Karl Lagerfeld for Him by Karl Lagerfeld

Esta fragancia del año 2014 aparece acompañada de una versión femenina y ambas marcando un nuevo inicio dentro de la serie de perfumes del diseñador Karl Lagerfeld donde se descontinúan las creaciones anteriores, con la versión masculina proponiendo un enfoque clásico de helechos que apela a elegancia y estilo clásico a la vez. El envase sigue formas similares a las de su par para mujer, con una botella de base redondeada y tapón transparente rectangular del mismo ancho de la botella y con un adorno con forma de anillo plateado en la sección del cuello, distinguiéndose esta versión de la femenina en una botella más alta y plana con un vidrio en tonalidades al negro. En el sitio de Karl Parfums señalan que las notas aromáticas de la fragancia son: mandarina, lavanda, violetas, manzana, sándalo y ámbar.

En partida la fragancia presenta un acabado de violetas y jazmines que está presente en varias fragancias masculinas de diario que se caracterizan por una presencia verde metálica centrada en salvia, demorando unos 5 minutos en reducir esta impresión en favor de una combinación de cuero que unida a las violetas se aproxima al centro característico de Fahrenheit de Dior con aportes de un especiado de la familia de la pimienta que crea un picor persistente en nariz de corta duración, aligerándose el aroma a partir de este punto y mostrando mayor profundidad en una nota de manzana que comienza como un licor similar al de The Secret de Antonio Banderas pero que luego se inclina a un acabado de manzana verde ácida y alimonada al cabo de 15 minutos, con apariciones de bayas de enebro que crean a los 20 minutos la ilusión de un fondo marino clásico. En fase media a los 30 minutos la fragancia mantiene el efecto marino que da una impresión azul de bayas de enebro con violetas, volviéndose más ácida la fragancia y abriéndose hacia una mezcla de cáscara de limón o yuzú combinada con un calone denso que tiene retornos ocasionales del tono oscuro al hule de Fahrenheit, llegando a 1 hora a un tono mucho más fresco de pomelo y limón fragante con calone con poca presencia de violetas que son reemplazadas por un acabado de musk dulce menor a un lirio del valle. Al pasar las 2 horas la fragancia retoma parte de la impresión de violetas masculinas metálicas definiendo dentro de la porción ácida un pomelo fragante que roza la familia verde, con vestigios de especiado que se van a madera e incienso como base estructural del tono oscuro cercano a Fahrenheit que se disuelve en este etapa al incluir mayor aporte de líneas clásicas que incluyen una lavanda de Azzaro pour Homme, sumando un picor verde que bordea un cardamomo que diluye su porción mentolada dentro de la baya de enebro con calone que también se abre a tonos secos amaderados de sándalo y vetiver, retomando una línea oscura a las 3 horas que combina madera y vetiver verde con violetas y aportes especiados que rondan la pimienta y el jengibre, con una línea ácida que conserva características de manzana verde con bergamota, volviéndose más verde el aroma a las 4 horas con mayor notoriedad en vetiver combinado con lavanda y con un aporte importante de ácidos de pomelo y yuzú con jengibre sobre una base de incienso tipo hule. Pasadas las 6 horas se siente una baja gradual del grupo cítrico que favorece una mayor presencia de lavanda con aportes marinos que absorben las violetas metálicas, enfocándolas hacia maderas secas de la familia del vetiver y sándalo, siguiendo a las 9 horas con una rebaja mayor del pomelo que aumenta las maderas que retienen parte de la sensación de hule de las etapas iniciales, llegando a las 12 horas con un retorno del acabado de Fahrenheit en formato fresco con presencias nulas de verdes y cítricos, conservando sólo una base marina fresca y fría con rasgos de cuero. En fase final a 24 horas de aplicado la fragancia agrega una capa frutal dulce a un fondo dominado por verdes a la menta de bayas de enebro, con un tono de durazno cercano a ámbar o ládano y un metálico que combina manzana ácida, pomelo, violetas y un especiado que se funde con vetiver, retomando ideas que toma partes del ajenjo de Jazz de YSL con verdes rústicos amaderados al musgo de finales de la década del 80.

La fragancia se siente como una propuesta verde clásica modernizada que gira en torno a épocas frescas veraniegas en el ámbito de diario, combinando la posibilidad de un uso semiformal o informal deportivo que se ve potenciado por las vetas ácidas frías a medida que avanza la evolución del perfume, sin sentirse desperdiciado si se usa en solitario. En oficina la fragancia tiene un inicio que puede malinterpretarse como un desodorante cotidiano común con vetas metálicas, demorando en tomar un cuerpo más elegante y teniendo su punto más alto entre las 2 y 3 horas cuando aporta una imagen seria y oscura, volviéndose más ácido y personal hacia el final, con un efecto memoria mediano que tiene sus momentos muy puntales distinguibles en el ácido de pomelo en la segunda mitad y en los recuerdos de Fahrenheit, con una preferencia de uso cotidiana semiformal donde se debe cuidar la cantidad aplicada para no crear intrusividad. A nivel nocturno el aroma permite mayores aplicaciones para crear una estela ácida e intrusiva que se distingue en ambientes contaminados, apuntando a fiestas y salidas con amigos a pubs, requiriendo de mayor mesura si se va a la casa de algún conocido por motivos sociales, volviendo la impresión de desodorante cotidiano en el ácido combinado con florales al usarse en eventos formales. En lo romántico la fragancia tiene oscilaciones oscuras, verdes y cítricas pronunciadas que favorecen un uso funcional más personal que conquistador. Rango de edad entre 25 y 60 años.