Realiza una Búsqueda

Vengeance Extrême by Juliette Has a Gun

Esta fragancia de mediados del 2011 pertenece a la marca de perfumes de nicho Juliette Has a Gun que fue fundada en Diciembre del 2006 por Romano Ricci como un perfumista autodidacta que buscó volver a las raíces de la perfumería clásica con un enfoque sensual, provocador y elegante con rasgos de originalidad orientado sólo a mujeres, con Vengeance Extrême siguiendo a los perfumes ya existentes Lady Vengeance, Miss Charming, Citizen Queen, Midnight Oud, Calamity J y Not A Perfume, por nombre dando la impresión de ser una versión de chiprés más intenso que el propuesto en el primer perfume de la marca Lady Vengeance donde el aroma posee una estela de sensualidad evidente con un toque de provocación, señalando como advertencia que el perfume por su carácter de arma de seducción no debe dejarse en manos inocentes. El envase sigue las líneas de diseño de la colección, con un frasco cilíndrico opaco decorado con dibujos de hiedras y tapón con forma de cono invertido en color gris oscuro con letras en rojo. En el sitio de Juliette Has a Gun entregan el siguiente listado oficial de notas: bergamota, lavanda, rosas búlgaras, pachulí, Hedione, ambroxán, vainilla, musk, granos de tonka y ládano.

En partida el perfume destaca por una nota central de pachulí ligero que aparece mezclado con rosas que producen un punto dulce de polen cercano a jazmín, variando a los 5 minutos parte del pachulí hacia chocolate y con las rosas asumiendo un acabado más ácido que rematan a los 10 minutos en rosas frutales que no alcanzan a llegar a peonías, sumando a los 15 minutos una capa de madera fresca que va acompañada por una línea estable de chocolate que va seguido de vetas imprecisas de presencia fría, llegando a los 20 minutos a un pachulí más fresco y liviano sobre madera, con las rosas pasando a niveles oscuros. En fase media a los 30 minutos la fragancia recupera la línea dominante de pachulí pero en un formato suave y con un comportamiento de resina amielada, destacando en la base un punto de chocolate que se desvía a tabaco ligero con miel y trazas de madera de tallos de flores, sosteniendo a 1 hora un pachulí a la miel que se siente más húmedo con mezclas de tabaco menos aromatizado y seco y brillos de almendras secas vestigiales. A las 2 horas el perfume mezcla la línea central de pachulí con características secas de cuero, perdiendo el acabado de humedad y destacando secciones oscuras de rosas clásicas aterciopeladas, desapareciendo el tabaco en favor de mezclas de resinas ligeras con un tinte impreciso de madera, con el pachulí sosteniéndose a las 3 horas pero con una apariencia menos dominante que recibe influencia destacada de cacao y vainilla dentro de un marco más ambarado, decayendo en potencia a las 4 horas donde algunos rasgos de rosas dulces y aterciopeladas con un dejo picante especiado se hacen notar y equiparan al pachulí creando un marco más jabonoso con tintes de jazmín. A las 6 horas el perfume se siente más ligero y centrado en una vainilla mezclada con bergamota y puntos al jazmín que recuerdan una versión reducida de una fragancia de Lush, presentando a las 9 horas un cuerpo suave con un centro entre chocolate de pachulí con aportes de la línea del jazmín combinado con madera, tabaco y florales alimonados, disminuyendo a las 12 horas la potencia de la fragancia que se mantiene en un pachulí fresco de acabado terroso con aportes licorosos de un grano de tonka. En fase final a 24 horas de aplicado la fragancia presenta una menor intensidad donde destaca una calidez similar a la producida por un musk dentro de un marco de apariencia oscura de pachulí, cuero y madera, sintiéndose puntos esporádicos herbales a la lavanda que recuerdan el aroma de las tiendas Lush.

El perfume mantiene un carácter clásico con tintes chiprés que ya ha sido presentado en otros perfumes de la misma marca, destacando líneas profundas con un centro de pachulí notorio pero que no llega al nivel de intensidad de Angel de Mugler y evitando referencias al estilo denso presentado por otras propuestas de corte comercial, combinando ideas de chocolate con especiados que favorecen a nivel de diario un uso invernal, sin ir hacia el lado deportivo dinámico. En oficina el perfume tiene un inicio intenso que decae con el paso de las horas, haciendo oscilar notas de rosas, jazmín y chocolates en torno a un pachulí terroso de aspecto más reposado y semiformal que insinúa un grado de autoridad, teniendo un efecto memoria que comienza en bueno debido a notas particulares que se hacen notar de manera independiente, bajando su retención a medida que las notas disminuyen en potencia y se mezclan entre sí. A nivel nocturno la fragancia se aleja de los extremos informal y formal, asentándose en situaciones sociales de espacios limpios e íntimos, como cenas y visitas a casas de amigos en épocas de invierno donde el pachulí con chocolate no se escapa de control. En lo romántico la fragancia posee vetas clásicas adictivas de presencia sensual menos explícita de cara a gente que se conoce por primera vez, siendo una mejor opción de fragancia para salir con una pareja conocida. Rango de edad entre 30 y 60 años.