Un Jardin en Méditerranée by Hermès

Originalmente lanzado al mercado el año 2003 como una fragancia de edición limitada, este perfume es el primero de la línea "Jardines" de Hermès y con el cual se inició Jean-Claude Ellena como perfumista exclusivo de la casa Hermès. El estilo de Ellena con muchas de las fragancias Hermès es conseguir la evocación de sentimientos y recuerdos con el uso de esencias de alta calidad, más que una fragancia comercial. En el caso de "Un Jardin en Méditerranée", se evocan jardines al borde de costas mediterráneas de Túnez con el uso de notas de higo, cedro, lentisco (un árbol pequeño de Turquía cuya savia se usa como chicle, aditivo de barnices y estimulante suave) y flor de laurel.

En partida se sienten aromas vegetales muy puros, con recuerdos de cítricos en la línea de la naranja suave o la bergamota, que gradualmente se vuelven más terrosos con la aparición de una nota de higo (u hojas de higo), más polvosas y que dejan una idea de estar en las raíces de una higuera a ras de tierra. El aroma general es entre terroso y cítrico, con apariciones ocasionales de una nota fresca fría muy parecida al mentol. En notas medias es similar a la cabeza, dominando notoriamente el aroma a higo, que ahora se divide en una nota frutosa de higo con naranjas, más otra nota apegada al higo, pero más cercana a la madera (como madera de higuera). La naranja se siente más amarga y al parecer es la que provoca el tono mentolado (como también puede ser la flor de laurel declarada, que no se siente muy obvia). Aunque mantiene un tono terroso y polvoso, el higo se asemeja a una versión frutosa y más verde del Salvatore Ferragamo de hombre sin las notas de madera, pomelo y clavo de olor. En notas de base el higo se siente más maduro, licoroso y todavía dominante aunque más suave, lo que permite sentir en el fondo dejos de madera aromática. La fijación es bastante buena y el papel mantiene notas maderosas dulces después de 1 semana.

De aroma fresco y bastante aromático, esta fragancia etiquetada como unisex tiene tonos masculinos frutosos y maderosos que calzan bien en un hombre en verano y en una mujer tanto en verano como en invierno, aunque su fuerte son los ambientes cálidos veraniegos en espacios abiertos y relajados. Se siente bien de diario y es llamativo en oficina para hombre y mujer. De noche veraniega se siente más masculina que femenina y aunque huele informal da una buena impresión como complemento opuesto a un evento formal. Las notas frutosas tienen dejos gourmand y el hecho que sea unisex refuerza la idea de romanticismo que atrae al sexo opuesto. Rango de edad entre 25 y 45 años, e incluso desde los 20 años, tanto en hombres como en mujeres.