CH Kings by Carolina Herrera

Esta fragancia del año 2019 es uno de los lanzamientos especiales y periódicos que realiza la marca Carolina Herrera para algunas de sus fragancias emblemáticas, en esta ocasión siguiendo la línea de CH Men y CH para mujer en una edición limitada como los casos de CH Africa, Grand Tour y Central Park, con la serie Kings & Queens planteando al arte de la seducción como un juego de cartas en el que se apuesta a ganar siempre. El envase sigue la forma de botella de CH Men consistente en un frasco de caras planas con una banda de cuero que cruza el envase de manera horizontal, teniendo detalles adicionales en esta versión como un cambio de la banda de cuero por un terciopelo rojo que lleva al centro un símbolo de as de picas de naipes atravesado por una espada en diagonal, existiendo además pequeños remaches dorados en los bordes del tapón y la banda de terciopelo. En el sitio de Carolina Herrera describen al perfume con las siguientes notas: pimienta negra, pimienta rosada, cardamomo, hojas de violetas, piña, lavanda, salvia, cacao, café, ámbar, granos de tonka y musk.

En partida la fragancia establece un inicio basado en granos de tonka con limón sobre un fondo que recuerda el café a la madera de la versión original de CH Men, abriéndose a los 5 minutos a secciones más verdes a la salvia y pomelo donde destaca una hoja de menta de acabado natural que logra una presencia dominante, continuando a los 10 minutos sobre una línea principal de menta que se sostiene sobre un acabado acaramelado confitado de pachulí, reapareciendo a los 15 minutos la nota de salvia pero con una presencia marina salada que se desplaza a los 20 minutos a una sensación tosca silvestre que tiene desvíos a un destilado de granos tipo Gin-tonic. En fase media a los 30 minutos el perfume define una nueva sensación de playa con notas de bronceador y coco con aire marino que avanza rápido a un ámbar gris dominante con residuos de salvia, llegando a 1 hora a un acabado de presencia amarga que se distribuye en notas de salvia, algas, pomelo y enebro sobre un tibio ligero y amplio de madera. Al pasar de las 2 horas el aroma disminuye la proporción verde combinando tonos secos de tierra con un hilo marino salado, surgiendo una veta de cuero que se vuelve tibia y se aproxima a cacao con pachulí, teniendo a las 3 horas un incremento de la sección oceánica que comienza en un pomelo verde y salta a yodo de algas marinas donde la presencia de ámbar gris es ambigua y con impresiones de salvia intercalada en segundo plano, bajando la potencia marina a las 4 horas y acercándose a un origen de pomelo que contiene puntos de la familia de la pimienta con madera sobre un ámbar gris a la lavanda más terrestre y de menor potencia. Sobre las 6 horas la fragancia avanza hace una tonalidad de cedro parecida a la de lápices grafitos que se sostiene sobre lineas de bosque a la lavanda y romero con una insinuación de pimienta y un residuo constante de pomelo, planteando a las 9 horas un equilibrio entre dos grupos aromáticos donde uno de ellos corresponde al grupo marino al pomelo y el segundo corresponde a una traza tibia en aumento de granos de tonka con cacao, elevando a las 12 horas el dominio de las notas de granos de tonka que se separan del tinte de cacao incluyendo una interferencia de cuero en el fondo con matices marinos perdidos. En fase final a las 24 horas el perfume se mueve sobre una línea turbia de granos de tonka que tiene una interferencia derivada del tono marino y que se acerca a un pachulí con incienso tostado, existiendo en el fondo aportes menores de pomelo, lavanda y pimienta con una impresión vaga de licor con puntos dulces de café en grano.

La fragancia propone un estilo que hace referencias a vetas marinas que se confunden con una sección verde herbal al pomelo, dejando la idea de una variante más fresca, menos formal y más cercana a actividades de exteriores que la versión original de CH Men, a nivel de diario apuntando a épocas cálidas de primavera y verano aceptando situaciones deportivas mesuradas. En oficina el aroma se aproxima al estilo de algunas versiones de 212 Men en el uso de salvia, pomelo y tonos tibios, saliendo brevemente del promedio en la primera hora con la nota tipo playa, cubriendo el segmento informal y semiformal con un efecto memoria que está dentro de lo mediano al tener una sección dominante marina que está en boga en la perfumería masculina contemporánea. A nivel nocturno el perfume encaja con salidas informales jóvenes en compañía de amigos destacando un tono amargo que sobresale de la contaminación ambiental, teniendo un rasgo menos elegante y más cotidiano al enfrentarse a situaciones semiformales sin alcanzar a llegar al caso formal. En lo romántico la fragancia presenta varias secciones de corte amargo que pueden molestar en nariz a corta distancia y restando las posibilidades de plantear un ambiente de conquista o confianza, entendiéndose como un aroma de disfrute personal. Rango de edad entre 20 y 60 años.