Flor del Paraíso by Ágatha Ruiz de la Prada

Esta fragancia del 2018 se suma a la serie de ediciones especiales y de temporada que han surgido sobre Flor del año 2000, como los casos de Flor Rosa, Flor Manía, Hippy Flor y Tropical Flor, con Flor del Paraíso continuando con un estilo aromático alegre propio de la marca Ágatha Ruiz de la Prada que se basa en tintes frutales que descienden a vetas calmadas de rosas y peonías amaderadas. El envase mantiene la forma de botella de Flor con un perfil de flor de 5 pétalos con un círculo central donde se ubica el tapón cilíndrico, teniendo un colorido en gradiente que va de azul en la base a un amarillo verde en su parte superior con un tapón de color rojo naranja y que es igual al presentado por Tropical Flor en el 2014. En el sitio de Ágatha Ruiz de la Prada aparecen menciones al perfume como una noticia de lanzamiento en Argentina, sin que entreguen un detalle de su composición aromática.

En partida la fragancia comienza mostrando grupos alimonados acuáticos de nerolí, lirios del valle y vetas secas amaderadas de fresias que se abren a los 5 minutos a mezclas tropicales de piña y mango, con el aroma decantando lentamente a los 10 minutos hacia rosas frescas con un hilo acuático seco de calone y loto planteando a los 15 minutos un foco en un grupo floral polvoso con características de peonía y un adicional seco de fresias a la pimienta rosada, teniendo a los 20 minutos reapariciones frutales acotadas de mandarina sobre rosas blancas. En fase media a los 30 minutos el perfume muestra un repunte del grupo frutal que se sostiene en una peonía polvosa y avanza sobre neutros de durazno con lichís, aumentando en profundidad las capas de peonía que varían hacia magnolias ácidas que absorben las mandarinas junto con cremosos de gardenia al durazno, llegando a 1 hora a un cuerpo ácido y fresco más rojo que combina secciones de lichís, rosas y grosellas sobre un verde fresco de fresias alimonadas. A las 2 horas el perfume muestra un predominio de aromas de rosas oscuras con un hilo ácido de magnolia tipo lichís, conservando la presencia de vetas secas que se afinan en pimienta rosada y musgo y son compensadas por un cremoso de gardenias, nivelándose a las 3 horas en dulces de peonía con ácidos de magnolia donde aumenta el acabado de pétalos polvosos y se insinúa un punto verde vegetal, incluyendo a las 4 horas un mentol secundario de pachulí suave que comparte picores con la línea de pimienta rosada y que agrega un efecto turbio que opaca la presencia floral compactando las rosas, peonías y magnolias en un polvoso ácido con tintes rojos. Sobre las 6 horas el perfume se inclina a un rasgo floral donde destacan tonos ácidos de rosas con aportes secundarios de magnolias y una sensación verde en el fondo mucho más tenue donde se pierde el mentol de pachulí y se reduce la potencia de la pimienta rosada y la madera confundiéndose con loto, con el aroma enfocándose a las 9 horas en una nota dominante de rosas más oscura pero de baja densidad que deja escapar trazas verdes de tallos que se desarrollan en vestigios de piña y magnolias, con el aroma suavizándose a las 12 horas por un momento en musk y peonías de menor acidez que una magnolia y que recuperan alimonados a la piña y naranja, descendiendo gradualmente a rosas con madera. En fase final a las 24 horas el perfume destaca una línea central de rosas menos clásicas que tienden a un ácido de magnolias con pequeños indicios de talco de violetas, incluyendo en la base vestigios de piña con pimienta rosada.

La fragancia tiene una apariencia diferente a la de Tropical Flor con quien comparte un diseño de botella que se presta a confusión en el colorido, siguiendo una línea frutal menos viva y menos tropical que en su punto medio refuerza un acabado floral polvoso con dominio de rosas y ácidos de lichís a la magnolia con rasgos de madera y pimienta rosada, a nivel de diario conservando un estilo de diario ligero de primavera y verano que acepta algunas actividades deportivas ligeras con algo de restricción en la nota de rosas. En oficina el perfume se mueve desde una tendencia alegra a una más pulcra menos extrovertida e incluso apegada a un estilo urbano con puntos altos rojos de peonía, cubriendo el segmento informal y semiformal con un efecto memoria que está dentro del promedio por la falta de notas escapadas o diferentes que llamen la atención. En el escenario nocturno el aroma conserva una línea limpia y pulcra pero produciendo una impresión ligera que se siente superada por la contaminación ambiental destacando solo la veta amaderada de pimienta rosada, dejando la idea de ser un perfume para usar en el día. En lo romántico la forma en que se presentan las notas verdes y de madera restringen un desarrollo frutal y floral receptivo y sensual, entendiéndose como un perfume de disfrute personal. Rango de edad entre 20 y 60 años.