My Givenchy Dream by Givenchy

Este perfume del año 2008 es la tercera fragancia de Givenchy creada especialmente para el mercado viajero y orientada a ser vendida principalmente en tiendas de tránsito como aeropuertos y Duty Free. El frasco sigue líneas cúbicas muy parecidas a sus dos antecesores Lovely Prism y Absolutely Givenchy (lanzados como edición anual el 2006 y 2007, siendo Be Givenchy la edición del 2009), con un aroma de tendencia algo lineal. Las notas principales que aparecían mencionadas en el frasco del tester eran: casis, pétalos de rosas y sándalo.

La partida de la fragancia es bastante frutal, inclinada a lo que parecen ser maracuyás con naranja roja y grosellas, con un dejo azucarado que recuerda algo de Hypnôse de Lancôme. En fase media perdura el frutal en una tendencia algo lineal a primera impresión, destacando la naranja roja con algunos tonos rojos frescos, dulces azucarados y cítricos frescos que se aproximan bastante a la veta dulce frutal de Women'Secret y de Mandarina Duck Cute Pink. Por momentos los tonos frutales alcanzan niveles bastante densos y de alta estela aromática que bordean lo sintético, acercándose al estilo de la línea Incanto de Ferragamo y a las naranjas rojas del Amor Amor de Cacharel. Los florales se sienten solapados por la fruta intensa, sintiéndose algo de jazmín floral que le da un cuerpo limpio a la mezcla. Ya en la fase final sufre una caída importante en su intensidad comparada con la gran estela de la partida, conservando todavía el tono dulce azucarado con frutales aromáticos rojos a la mandarina y con el jazmín casi residual.

La fragancia se siente bastante flexible, en parte por una línea de diario muy veraniega marcada por unos frutales dulces jóvenes azucarados que recuerdan otras fragancias frutales como los Incanto de Ferragamo y algo de Pleasures Exotic de Esteé Lauder, y por otro lado como una fragancia de oficina alegre, bien estructurada y sólida, con una estela aromática bastante notoria y buena presencia a pesar de no presentar muchas variaciones en su aroma y quedarse en una tendencia algo lineal. Los dulces frutales intensos destacan bastante en la noche como aroma de fiestas veraniegas y con una intensidad que consigue sobrepasar a otros aromas a su alrededor. Por el lado romántico los dulces rozan lo gourmand, produciendo un buen grado de adicción que invita a seguir oliendo y a acercarse más para percibirlo directamente a flor de piel. Rango de edad bastante amplio, de 15 a 60 años.