Rue Pergolèse Bullit pour Homme by Parfums Pergolèse Paris

Esta fragancia del 2015 es el tercer perfume masculino de la marca francesa Parfums Pergolèse Paris, siguiendo a los lanzamientos de Rue Pergolèse pour Homme y Rue Pergolèse Black pour Homme del año anterior, con Bullit conservando la filosofía de la marca de reflejar la elegancia y atmósfera de la ciudad de París con un aroma sin época, con un nombre que se asemeja al de la película policial "Bullitt" de Steve McQueen de 1968. El envase sigue la forma de botella planteada por sus predecesores, con un frasco de frente rectangular y caras planas con hombreras rectas de brillo metálico donde se sostiene un tapón cilíndrico transparente, destacando una placa dorada en la parte delantera que contiene el nombre de la marca, con Bullit diferenciándose por el uso de un líquido y tapón en tonos ámbar.

En partida el perfume centra su aroma en notas de café y cuero que van acompañadas de un efecto tibio cercano a vainilla y ámbar y que a los 5 minutos incluye un picor de canela, agregando a los 10 minutos aportes de un grano de tonka de apariencia alimonada donde la veta de canela crea un efecto limpio tipo jabón, realzando a los 15 minutos la nota de café que se mezcla con la canela desviándose a un sándalo, desarrollando a los 20 minutos un tono de confitado de pachulí montando sobre fríos de agua especiada. En fase media a los 30 minutos el perfume divide su aroma en verdes de pachulí con apariencia de caramelo montados sobre una base de madera y cuero, abriéndose a 1 hora a variantes verdes que se sostienen sobre la nota de canela e incluyen vetas frías de lavanda y mentol, mostrando en paralelo granos de tonka más concentrados que producen un eco de vainilla a la cumarina. A las 2 horas el perfume adquiere un matiz terroso que sigue basado en cuero con disminuciones de caramelo y reapariciones de café, sosteniéndose en la base una capa verde de mentol de cedro y lavanda con tonos de resina plástica al benjuí como derivada del ámbar con tonka, apagándose el aporte de canela en favor de una línea superior de vainilla neutra de apariencia seca, fundiéndose a las 3 horas la lavanda dentro de un terroso de apariencia más húmeda y menos verde que combina menta con cuero y agua de canela, con el benjuí volviendo a caramelo y granos de tonka, alcanzando a las 4 horas un tono más húmedo e invernal en cuero especiado donde se hace notar la base de pachulí. Al llegar a las 6 horas el perfume presenta aromas más amplios en sándalo, canela, nuez moscada y cedro con lavanda y té negro, aislando al fondo un punto preciso terroso y húmedo en cedro y cuero, desviando a 9 horas la canela hacia tabaco conservando una idea de cuero y pachulí al musgo con puntos altos en lavanda y cedro, desarrollándose a las 12 horas una veta verde más alta que proviene de cedro y pachulí manteniendo una base terrosa con más aporte de caramelo y tabaco. En fase final a 24 horas de aplicada la fragancia sigue sobre una línea de pachulí con cuero húmedo de acabado más picante provenientes de aportes de madera y agua especiada a la canela que están en segundo plano, destacando un nuevo punto de resina tibia con rasgos de tonka que se ve enturbiada por el pachulí y apunta a chocolate como un eco vago a la nota inicial de café.

La fragancia apunta a una estructura compuesta por varias notas aromáticas, por momentos con el perfume teniendo problemas para moverlas en una misma dirección o en torno a un centro estable que facilite distinguir el perfume a distancia, a nivel de diario sintiéndose como una opción fresca con aires clásicos de los años ochenta que se comporta como un atemporal pero con una pequeña preferencia invernal en el especiado con cuero al pachulí, siguiendo un formato de agua fresca que se adapta a actividades deportivas. En oficina la fragancia por momentos muestra una apariencia madura en el uso de notas clásicas múltiples, con una sección en particular de lavanda con agua de canela dando la impresión de un desodorante de diario menos serio que se nivela con la base de pachulí en un rango que va del informal al semiformal, logrando un efecto memoria que la mayor parte del tiempo se sostiene en lo mediano por una similitud con otros productos de perfumería clásica. En el caso nocturno la fragancia se adapta a espacios medianamente contaminados mostrando una imagen más oscura tipo pubs o eventos sociales dentro de lo informal pulcro y lo semiformal relajado, faltándole fuerza y notas principales más notorias o fuera de lo tradicional para destacar en el extremo formal. A nivel romántico el perfume se sostiene dentro de una línea seria y pulcra con tintes clásicos, apuntando a un disfrute personal en lugar de establecer un ambiente acogedor o sensual. Rango de edad entre 30 y 60 años.