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Manifesto L'Éclat by Yves Saint Laurent

Esta fragancia del 2014 es la tercera variante creada a partir de Manifesto del 2012 y que sigue a Manifesto L'Elixir del 2013, proponiéndose esta nueva edición como un enfoque más espontáneo, audaz y chispeante del original bajo un perfil más fresco y verde. El envase usa la misma botella diseñada para Manifesto y que está elaborada como un cilindro que contiene al medio una gema facetada, cambiando los colores del vidrio para dejar esta zona central de un color transparente con una pequeña referencia en las bases del cristal central y de la botella del tono violeta de sus predecesores. En el sitio de YSL Parfums establecen para la fragancia las siguientes notas: notas verdes, nerolí, té, jazmín, fresias, acordes cremosos, cedro, sándalo, granos de tonka y molécula de cashmerán.

En partida la fragancia presenta una tonalidad parecida a la del primer perfume de Lolita Lempicka en un tono de violetas al anís que bordea el regaliz de presencia notoria y complementado por florales neutros todavía en desarrollo, perdurando esta impresión sólo hasta los primeros 5 minutos cuando la fragancia cambia a tonos de vainilla dulce mezclados con flores amarillas tipo mimosa, dando a los 10 minutos un paso hacia las notas características de confitados de Fantasy de Britney Spears ya usados por el primer Manifesto y por su versión inmediata L'Elixir, donde el perfume se sostiene con pocos cambios hasta los 20 minutos cuando incrementa un punto de caramelo menos tostado que solapa unos frutales de baja presencia. En fase media a 30 minutos la fragancia se mueve en vainilla dulce con confituras cremosas similares a los de notas de tuberosa y gardenias, permitiendo que algunos puntos de anís y violeta se proyecten desde la base de manera esporádica, mostrando en torno a 1 hora algunas variantes del punto de violetas hacia moras azucaradas como variante del tinte de caramelo. A las 2 horas la fragancia deriva el tono de moras hacia jazmines más concentrados que abren una veta verde que coincide con aportes alimonados de una flor de azahar mesurada, con el tono de caramelo aproximándose al fondo hacia madera y vainilla, variando a las 3 horas hacia ámbar con granos de tonka que aportan cremosidad al grupo floral que profundiza el alimonado hacia bergamota y agregando un dejo de jabón al jazmín, teniendo un momento de alza de grupos frutales rojos azucarados cercanos a naranjas rojas como en Amor Amor de Cacharel que se hace más notorio a las 4 horas. Al superar las 6 horas la mezcla de vainilla y caramelo se vuelve más seca, abandonando la impresión de Fantasy e incluyendo una mayor proporción de flores blancas que incluyen un agua de melón verde, mostrando a las 9 horas una inclinación a pachulí que comienza tosco y luego entrega aportes confitados alineados con la vainilla y el caramelo, afinando a las 12 horas el pachulí a tonos de jazmín clásico a la violeta y tallos vegetales fragantes que se mezclan con fresias y frutales cercanos a rosas rústicas con un alimonado tenue y una crema neutra que sigue ligada a caramelo y vainilla, ambientalmente dando una impresión de una variante más amaderada y tosca de Allure de Chanel. En fase final a las 24 horas el perfume muestra una inclinación hacia madera que se abre en parte en vestigios de almendras confitadas con café tostado suave conteniendo un verde heredado del pachulí que se suaviza con vainilla y restos de tonka.

La fragancia vuelve a repetir una línea común con las dos ediciones predecesoras de Manifesto y que se interpreta como un acaramelado con vainilla similar a Fantasy de Britney Spears con giros de jazmín, dando un aporte que se mueve a fresias y alimonados que tienen momentos de frescura sin ir del todo hacia un estilo de agua fresca veraniega como podría suponer su nombre, apuntando a nivel de diario a situaciones cercanas al atemporal con el acaramelado con vainilla aportando tibieza en invierno de manera ligera y no densa, con los grupos de fresias y jazmines dando un brillo primaveral un poco más complejo, en ambas épocas manteniéndose lejos de situaciones deportivas. En oficina la fragancia llama la atención sin ser un perfume denso o de alto impacto, manejando de buena manera el aporte acaramelado con jazmín y dando un giro por momentos fresco que remata en acabados clásicos, como una mejora del primer Manifesto hacia el lado profesional, consiguiendo un buen efecto memoria por lo particular del aroma que oscila en puntos reconocibles y estables en el tiempo. En el caso nocturno la fragancia mantiene una buena proyección en el segmento semiformal aunque acotado a reuniones de carácter serio y pulcro lejano a fiestas juveniles, sin llegar a un nivel de complejidad de un evento de gala formal. En lo romántico el aroma tiene algunos puntos que pueden asociarse con intenciones de conquista pero que se apagan con el jazmín clásico y con algunos puntos toscos de madera y vainilla hacia el final, funcionando con más confianza en actividades con una pareja conocida. Rango de edad entre 25 y 50 años.