Silver Scent Intense by Jacques Bogart

Esta fragancia del año 2009 de la marca de perfumes francesa Jacques Bogart aparece a 3 años de la creación de Silver Scent, siendo la primera variante que se prepara para este perfume, aprovechando gran parte de las notas originales pero dándole al aroma un giro más intenso. El envase sigue la forma de botella diseñada para Silver Scent, de frente rectangular y caras planas en color negro con una sección en la zona del cuello que se reduce manteniendo las caras rectas, agregando al frente la palabra Intense en letras rojas. Los sitios asociados a Jacques Bogart y a Groupe Bogart presentan registros contables y la historia y las marcas manejadas sin dar un detalle de la composición de sus perfumes, pero en el frasco del tester de la fragancia señalan la presencia de las siguientes notas: limón, naranja, flor de azahar, cardamomo, lavanda, nuez moscada, granos de tonka, madera de teca y aquilaria.

En partida el aroma presenta un grupo principal de lavanda con vetas de naranja amarga que tiene inserto un aire rojo que tiene algunas similitudes con perfumes de la línea de One Million de Paco Rabanne, mostrando a los 5 minutos una mejor precisión en el tono rojo que apunta a naranjas rojas, desarrollando a los 10 minutos una lavanda que va seguida de cerca por un enebro y que en conjunto superan a la naranja roja, ocurriendo a los 15 minutos in desarrollo aislado de violetas con musk que deja una idea de fragancia infantil tibia y levemente plástica, volviendo a los 20 minutos la nota de naranja amarga que es complementada por porciones mesuradas de plástico de flor de azahar. En fase media a los 30 minutos el perfume eleva gradualmente el aporte de flor de azahar que se mantiene en una línea de agua fresca y con dejos amargos, agregando vetas frías de lavanda donde surgen aportes esporádicos y punzantes de limón y pomelo que no superan el segundo plano, tomando un acabado más floral que su predecesor Silver Scent y que da la idea de lirios del valle, pasando pronto a geranios similares a los presentes en Individuel de Montblanc a 1 hora del inicio, pero con una interferencia de naranja roja con aspecto de jarabe concentrado. A las 2 horas la fragancia conserva tintes plásticos a la flor de azahar pero con un balance más cítrico y a la lavanda donde surgen matices verdes que insinúan la presencia de un cardamomo no picante y desarrollando una línea de estilo marino basada en la naranja amarga, elevando a las 3 horas el aporte de las bayas de enebro que se sienten mucho más notorias y absorbiendo el aporte plástico de las flores de azahar que prácticamente desaparecen al combinarse con lavanda y geranios que también van a la baja en favor de una naranja dulce con dejos amargos, volviendo a las 4 horas las notas de flor de azahar que van impulsadas por aportes de mandarina y que alcanzan a las bayas de enebro reduciendo su apariencia plástica. A las 6 horas la fragancia se siente más dulce al colocar en paralelo con las bayas de enebro un aporte de granos de tonka que contiene adicionales de naranja roja, surgiendo a nivel central una lavanda fresca que se abre a un agua especiada todavía indefinida y que se confunde con flor de azahar y amargo de cáscaras de naranjas, volviendo a las 9 horas las referencias intensas y dulces de naranja roja en un formato jabonoso y limpio que reduce la presencia del enebro favoreciendo el desplante de la flor de azahar junto con una cáscara de naranja menos amarga con mandarinas verdes, agregando a las 12 horas una capa cálida de madera que gira en torno a sándalo y cedro fresco con picores de pimienta, nuez moscada y vetiver, creando una apariencia más cremosa en la línea central de naranja con flor de azahar. En fase final a las 24 horas el perfume establece un centro aromático dominante de bayas de enebro que concentran la apariencia plástica de la fragancia donde la flor de azahar cae a un aporte verde, surgiendo unos picores discretos en la base en torno a nuez moscada y una impresión de agua especiada que remata en lavanda.

La fragancia mantiene algunos rasgos en común con la versión original de Silver Scent, en particular el efecto plástico de las flores de azahar sobre una base de lavanda, sin apuntar hacia las similitudes con Altamir de Ted Lapidus y proponiéndose como una variante menos cálida y más fría y floral en geranios con un tinte de lirios del valle que eleva la proporción de las bayas de enebro, teniendo una potencia adecuada que le permite destacar a nivel de diario como un aroma atemporal sin focalizarse como un agua fresca exclusiva de climas cálidos gracias al tinte plástico de corte urbano que lo acerca a inviernos bajo techo, por esta misma característica teniendo limitaciones en un uso deportivo. En oficina el aporte de bayas de enebro crea un efecto plástico similar al de las flores de azahar pero tomando una apariencia que se malinterpreta como tonos sintéticos de una fragancia o desodorante cotidiano, moviéndose sólo dentro de un segmento informal y con una intensidad que puede molestar si se aplica en exceso, con un efecto memoria que es bueno en lo preciso y lineal del aroma pero que también lo asocia con una idea de perfume sintético conocido. A nivel nocturno las características del acabado plástico y sintético del enebro también reducen el escenario de desplante de la fragancia a un segmento informal que va del adolescente a la mediana edad, tanto de fiestas como salidas con amigos, volviendo a repetir la situación de oficina de un desodorante cotidiano que no está a la altura de la situación o ceremonia de eventos semiformales o formales. En el caso romántico el aroma por las características intensas y ocasionalmente punzantes que presenta a corta distancia se orienta a una intención de disfrute personal. Rango de edad entre 20 y 45 años.