Les Sorbets de Nina by Nina Ricci

Esta fragancia de comienzos del 2019 es uno de los 3 lanzamientos de temporada que realizó la marca Nina Ricci para los productos Nina, Luna y Belle bajo el nombre de Les Sorbets siguiendo a la colección Les Monstres del año anterior, con Les Sorbets de Nina planteando una versión muy fresca del praliné de Nina del 2006 al combinarse con grupos cítricos y florales. El envase considera un diseño que mantiene la sección superior del spray de Nina en tonos dorados pero cambiando el cuerpo de vidrio a la versión usada por La Tentation de Nina del 2014 que tiene una forma de manzana con una sección faltante a modo de un mordisco, con toda la botella teniendo un color rosado alineado con la tonalidad pastel de la serie Les Sorbets. En el sitio de Nina Ricci indican que las notas principales de este perfume son: limón, mandarina, frambuesas, gardenias, jazmín y praliné.

En partida la fragancia presenta un inicio en notas altas de limón con indicios cruzados de fruta roja, agregando a partir de los 5 minutos un picor de jengibre que produce una apariencia de gas carbónico unido a mandarinas y que avanza a los 10 minutos a un desarrollo de grosellas rojas no ácidas con limón verde que se afinan a los 15 minutos en una combinación de pomelo amarillo y jengibre con desvíos de la mandarina a un azucarado neutro, destacando a los 20 minutos una presencia brillante de frutas rojas a la mandarina que reducen la nota de pomelo a jengibre agregando secciones florales a la gardenia y peonía. En fase media a los 30 minutos el perfume ajusta el equilibrio de las notas aumentando los aportes de las flores que se mantienen neutras en una combinación de peonías con una reducción de las gardenias que se muestran como un jabón insinuando aportes de jazmín y con un predominio de una capa de jengibre al pomelo, presentando a 1 hora unos acabados ácidos que a nivel ambiental recuerdan la naranja roja de Amor Amor de Cacharel. Al alcanzar las 2 horas el perfume incrementa los tonos de azúcar combinando alimonados de pomelo con vetas rojas de peonías inclinando el aporte de jabón a jazmines y reduciendo el jengibre a pimienta rosada de tallos, suavizando el aroma a las 3 horas en peonías polvosas al musk con una base en verdes de jardín con tallos amaderados que mantienen un eco menor a jengibre junto con un jazmín limpio que entrega un acabado de detergente de ropa, tomando a las 4 horas un formato floral más calmado y con presencias polvosas en peonías con ecos a grosellas rojas disminuidas con neutros de jazmín y verdes apagados de fresias y lirios del valle sostenidos sobre una capa más alta de caramelo azucarado. Sobre las 6 horas la fragancia se mueve en aportes de fruta roja derivada de peonías con puntos suaves de azúcar con caramelo a la vainilla reteniendo algunos aportes verdes que se confunden entre cítricos y líneas florales con un brillo particular de madera especiada, predominando a las 9 horas una línea de caramelo azucarado que incluye características de flores con un pequeño matiz frutal yendo hacia gardenias y magnolias, destacando a las 12 horas una combinación ligera entre peonías, vainilla y un azucarado que incluye una sección limpia de flores cremosas a la gardenia. En fase final a las 24 horas el perfume se suaviza hacia un lado de florales cremosos donde se percibe la participación de gardenias con musk como una evolución del tono de azucarado, sintiéndose en el fondo complementos frutales al durazno y grosellas rojas que terminan por reemplazar a la gardenia.

La fragancia se siente como una propuesta de corte equilibrado que se apega a un balance entre puntos frutales y vetas de caramelo con algunos matices polvosos que cobran notoriedad en la fase media, siendo el perfume de presencia más suave dentro de la serie Les Sorbets y a nivel de diario sintiéndose como un aroma fresco de primavera y verano que puede encajar en actividades deportivas ligeras. En oficina el aroma se muestra delicado y discreto decantando con el tiempo en flores polvosas que tienen un fondo dulce no explícito de caramelo y que por momentos sigue un estilo parecido al de una edición suavizada de Amor Amor de Cacharel, cubriendo los segmentos informal y semiformal con un efecto memoria ligeramente sobre la media. En el caso nocturno el aroma puede sentirse algo suave en un público que asiste a lugares de ambiente contaminado, apuntando a situaciones informales de espacios abiertos o íntimos en compañía de amigos y que se sostiene en eventos semiformales como un aroma fresco y pulcro de presencia delicada y algo personal de cenas con conocidos sin tener un gran desplante o complejidad asociada a un protocolo social, sin alcanzar a llegar al extremo formal. A nivel romántico el perfume se siente como una interpretación inocente de una base floral clásica con puntos frutales alegres pero de presencia muy mesurada, mostrándose como una buena alternativa para salidas con pareja conocida. Rango de edad entre 20 y 60 años.