Mauboussin pour Lui Time Out by Mauboussin
Esta fragancia del 2015 aparece en el mercado al mismo tiempo que la edición Mauboussin pour Lui in Black, ambas siendo sucesoras de Mauboussin pour Lui lanzado en el 2012 y con los 2 perfumes manejando un concepto de un hombre dominado por el reloj que determina su vida cotidiana llegando a un momento límite en que deja todo atrás, con la edición Time Out siendo una invitación a empacar y huir de manera imprevista a otra zona horaria domando al reloj, liberándose de las restricciones y tomando el tiempo sólo para él disfrutando de la brisa fresca del mar y el calor de la arena. El envase aprovecha la forma de botella diseñada para Mauboussin pour Lui con un frasco de lados planos donde la cara frontal incluye una hendidura donde se ubica una placa plateada con el nombre del perfume, conservando un tapón cilíndrico plateado y agregando como detalles un vidrio de color azul acuático y el nombre de la edición "TIME OUT" en un costado de la botella en letras mayúsculas con una de las palabras estando volteada con respecto a la otra. En el sitio de Mauboussin Parfums describen a la fragancia con estas notas: limón, acordes marinos y palisandro.
En partida la fragancia tiene una apariencia fresca en un cítrico diluido con cuerpo de agua, apareciendo a los 5 minutos una lavanda suave que desprende aromas de plastilina sobre un desarrollo herbal con complementos a los 10 minutos de nuez moscada y naranja seca, teniendo el perfume a los 15 minutos un acercamiento de la sección herbal a una brisa oceánica con insinuación a los 20 minutos de tibios de ámbar con naranja amarga, romero y polen sobre un fondo marino a la salvia. En fase media a los 30 minutos el aroma continúa sobre notas de salvia y lavanda con un acabado acuático que da pasos por pomelo amargo, llegando a 1 hora a un desarrollo en aumento de maderas al cedro con un efecto de incienso. A las 2 horas la fragancia mantiene a nivel ambiental una combinación de incienso con vetas marinas, dando la idea de un acabado tipo Horizon de Guy Laroche con adicionales de enebro, lavanda, olíbano y sándalo con cáscara de naranja, incrementando a las 3 horas una presencia verde en menta de enebro con hojas de lavanda que siguen dando una apariencia acuática fría pero cambiando el fondo marino por un tono más terrestre de salvia al cuero y musgo con madera, sumando a las 4 horas un momento de alza de la lavanda que se siente como un atalcado más seco con mentol fresco. Sobre las 6 horas el perfume desarrolla los tonos fríos hacia el lado amaderado especiado, destacando una nuez moscada con mentoles de enebro y lavanda junto con un punto dulce menor de corte cítrico que está entre mandarina y limón, recordando secciones de otras fragancias en la línea de Kenzo Homme y las ediciones de verano de 212 Men de Carolina Herrera, pasando a las 9 horas a una tonalidad completamente terrestre basada en pomelo y herbales de cocina que superan a la lavanda y se mueven en torno a romero y albahaca, aproximándose a las 12 horas a un estilo todavía frío pero más limpio y atractivo centrado en tonos al ozono derivados de cítricos con un fondo verde más tibio a la madera. En fase final a las 24 horas el perfume reduce a un mínimo el efecto marino que queda centrado en combinaciones de enebro y salvia, agregando nuevas variaciones amargas que se acercan a fondos de bosque en musgo y cuero húmedo con una madera especiada intercalada y residuos de pomelo verde.
La fragancia representa un escape a un lugar lejos de la ciudad entregando un aroma frío y rodeado de una tonalidad terrestre que imita una brisa marina, a modo de un relajo de fin de semana o unas vacaciones en un nuevo clima, a nivel de diario apuntando a un uso funcional de primavera y verano que contiene vetas de presencia atemporal al volver a la ciudad, siendo un aporte refrescante en actividades deportivas mesuradas. En oficina el perfume se apega a una línea clásica limpia y no intrusiva de base verde clásica con giros acuáticos, teniendo una apariencia correcta aunque por momentos seria dentro del segmento informal y semiformal, teniendo un efecto memoria mediano al sentirse similar a otras propuestas comerciales sin tener una nota escapada o diferente mejor elaborada como el caso de las algas de Aqva de Bulgari. En el escenario nocturno la fragancia se inclina a un uso de climas cálidos encajando en una brisa fresca de ciudad o costas que se salta al publico adolescente pasando directo a un rango de edad todavía joven de pubs y reuniones con amigos dentro de lo informal y que se vuelve un poco más elaborado en lo semiformal, con los tonos marinos dejando una impresión que no alcanza la elegancia y sofisticación de un evento formal. A nivel romántico la combinación de notas se siente con un propósito personal que busca relajar y aislar de lo cotidiano en lugar de pretender seducir o conquistar. Rango de edad entre 25 y 60 años.
En partida la fragancia tiene una apariencia fresca en un cítrico diluido con cuerpo de agua, apareciendo a los 5 minutos una lavanda suave que desprende aromas de plastilina sobre un desarrollo herbal con complementos a los 10 minutos de nuez moscada y naranja seca, teniendo el perfume a los 15 minutos un acercamiento de la sección herbal a una brisa oceánica con insinuación a los 20 minutos de tibios de ámbar con naranja amarga, romero y polen sobre un fondo marino a la salvia. En fase media a los 30 minutos el aroma continúa sobre notas de salvia y lavanda con un acabado acuático que da pasos por pomelo amargo, llegando a 1 hora a un desarrollo en aumento de maderas al cedro con un efecto de incienso. A las 2 horas la fragancia mantiene a nivel ambiental una combinación de incienso con vetas marinas, dando la idea de un acabado tipo Horizon de Guy Laroche con adicionales de enebro, lavanda, olíbano y sándalo con cáscara de naranja, incrementando a las 3 horas una presencia verde en menta de enebro con hojas de lavanda que siguen dando una apariencia acuática fría pero cambiando el fondo marino por un tono más terrestre de salvia al cuero y musgo con madera, sumando a las 4 horas un momento de alza de la lavanda que se siente como un atalcado más seco con mentol fresco. Sobre las 6 horas el perfume desarrolla los tonos fríos hacia el lado amaderado especiado, destacando una nuez moscada con mentoles de enebro y lavanda junto con un punto dulce menor de corte cítrico que está entre mandarina y limón, recordando secciones de otras fragancias en la línea de Kenzo Homme y las ediciones de verano de 212 Men de Carolina Herrera, pasando a las 9 horas a una tonalidad completamente terrestre basada en pomelo y herbales de cocina que superan a la lavanda y se mueven en torno a romero y albahaca, aproximándose a las 12 horas a un estilo todavía frío pero más limpio y atractivo centrado en tonos al ozono derivados de cítricos con un fondo verde más tibio a la madera. En fase final a las 24 horas el perfume reduce a un mínimo el efecto marino que queda centrado en combinaciones de enebro y salvia, agregando nuevas variaciones amargas que se acercan a fondos de bosque en musgo y cuero húmedo con una madera especiada intercalada y residuos de pomelo verde.
La fragancia representa un escape a un lugar lejos de la ciudad entregando un aroma frío y rodeado de una tonalidad terrestre que imita una brisa marina, a modo de un relajo de fin de semana o unas vacaciones en un nuevo clima, a nivel de diario apuntando a un uso funcional de primavera y verano que contiene vetas de presencia atemporal al volver a la ciudad, siendo un aporte refrescante en actividades deportivas mesuradas. En oficina el perfume se apega a una línea clásica limpia y no intrusiva de base verde clásica con giros acuáticos, teniendo una apariencia correcta aunque por momentos seria dentro del segmento informal y semiformal, teniendo un efecto memoria mediano al sentirse similar a otras propuestas comerciales sin tener una nota escapada o diferente mejor elaborada como el caso de las algas de Aqva de Bulgari. En el escenario nocturno la fragancia se inclina a un uso de climas cálidos encajando en una brisa fresca de ciudad o costas que se salta al publico adolescente pasando directo a un rango de edad todavía joven de pubs y reuniones con amigos dentro de lo informal y que se vuelve un poco más elaborado en lo semiformal, con los tonos marinos dejando una impresión que no alcanza la elegancia y sofisticación de un evento formal. A nivel romántico la combinación de notas se siente con un propósito personal que busca relajar y aislar de lo cotidiano en lugar de pretender seducir o conquistar. Rango de edad entre 25 y 60 años.