Sexy Graffiti 2011 by Escada

Este perfume del 2011 es parte de una colección que reedita 3 fragancias como las representantes de las mejores fragancias de verano de Escada en 20 años, junto con Island Kiss y Rockin' Rio, con Sexy Graffiti siendo una reedición de la versión original del 2002 que ahora se inspira en una fiesta de cocktail en una tarde de verano en Nueva York, cambiando el calor de las calles de la ciudad por una sensación cristalina en un rascacielos. El envase vuelve a ser el mismo usado en las ediciones de verano de Escada, agregando el grabado de la silueta de un rascacielos sobre un degradado en el vidrio que va de un rosado intenso en la parte superior hasta un transparente en la base, con un tapón alto plateado y con una cinta también rosada que lleva un colgante con forma de copa. En el sitio de Escada señalan las siguientes notas aromáticas para el perfume: frambuesas, frutillas, pomelo, menta, lirios del valle, peonías rojas, violetas, cashmeran, musk y vainilla.

En partida la fragancia se muestra frutal, dulce e intensa, con ideas de maracuyá fragante y tropical que se mueven pronto hacia frutos rojos que mantienen la acidez de la maracuyá, mostrando inclinación hacia frambuesas mesuradas con una base floral neutra y limpia que se mueve entre fresias y lirios del valle. En fase media a 30 minutos el aroma presenta una estela ambiental notoria de frutos rojos, bajando la presencia de maracuyá en favor de frambuesas menos ácidas con grosellas más azucaradas que muestran evolución hacia vainilla, bajando la acidez de las frambuesas a 1 hora de la partida. A unas 3 horas se mantienen como dominantes las capas de frambuesa que se inclinan hacia grosellas rojas dulces de baja acidez y mayor presencia azucarada atribuible a una vainilla, dejando paso al fondo a grupos de frutos oscuros de la familia de las grosellas negras y moras con casis con rasgos de violetas. La idea de grosellas dulces balanceadas con rojos se mantiene por las siguientes horas, marcando a las 8 horas un retorno de la nota ácida de maracuyá mezclada con mandarinas concentradas, acercándose a una idea de cáscara de pomelo y manteniendo capas florales suaves y neutras al fondo, las cuales toman mayor notoriedad a las 11 horas cuando parte de los azucarados tiende a pétalos polvosos dulces con puntos de frutillas, manteniendo la base de vainilla. En fase final aumenta la nota de vainilla junto con la sensación de cremosidad del perfume, manteniendo al grupo rojo como una línea constante azucarada de frutillas más marcadas y frambuesas más bajas, con ideas de peonía como un segundo aporte más vegetal de frutales rojos y agregando un fondo frío que recuerda una influencia de menta pero sin determinar una veta verde.

La fragancia, como representante de la colección completa de fragancias veraniegas de Escada, mantiene muchas de las líneas características de los lanzamientos anuales de temporada al destacar un grupo frutal intenso de buena estela que desprende ideas anímicas y optimistas cercanas a un estilo de diario veraniego, algo denso para usar a pleno sol o en actividades deportivas pero mejorando en desplante en interiores y hacia el final de la tarde en ocasiones de corte social notorio, sin sentirse desperdiciado en solitario o en momentos cotidianos. En oficina la fragancia es llamativa y con personalidad, con un efecto memoria que destaca sobre el promedio pero que deja espacio a confusión con otras fragancias frutales dulces, algo irreverente por momentos y tal vez poco serio en reuniones profesionales pero empatizando entre colegas y creando sensación de confianza con clientes y público en un escenario semiformal a informal. Por el lado nocturno el perfume muestra un punto fuerte en fiestas dinámicas de verano con contaminación ambiental o en reuniones con amigos en el ámbito informal, funcionando también como fragancia semiformal alegre y perdiendo algo de terreno al aventurarse hacia situaciones más formales como fiestas de gala. Por el lado romántico el aroma es chispeante y atractivo, con una buena carga sensual joven a distancia capaz de dar confianza para establecer una conversación con un desconocido. Rango de edad entre 20 y 45 años.