Twilly d'Hermès Eau Poivrée Eau de Parfum by Hermès
Esta fragancia de mediados del 2019 es la primera variante que se prepara a partir del lanzamiento de Twilly d'Hermès ocurrido en el 2017 y sin considerar la edición limitada Charming también del 2019, planteando en esta ocasión una nueva interpretación bajo el nombre de Eau Poivrée que se traduce como "agua picante" cubriendo la estructura aromática de especiados, flores y fondo de madera por otras 3 notas equivalentes para destacar el espíritu picante de una chica Hermès. El envase repite la forma de botella de Twilly d'Hermès de forma cúbica con un tapón con forma de sombrero bombín o de hongo, cambiando el colorido del lazo en la zona del cuello que pasa de multicolor a gamas de rosado, con el color del vidrio siendo ahora completamente rosado sin dejar visible el sector de la base como en su predecesor. En el sito de Hermès indican que las notas principales de la fragancia son: pimienta rosada, rosas y pachulí.
En partida el perfume comienza con tintes atípicos y densos que plantean cercanías con un aroma a cuero natural de zapatos y el olor a plástico del interior de un automóvil nuevo mezclado con un jugo de frutas rojas, acercándose a los 5 minutos a notas más estándares de perfumería en un jabón de flores y lavanda donde se mantiene la nota plástica, distinguiéndose a los 10 minutos grupos especiados al jazmín natural con incienso que producen a los 15 minutos brillos vegetales de jardín al jengibre con persistencia de un centro de jabón de flores y naranja, surgiendo a los 20 minutos puntos ambientales de perfumería masculina clásica en una flor de azahar a la naranja con una madera y cuero que se perciben a corta distancia. En fase media a los 30 minutos la fragancia sigue evolucionando sobre una capa de múltiples notas simultáneas de presencia independiente donde se distinguen tonos de cedro, lápiz grafito, polen clásico y cáscara seca de naranja al jengibre, avanzando en una línea de talco con un punto volátil de pimienta al grafito con desvíos de la naranja a una flor de azahar, llegando a 1 hora a un aroma de aceite bronceador no frutal basado en flores con hilos clásicos de lirios del valle y amaderados al incienso. Sobre las 2 horas el perfume se suaviza alineándose sobre una veta más cremosa de naranja con incienso que se abre a gardenias, tuberosas y una veta de pimienta que retiene tonos de cedro, madera de lápiz grafito y aires de vetiver con una tonalidad de flores clásicas de los años 80 que cae al fondo combinando un ylang-ylang con la sensación de aceite bronceador no frutal y conteniendo algunas trazas dulces que cruzan frutas ligeras con una madreselva como la de Anaïs Anaïs de Cacharel, manteniendo una presencia ambiental alta a las 3 horas en un tono de jabón de jazmín con una línea mucho más focalizada y precisa de pimienta rosada con persistencia de los tonos de crema al lirio del valle, dejando a las 4 horas una sensación elegante basada en tuberosas y gardenias que recuerdan las vetas centrales de Red Door de Elizabeth Arden donde las notas de pimienta rosada se aprecian a corta distancia junto con aportes de rosas frutales, musk y cedro mezclado con un matiz verde todavía impreciso entre pachulí, vetiver y ají. Al superar las 6 horas la fragancia refresca la nota de pimienta que sigue mostrándose de manera destacada y produciendo picores en nariz a corta distancia, planteando notas más volátiles de rosas que llegan a un nivel de magnolias con residuos de gardenias que sostienen la tonalidad cremosa sólo en el rango ambiental, manteniendo a las 9 horas una presencia ambiental alta en notas de jazmín, tuberosas, gardenias y flores de azahar que logran repetir la aproximación a Alien de Mugler de su predecesor pero con una mayor carga verde en lirios del valle y suavizando la pimienta que cae a niveles de jabón y lavanda, llegando a las 12 horas a estilos clásicos donde se sienten referencias a Red Door, Lou Lou de Cacharel, Anaïs Anaïs y Alien sobre una capa de rosas delicadas al musk retomando en la base el punto de clavo de olor de la versión original y que tiene saltos a vetiver. En fase final a las 24 horas el perfume baja su presencia ambiental conservando un centro cremoso de flores a la gardenia y tuberosas con cruces de rosas clásicas donde surgen turbiedades a la acetona con una veta verde de pachulí fresco pero volátil y que se comporta como aromatizante usado en insecticidas, destacando a corta distancia un punto especiado más profundo basado en pimienta rosada pero que se abre a clavo de olor, nuez moscada, cedro, vetiver e incienso.
La fragancia tiene un comienzo atrevido y ligeramente agresivo con aires masculinos como el caso de la propuesta Blv II de Bulgari, presentando combinaciones dispersas de familias aromáticas que consideran incienso, plástico, cuero y flores densas que se suavizan al superar las 2 horas proyectando tonos de perfumería clásica con aires cremosos de flores blancas elegantes presentes en su predecesor Twilly d'Hermès Eau de Parfum y que cambian a corta distancia a una pimienta con rosas, a nivel de diario planteando un enfoque atemporal donde destacan las flores cremosas a distancia y con el aporte de pimienta dejando una idea de madera para usar en cualquier clima bajo techo, sin seguir una línea deportiva. En oficina el aroma tiene interpretaciones clásicas de corte profesional donde el matiz picante se siente a muy corta distancia y prácticamente como un complemento personal, cubriendo el segmento informal y semiformal con un efecto memoria muy bueno que sale del promedio de los tonos cremosos de tuberosa gracias a los rasgos especiados atípicos. A nivel nocturno el perfume se siente atractivo en situaciones sociales informales apareciendo como una modernización de los conceptos con que surgió Lolita Lempicka, manteniendo la base clásica presente en su predecesor pero que ahora alcanza momentos más potentes y pasando de manera natural a situaciones semiformales mostrando una faceta pulcra a distancia, pudiendo ser por densidad de sus notas una opción formal joven con una inspiración floral artesanal. A nivel romántico los grupos florales cremosos se sienten atractivos sólo después de pasar la parte media de su evolución, con el rasgo de pimienta descolocando la mayoría de las veces y determinando un estilo de uso personal. Rango de edad entre 20 y 60 años.
En partida el perfume comienza con tintes atípicos y densos que plantean cercanías con un aroma a cuero natural de zapatos y el olor a plástico del interior de un automóvil nuevo mezclado con un jugo de frutas rojas, acercándose a los 5 minutos a notas más estándares de perfumería en un jabón de flores y lavanda donde se mantiene la nota plástica, distinguiéndose a los 10 minutos grupos especiados al jazmín natural con incienso que producen a los 15 minutos brillos vegetales de jardín al jengibre con persistencia de un centro de jabón de flores y naranja, surgiendo a los 20 minutos puntos ambientales de perfumería masculina clásica en una flor de azahar a la naranja con una madera y cuero que se perciben a corta distancia. En fase media a los 30 minutos la fragancia sigue evolucionando sobre una capa de múltiples notas simultáneas de presencia independiente donde se distinguen tonos de cedro, lápiz grafito, polen clásico y cáscara seca de naranja al jengibre, avanzando en una línea de talco con un punto volátil de pimienta al grafito con desvíos de la naranja a una flor de azahar, llegando a 1 hora a un aroma de aceite bronceador no frutal basado en flores con hilos clásicos de lirios del valle y amaderados al incienso. Sobre las 2 horas el perfume se suaviza alineándose sobre una veta más cremosa de naranja con incienso que se abre a gardenias, tuberosas y una veta de pimienta que retiene tonos de cedro, madera de lápiz grafito y aires de vetiver con una tonalidad de flores clásicas de los años 80 que cae al fondo combinando un ylang-ylang con la sensación de aceite bronceador no frutal y conteniendo algunas trazas dulces que cruzan frutas ligeras con una madreselva como la de Anaïs Anaïs de Cacharel, manteniendo una presencia ambiental alta a las 3 horas en un tono de jabón de jazmín con una línea mucho más focalizada y precisa de pimienta rosada con persistencia de los tonos de crema al lirio del valle, dejando a las 4 horas una sensación elegante basada en tuberosas y gardenias que recuerdan las vetas centrales de Red Door de Elizabeth Arden donde las notas de pimienta rosada se aprecian a corta distancia junto con aportes de rosas frutales, musk y cedro mezclado con un matiz verde todavía impreciso entre pachulí, vetiver y ají. Al superar las 6 horas la fragancia refresca la nota de pimienta que sigue mostrándose de manera destacada y produciendo picores en nariz a corta distancia, planteando notas más volátiles de rosas que llegan a un nivel de magnolias con residuos de gardenias que sostienen la tonalidad cremosa sólo en el rango ambiental, manteniendo a las 9 horas una presencia ambiental alta en notas de jazmín, tuberosas, gardenias y flores de azahar que logran repetir la aproximación a Alien de Mugler de su predecesor pero con una mayor carga verde en lirios del valle y suavizando la pimienta que cae a niveles de jabón y lavanda, llegando a las 12 horas a estilos clásicos donde se sienten referencias a Red Door, Lou Lou de Cacharel, Anaïs Anaïs y Alien sobre una capa de rosas delicadas al musk retomando en la base el punto de clavo de olor de la versión original y que tiene saltos a vetiver. En fase final a las 24 horas el perfume baja su presencia ambiental conservando un centro cremoso de flores a la gardenia y tuberosas con cruces de rosas clásicas donde surgen turbiedades a la acetona con una veta verde de pachulí fresco pero volátil y que se comporta como aromatizante usado en insecticidas, destacando a corta distancia un punto especiado más profundo basado en pimienta rosada pero que se abre a clavo de olor, nuez moscada, cedro, vetiver e incienso.
La fragancia tiene un comienzo atrevido y ligeramente agresivo con aires masculinos como el caso de la propuesta Blv II de Bulgari, presentando combinaciones dispersas de familias aromáticas que consideran incienso, plástico, cuero y flores densas que se suavizan al superar las 2 horas proyectando tonos de perfumería clásica con aires cremosos de flores blancas elegantes presentes en su predecesor Twilly d'Hermès Eau de Parfum y que cambian a corta distancia a una pimienta con rosas, a nivel de diario planteando un enfoque atemporal donde destacan las flores cremosas a distancia y con el aporte de pimienta dejando una idea de madera para usar en cualquier clima bajo techo, sin seguir una línea deportiva. En oficina el aroma tiene interpretaciones clásicas de corte profesional donde el matiz picante se siente a muy corta distancia y prácticamente como un complemento personal, cubriendo el segmento informal y semiformal con un efecto memoria muy bueno que sale del promedio de los tonos cremosos de tuberosa gracias a los rasgos especiados atípicos. A nivel nocturno el perfume se siente atractivo en situaciones sociales informales apareciendo como una modernización de los conceptos con que surgió Lolita Lempicka, manteniendo la base clásica presente en su predecesor pero que ahora alcanza momentos más potentes y pasando de manera natural a situaciones semiformales mostrando una faceta pulcra a distancia, pudiendo ser por densidad de sus notas una opción formal joven con una inspiración floral artesanal. A nivel romántico los grupos florales cremosos se sienten atractivos sólo después de pasar la parte media de su evolución, con el rasgo de pimienta descolocando la mayoría de las veces y determinando un estilo de uso personal. Rango de edad entre 20 y 60 años.