años en situación formal, o entre los 20 y 40 años para situaciones de diario o más informales.