Lust by Lush

Esta fragancia del año 2010 es parte de la serie Gorilla Perfume de la marca de cosmética natural británica Lush, con Lust formando parte de la colección Greatest Hits y siendo pensado según el perfumista y co-fundador de Lush Mark Constantine como una mezcla floral centrada en un jazmín muy intenso de aspecto sensual e intoxicante que simbolizara la lujuria y la expresión de un deseo carnal irresistible, para usar en esos días o noches cuando se busca provocar y seducir. El envase sigue el formato de botella según tamaño de las fragancias de Lush, con las nuevas versiones teniendo una etiqueta en blanco y negro con la imagen de una mujer dibujada en un estilo artístico de los años 40 y 50, con las letras de la palabra Lust en rojo y un marco en dorado. En el sitio de Lush USA señalan el uso de las siguientes notas básicas: jazmín, ylang-ylang, rosas, vainilla y sándalo.

En partida el perfume centra su estructura en rosas frescas y tuberosas montadas sobre una base de tallos amaderados, siguiendo inicialmente un estilo de los años 80 pero luego agregando una traza verde indefinida que da ideas de romero mezclado con sándalo intenso, insinuando a los 5 minutos puntos de miel de ylang-ylang con dulces densos de jazmín, potenciando a 10 minutos la nota de sándalo que se siente ahumado como en otros perfumes de la marca pero diferenciándose en una veta adicional acuática al melón verde, volviendo a los niveles superiores la mezcla de rosas que se vuelven más densas y mezcladas con resina e inciensos volátiles a los 15 minutos, inclinando a 20 minutos las rosas hacia jazmín dulce. En fase media a los 30 minutos el aroma se siente más ligero y alimonado basándose en una flor de azahar con sándalo y turbios de resina, incluyendo referencias a tonos de madreselva y jazmines que se sienten fragantes a nivel ambiental y trayendo ideas parecidas a las de Anaïs Anaïs de Cacharel pero agregando un tono de agua herbal verde con resina a corta distancia, llegando a 1 hora con desvíos más volátiles de la sección de resina que rozan la idea de parafina o gasolina y que se enfocan en un jazmín polvoso y al polen que adquiere un matiz de jabón. A las 2 horas el perfume se focaliza en un aroma dominante de jazmines naturales muy densos que crean interferencias que van por peras y un agua fría de mandarinas a corta distancia que crea un picor parecido al de un especiado en nariz, cruzando a las 3 horas secciones verdes de flor de azahar y fresias manteniendo a nivel ambiental un aroma de Anaïs Anaïs, bajando el punto ambiental de madreselva a las 4 horas y combinando un jazmín que baja en intensidad con mezclas de ámbar cristalino tipo gálbano, miel de mimosas con dejos de almendras y secciones alimonadas que se apartan de la flor de azahar hacia fresias de base verde. Al pasar de las 6 horas la fragancia baja en parte su intensidad conservando una flor principal cremosa que comparte secciones de jazmín con miel rústica de mimosas y un retorno de una veta de agua fría y vegetal que incluye aportes de vainilla, rebajando la presencia de jazmín natural a las 9 horas en favor de un aroma más cítrico con dejos frutales centrados en fresias sobre una base de ámbar plástico y que vuelve a recordar un desarrollo de flor de azahar al jabón, llegando a las 12 horas con una mezcla floral más compacta y menos densa que se aparta de los jazmines en favor de tonos de polen con base verde y mezclas de crema de vainilla con peras, madera y musk tibio con aroma a piel. En fase final al llegar a las 24 horas la fragancia destaca una primera nota difícil de precisar pero que puede corresponder a una versión natural de un ylang-ylang que contiene tintes de miel, frutales neutros y una referencia a aroma de piel, sintiéndose en segundo plano vetas verdes que están entre fresias y jazmines más bajos con una traza herbal aromática.

La fragancia, al igual que varios productos de la marca Lush, posee una alta intensidad que necesita de control en la dosis aplicada y que por lo general siguen una línea aromática densa, con la nota dominante de flores cremosas apuntando a nivel de diario hacia épocas invernales donde el calor no ahogue a quien usa la fragancia, pudiendo llegar ocasionalmente a primaveras en exteriores pero manteniéndose bajo techo en verano, sin tener características deportivas. En oficina el perfume apela a una imagen floral artesanal con referencias a Anaïs Anaïs y que dependiendo de la cantidad usada puede aumentar drásticamente la edad aparente de quién lo usa, sosteniéndose en un rango semiformal más personal que social y con un efecto memoria bueno en lo estable del aroma sumado a la intensidad que se percibe en pasillos al caminar, pero que en espacios cerrados puede volverse intrusivo y molestar. En el caso nocturno la fragancia consigue mayor libertad de uso, apartándose de los grupos juveniles en favor de cenas sociales con mucha gente dentro de lo semiformal, pudiendo funcionar en eventos formales durante las primeras 4 a 6 horas que es cuando el perfume posee menos secciones vegetales. A nivel romántico el perfume puede causar impacto y llamar la atención a alguien que se conoce por primera vez, pero volviéndose denso con facilidad hasta el punto de ahogar o cansar a corta distancia, entendiéndose como una propuesta de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.