Flower By Kenzo Eau de Lumière by Kenzo
Esta fragancia del 2017 se incorpora a la línea de ediciones creadas a partir de Flower by Kenzo del año 2000, ubicándose a continuación de otras propuestas como In the Air, Essentielle, Tag y L'Elixir, con Eau de Lumière siguiendo con el aroma imaginario de una flor de amapola que naturalmente no tiene olor pero que captura el aroma de la luz que la rodea mientras está de manera solitaria en la ciudad. El envase sigue el diseño de botella curvado de Flower by Kenzo del 2000 donde el tapón tiene dibujada una flor roja, destacando un líquido de tono rosado. En el sitio de Kenzo Parfums señalan en la descripción de la fragancia las siguientes notas: bergamota, peras, rosa búlgara, jazmín y musk.
En partida la fragancia tiene un inicio centrado en una nota frutal que se afina en manzana y peras montadas sobre un fondo floral y que a los 5 minutos presenta indicios de violetas similares a los de la primera versión de Flower by Kenzo, volviendo el aroma a los 10 minutos a un tono de manzanas ásperas que agregan a los 15 minutos un aire de calone verde, suavizándose la fragancia a los 20 minutos en peras con un fondo floral atalcado. En fase media a los 30 minutos el perfume mantiene un centro de peras con un alimonado de fresias sobre violetas al musk, variando la capa frutal a tonos todavía dulces pero más astringentes que se mezclan con tintes de peonías, resaltando a 1 hora una base tibia y dulce de violetas polvosas mucho más notoria con una sección fría al jazmín. A las 2 horas el perfume baja el aporte de manzana y peras sosteniendo un tibio de peonías con un musk alto que se confunde con el efecto de talco de violetas, ocasionalmente apareciendo una nota de limón como variación de la pulpa de manzana verde, con la nota de pera fundiéndose con los grupos florales realzando acabados de lirios del valle y fresias que se colocan en paralelo con una violeta más cremosa y al musk con un tinte de duraznos y un efecto picante de cítricos al borde de una madera especiada, presentando a las 4 horas matices florales más inocentes y clásicos que recuerdan secciones muy particulares de Anaïs Anaïs de Cacharel pero con la manzana, la pera y los cítricos resaltando una veta de piña. A las 6 horas la fragancia agrega una nueva línea de duraznos que se siente cercana a gardenias y a polen de ylang-ylang, sosteniéndose sobre una base al jabón de peonías con madera de tallos donde el tono de musk absorbe a la manzana y las peras, aumentando a 9 horas la profundidad del jazmín que incluye tintes de peonias y secciones de madera especiada fresca con un dulzor de resinas al ámbar, destacando a las 12 horas un fondo de jabón de gardenias y jazmines al polen con un aporte más notorio de violetas polvosas y un punto ácido de peonías. En fase final a las 24 horas el perfume se compacta en torno a una nota cremosa de duraznos y damascos que abre referencias a gardenias y tuberosas sin llegar a granos de tonka, volviendo en el fondo la nota de rosas que incluye vestigios de peonía y se inclina a un ácido de magnolias sobre una base de madera delicada al musk con un punto metálico de violetas al iris.
La fragancia se diferencia de sus predecesores en la línea Flower en el uso de una nota más alta de frutas, equiparando esta propuesta con una referencia a las violetas con musk usadas en la primera edición de esta serie, mostrando tonos alegres con variantes verdes y cítricas que a nivel de diario se mueven de manera natural en épocas de primavera y verano, con la base floral tibia restringiendo un aporte funcional en actividades deportivas. En oficina el aroma se apega a una línea optimista y empática con colegas, cubriendo el segmento informal y adaptándose en lo semiformal, consiguiendo un efecto memoria sobre el promedio por lo estable de las notas centrales que se muestran independientes entre sí y con una proyección ambiental no intrusiva sobre una distancia de conversación, con la nota de manzana teniendo algunos momentos de confusión con un clon de DKNY Be Delicious. A nivel nocturno la fragancia se adapta a un público juvenil en actividades informales donde las frutas y los cítricos verdes se hacen notar en fiestas y salidas con amigos, logrando también una imagen más calmada y limpia en el predominio central de flores polvosas que es complementado por las vetas ácidas verdes de las mismas frutas, pudiendo ser una opción correcta y artesanal con líneas correctas no densas ni complejas en eventos formales de climas calurosos. En lo romántico la combinación de notas se siente sincera y acogedora, combinando un enfoque alegre con uno femenino, funcionando en salidas con pareja conocida y creando una curiosidad no sensual en conversaciones con desconocidos. Rango de edad entre 20 y 60 años.