Dior Homme Eau for Men by Christian Dior
Esta fragancia del año 2014 se suma a la colección de fragancias derivadas de Dior Homme del año 2005, que incluyen las versiones Intense, Sport y Cologne que han tenido reediciones y ajustes en los años siguientes a su aparición, con Eau for Men siendo una incorporación no ligada a un perfume ya existente que apunta a complementar la imagen de un hombre de estilo más urbano que proyecta audacia, carisma y refinamiento. El envase mantiene la forma de botella cúbica diseñada para el primer Dior Homme y repetida en las siguientes ediciones, conservando el tubo central en negro donde pasa la manguera del spray pero cambiando el vidrio y el líquido a una tonalidad transparente ligeramente celeste. En el sitio de Dior establecen dentro de la descripción del perfume que las notas básicas son: pomelo, bergamota, cilantro, iris y cedro.
En partida la fragancia muestra una nota de iris de aspecto polvoso similar al presente en las colecciones clásicas de Dior Homme, diferenciándose en un punto de limón más verde que el usado en Dior Homme Cologne y que incluye desvíos del iris a los 5 minutos hacia una madera tenue que presenta características parecidas a cuero a los 10 minutos, volviendo a presentar un alza de iris a los 15 minutos como al comienzo y en un formato mucho más dominante y lineal, percibiéndose unos aportes muy solapados de fondos vegetales que van acompañados de una disminución a un mínimo de la nota inicial de limón a los 20 minutos. En fase media a los 30 minutos la nota de iris se sostiene con pocas variaciones, pasando por una idea de jabón artesanal que se depura hacia un seco polvoso que comparte características mínimas con madera y cuero, tomando a 1 hora un matiz graso que lo acerca parcialmente hacia una nota de chocolate. A las 2 horas el aroma reduce la nota de iris a la base mezclándola con aportes verdes cercanos a un pachulí clásico y que por el lado del cuero se aproxima a propuestas urbanas más contemporáneas y jóvenes, reforzando un punto de chocolate sobre lavanda como una variante del iris y que abre aportes de granos de tonka, reforzando a las 3 horas un punto tipo chocolate amaderado de pachulí que deriva del iris y que se suma a un cítrico de pomelo que sube a una capa superior, bajando el pomelo a las 4 horas hacia una bergamota con polvosos de iris que se confunden con pachulí clásico verde no confitado, bajando el punto de chocolate graso con tonka. Pasadas las 6 horas la fragancia comienza a adquirir un aspecto más clásico, cambiando el iris por lavanda y aportes de violetas incrementando a la vez una base de madera cruzada con resinas dulces derivadas de tonka conservando un frescor de la familia de la bergamota, mostrando a las 9 horas un período oscuro que guarda cercanía con algunas vetas de Fahrenheit de la misma marca en el punto de violeta pero que luego se eleva a pachulí fresco con anisados a la madera como en Must Pour Homme de Cartier, recuperando a las 12 horas una porción del pomelo pero en un formato cristalino apegado a resinas combinado con un polvoso de pachulí con un aire de iris y violetas. En fase final a las 24 horas de aplicado el perfume se siente más seco y con la nota principal de iris mostrando un carácter más dulce y calmado que se abre a vetas de cuero y violetas polvosas que incluyen una madera muy suave con aires de especiado, agregando un fondo verde que se acerca a la idea de una semilla de cilantro con menta apagada.
La fragancia presenta una variante más simple y urbana a la serie Dior Homme, conservando el tinte central de iris que en esta ocasión se siente como un aporte aromático cercano a un complemento artesanal con menos fuerza y agresividad que Dior Homme Intense Eau de Parfum y Eau de Toilette del 2007 y 2005 respectivamente, sosteniendo a nivel de diario un enfoque atemporal lejano a actividades deportivas. En oficina el aroma destaca dentro del promedio, pero con una estructura menos compleja o profunda que puede confundirse como una propuesta de un desodorante cotidiano, sosteniéndose en el rango semiformal de medias estaciones y climas no calurosos en interiores, con un efecto memoria sobre lo mediano pero que tiende a confundirse dentro del grupo de los Dior Homme. A nivel nocturno la fragancia adquiere mayor fuerza admitiendo sobreaplicaciones mesuradas, yendo hacia segmentos semiformales tipo cenas, reuniones de negocio después de oficina y como una variante joven de fragancias de matrimonio, alejándose del segmento adolescente. En lo romántico la nota central de iris tiene un matiz más polvoso que carece de la sensualidad de la vainilla con que se combinaba en el primer Dior Homme, sintiéndose como un aroma pulcro de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.