Ocean Royale by James Bond 007 Fragrances
Esta fragancia del año 2013 es el segundo perfume de la marca James Bond 007 Fragrances, elaborada por Procter & Gamble en asociación con los dueños de la licencia del personaje James Bond, y apareciendo en el mercado 1 año después del primer perfume que pasa a llamarse "James Bond 007 Signature Fragrance" el cual venía en un formato normal de botella negra y en una edición especial limitada de aniversario en botella dorada, con "Ocean Royale" recibiendo este nombre en parte por la novela "Casino Royale" y por la incorporación de matices oceánicos al perfume. El envase mantiene la forma de botella planteada por el primer perfume de la marca, consistente en un diseño facetado en cuadrícula con tapón giratorio que da un homenaje a los "gadgets" o artefactos tecnológicos de doble funcionalidad usados por James Bond en sus películas, cambiando el color del vidio de negro a un azul acuático más vivo. En el sitio de 007 Fragrances destacan en la descripción del perfume que las notas aromáticas principales son: lima, anís, bergamota y acordes marinos.
En partida la fragancia presenta un tono notorio de iris que recuerda partes de Dior Homme de Dior pero en un formato más seco y que combina ideas de jazmines tradicionales que se aproximan hacia violetas al cabo de unos 5 minutos, incluyendo al mismo tiempo porciones de regaliz que refuerzan la idea de violetas y que a la vez traen una aproximación más terrosa que se afina en resinas después de 15 minutos, tomando un carácter un poco más inciensado y oscuro que supera la idea de iris, arrastrando pequeños puntos frescos de bergamota. En fase media a 30 minutos al aroma se siente mucho más oscuro, conservando rasgos de iris pero inclinándose hacia grupos amaderados en torno a cedro, sándalo y tabaco, con cercanía al efecto de chocolate de L'Instant de Guerlain pour Homme pero que es balanceado por ideas de jazmín que crea un efecto de agua cercano al de una lavanda opaca, con sensaciones de semillas de anís intercaladas con vetiver seco de bajo efecto verde después de 1 hora de aplicado que refuerzan la idea de regaliz. A las 2 horas la fragancia mantiene un cuerpo de regaliz anisado con impresiones de violetas que dan una aproximación simplificada a Lolita Lempicka au Masculin, conservando un aire de resinas que aumenta y se complementa con tibiezas de madera tipo cedro, con un dejo tenue de vainilla que acerca estas resinas hacia tonos de granos de tonka, con variaciones en el punto de iris que produce efectos mesurados de algas como en Hermessence de Hermès al superar las 2 horas y media. A 3 horas el perfume comienza a presentar bajas de intensidad, perdiendo brillo en el grupo floral y conservando un efecto mucho más amaderado y neutro que se asemeja a varios perfumes masculinos, demorando casi hasta las 4 horas en recuperar terreno y establecer un efecto de talco de violetas discreto pero más llamativo que trae recuerdos de lavanda y de notas de perfumería clásica de los años 60 al incluir tonos discretos de cítricos también polvosos. Sobre las 6 horas la fragancia muestra una variante de la violeta del atalcado volviéndola más dulce y recuperando parte de las resinas de fondo, enfocándose en un grano de tonka incipiente que destaca por una tibieza apegada a la piel y de baja intensidad, con puntos similares de pachulí amaderado que apuntan hacia un inciensado suave levemente anisado a las 9 horas, con repuntes de bergamota que se hacen notar más hacia el fondo y tintes de violetas más dulces que por momentos dan una aproximación muy suavizada y simplificada de Fahrenheit de Dior, llegando a las 12 horas con una mezcla que reune una tonka más avainillada con atalcados dulces de violetas con anís sobre una base de bergamota fresca. En fase final a las 24 horas la fragancia mantiene una tibieza balanceada dominante entre ámbar y musk, con una intensidad que baja a un nivel bastante apegado a la piel y que contiene trazas de bergamota con efectos de anisado dulce, con un seco de fondo de la familia del talco que todavía guarda un aire a violetas.
El perfume parece seguir a un estilo clásico de resinas siguiendo una línea similar al del primer perfume de esta marca y posiblemente apegado a la imagen del personaje James Bond, agregando un aporte de iris que moderniza la fragancia y que remata en polvoso tradicional floral, pasando al igual que su predecesor por momentos de similitud con otros perfumes en su fase inicial más intensa, teniendo un enfoque de diario en general atemporal por indiferencia con las épocas del año y dando una impresión no deportiva calmada y por momentos pulcra con la que evita caer en una categoría cercana a la de desodorantes cotidianos. En oficina el aroma es correcto dentro de un marco semiformal, presentando un efecto memoria mediano durante el dominio del iris y del atalcado de violetas, cayendo por momentos a un segmento cotidiano por falta de potencia e intensidad y privilegiando un uso más bien personal que social que cumple con aportar una sensación de limpieza correcta a distancia de conversación. En el campo nocturno el perfume requiere de sobreaplicaciones para sostenerse en un estilo semiformal de ambientes contaminados tipo pubs, dando una impresión algo seca y rígida para fiestas informales y sintiéndose simple para eventos formales, apuntando de mejor manera a reuniones con amigos. En el caso romántico la fragancia se siente baja en notas llamativas que causen atracción y salgan del promedio, dando nuevamente la idea de un perfume de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.