Signature Oud Wood & Dark Vanilla by Axe
Esta fragancia del 2016 es parte de un trío inicial de la marca de productos masculinos Axe que se orienta a un concepto de perfume, diferenciándose de sus lanzamientos anteriores en el segmento de los desodorantes al evitar usar gas propelente en favor de una válvula de spray de disparo único, con el fin de mesurar y apreciar la cantidad aplicada apegándose a un lema de usar perfume para sentirse bien y desarrollar un estilo personal, con Signature destacando por el esfuerzo de incluir una nota de aquilaria asociada originalmente a un mercado de perfumería de lujo. El envase usa una botella cilíndrica negra similar al de sus pares Adrenaline y Urban, identificándose por el uso de una etiqueta frontal dorada. En los sitios internacionales de Axe destacan el uso de las siguientes notas: madera (sin especificar el uso de aquilaria, excepto en el nombre del producto), vainilla, mandarinas y pimienta negra.
En partida el perfume posee un aroma que se siente conocido dentro de la perfumería masculina, con un centro de canela con maderas oscuras que a 5 minutos se amplia a mirra y aires de aquilaria con pimienta, destacando a los 10 minutos una estructura en madera y resina que se apega al estilo clásico de los años ochenta y que incluye a los 15 minutos referencias a una vainilla que aparece opacada por madera y resina, destacando a los 20 minutos una aquilaria especiada más alta con trazas verdes parecida a la presente en Ormonde Man de Ormonde Jayne. En fase media a los 30 minutos el aroma se oscurece apartándose de las características de una aquilaria y desplazándose hacia cedro con granos de tonka, surgiendo a 1 hora aportes de cuero al ládano con pimienta donde las resinas se abren a un incienso en torno a olíbano y benjuí que recuerda algunos tonos de productos de la marca británica Lush. Sobre las 2 horas la fragancia se siente más fresca con un punto frutal neutro en bergamota con efectos menores de lavanda sobre una base cálida y clásica de ládano, cuero y pachulí con una vainilla parecida a la usada en Casual Friday de Escada, siguiendo a las 3 horas una línea de madera resinosa con menores referencias a aquilaria y con una inclinación a incienso con cera de ládano y tintes de nuez moscada, variando a las 4 horas la aquilaria con madera hacia tabaco con canela y ámbar sobre cuero a la pimienta. Al pasar de las 6 horas el perfume combina tonos de resina untuosa con mentolados provenientes de un talco de lavanda, recuperando un aporte de vainilla e incluyendo nuevas capas de madera dulce que consideran caramelo y especiados polvosos, aumentando a 9 horas la notoriedad del mentol de lavanda pero a la vez resaltando las características de la resina que vuelve a aquilaria con especiados amaderados menores, manteniendo a las 12 horas un aroma de incienso no ahumado con matices de mentol con cuero y aportes de aquilaria con pimienta. En fase final a las 24 horas la fragancia se mueve dentro de un rango de resinas dulces al olíbano y ládano con un desplazamiento no preciso hacia granos de tonka, sintiéndose en el fondo una línea de madera con tintes de aquilaria mezclada con especiados a la canela, tabaco y tonos secos de vainilla.
Al comparar con sus pares Urban y Adrenaline, este producto es el que posee la estructura aromática más cercana a un perfume comercial, aprovechando menciones acotadas a notas de aquilaria que se suelen asociar a aromas de mayor complejidad y que se iniciaron en perfumerías de nicho, teniendo a la vez similitudes ocasionales con otros perfumes conocidos tanto contemporáneos como de la década de los años ochenta, fallando en la intensidad del perfume que se mantiene apegado a una filosofía de desodorante y que es correcto para un público que se está iniciando o que evita los aromas complejos, a nivel de diario teniendo una preferencia invernal que tiene momentos ligeros que se adaptan a la primavera y el verano, aguantando la realización de actividades deportivas después de las 3 horas de aplicado. En oficina el aroma es ligero pero con un guiño sofisticado que cubre el segmento informal y llega al nivel semiformal de traje de manera discreta y no agresiva, teniendo un efecto memoria levemente sobre lo mediano en el tono de aquilaria y de maderas tibias. En el caso nocturno el aroma sigue líneas oscuras que se camuflan y potencian con la contaminación ambiental, apuntando a un público joven en invierno y pasando a mayor edad en climas más cálidos y situaciones dentro de lo semiformal, quedando corto en complejidad en el escenario formal. A nivel romántico el aroma es tibio y llamativo, tal vez con una asociación demasiado clásica de perfumería masculina donde los aportes cálidos de resina son enmascarados por secos de madera, a nivel general teniendo mejor potencial como una fragancia de disfrute personal. Rango de edad entre 20 y 60 años.