Beach by Bobbi Brown
Este perfume del año 2002 es la segunda fragancia asociada a la marca de cosméticos estadounidense Bobbi Brown, que lleva el mismo nombre de su fundadora y que fabrica sus productos en asociación con Estée Lauder, con Beach apareciendo en el mercado 4 años después del primer perfume Bobbi y teniendo un desplante diferente centrado en un aroma tibio de mayor estela pero también apegado a un carácter más lineal que se aleja de los grupos florales en favor de en un grupo de notas dominantes que apuntan a capturar la atmósfera y actitud del verano. El envase usa en la actualidad un modelo de botella estándar que reemplaza los diseños de frasco creados al momento de cada lanzamiento y que se apegan a líneas rectangulares de vidrio grueso y tapón negro, con el nombre del perfume grabado al frente en letras cursivas. En el sitio de Bobbi Brown Cosmetics destacan que las notas aromáticas del perfume son: jazmín, notas de arena, acordes marinos y mandarinas.
En partida la fragancia se siente dulce y notoria, con ideas de vainilla mezclada con cítricos que producen un tibio que bordea la idea de bronceador, con desarrollos sobre los 10 minutos de grupos de resinas de corte inciensado que complementan a la vainilla y precisan un tono floral jabonoso que gira en torno a jazmines. En fase media sobre los 30 minutos el perfume mantiene una estructura aromática con pocos cambios, conservando la vainilla inciensada con jazmín al jabón que produce un efecto de tibieza limpia, incorporando sensaciones secundarias de madreselvas que llevan a la vainilla hacia tintes de polen mucho más afines al jazmín, creando una separación del grupo de incienso que deja ambas líneas moviéndose en paralelo al cabo de 1 hora, dando una aproximación a un estilo chiprés fresco de los años 80 donde destaca una cáscara de mandarina extra. A las 2 horas el perfume incrementa la veta tibia de madreselvas combinándolas con ámbar y con un dejo que oscila entre maderas y especies logrando una aproximación similar al formato de playa de Fire Island de Bond No.9 y alejado de otros perfumes tropicales que muestran mayor proporción de frutos y flores exóticas, reduciendo la vainilla a las 3 horas en favor de un tibio al polen mucho más lineal y estable. Sobre las 5 horas el aroma abandona gran parte de los tonos de vainilla en favor de musk y tibios de interior de flores blancas, desarrollando un punto de nerolí que insinúa flores de azahar, jazmines verdes o lirios del valle, alcanzando a las 8 horas una tibieza extra más cercana a ámbar con un aire apagado a lavanda. A las 10 horas el perfume vuelve a traer tonos dulces de polen de madreselvas que aportan una sensación amplificada de tibieza de piel, con el jazmín bajando a un nivel de jabón aportando líneas femeninas e inocentes, sumando vetas verdes también de origen floral que se combinan con musk, llegando a la 12 horas a un aroma estable de jabón dulce. En fase final a las 24 horas la fragancia presenta un musk dominante con ideas de madreselva y florales que recuerdan las porciones dulces de la base de Anais Anais, con un punto sintético de flor de azahar y atalcados de violeta que se aproximan a una mora.
El perfume apela a una estructura dulce que ronda una colonia tibia unisex que asienta su lado femenino en el uso de florales dulces al polen con los que hace una aproximación breve a tonos de vainilla de bronceador y tropicales de playa, sintiéndose fresco a nivel de diario en verano y mostrando personalidad suficiente para moverse en ámbitos sociales dentro del rango informal a semiformal, aguantando actividades deportivas como juegos en el exterior e incluso en la playa pero pudiendo molestar al exigirlo más en un gimnasio. En oficina la fragancia se siente llamativa y limpia con puntos gratos femeninos a cargo de la impresión dominante de madreselva, funcionando como perfume de corte artesanal semi elegante que a la vez no se siente desperdiciado en días de menor desplante laboral, con un efecto memoria mediano a corta distancia y prestándose a confusión con la base de otras fragancia a medida que se huele de más lejos. En eventos nocturnos el perfume destaca por una frescura grata en fiestas y salidas en general, de preferencia en el segmento informal joven en ambientes limpios y manteniéndose lejos de situaciones formales al dar una idea mas simple cercana a jabón. En el caso romántico la fragancia se siente atractiva y produce curiosidad y atracción a corta distancia al potenciar una idea de aroma de piel, con aportes de inocencia con sensualidad solapada en un segmento de mediana y baja edad, apuntando a situaciones mas relajadas con pareja conocida en mujeres mayores a falta de puntos más complejos o elegantes. Rango de edad entre 20 y 60 años.