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Nautica Woman by Nautica

Este perfume aparece en el mercado en 1994, 2 años después de la primera fragancia de la marca Nautica y apegándose a una estrategia de diversificación para crear nuevos productos para un público femenino, considerando el origen masculino que tuvo esta empresa. La fragancia parece fundir dos estilos aromáticos, uno basado en rosas y florales de la época y otro proveniente de su predecesor masculino en el que se busca imitar un aroma frío de mar y verano, recurriendo en este caso a un agua de mandarinas. El empaque en la versión actual todavía conserva en el frasco las letras minúsculas cuadradas usadas antes del cambio de logo e imagen corporativa de Nautica ocurrido el 2003, con la caja mostrando la tipografía nueva en mayúsculas y alargada hacia los costados, con la botella tomando formas curvas de centro ancho y extremos estrechos que en el perfil de la base parece recordar al frasco de Nautica Classic con las velas recogidas, repitiendo incluso el mismo tapón esférico y plateado de su antecesor. En el sitio de Nautica sólo hacer referencia a lanzamientos recientes de perfumes, por lo que no existe una descripción oficial de la composición aromática de esta fragancia.

En la partida el perfume muestra un punto floral incipiente con recuerdos a Charlie de Revlon, que tiende a bajar al agregarse a los pocos minutos unos grupos alimonados verdes, cercanos a cáscara de mandarina sin madurar, bergamota y verbena, ambas líneas compartiendo espacio al mismo tiempo y sin proyectar una estela intensa. En fase media los florales aumentan en profundidad mostrando una rosa fresca con algo de jazmín suave, ambos dando la idea de un detergente o jabón clásico con inspiraciones jóvenes después de 1 hora de la partida y manteniendo dejos alimonados suaves por el lado vegetal. A 3 horas el grupo tipo jabón cambia a florales juveniles inocentes, con porciones clásicas entre jazmín con lirios del valle y variaciones de rosas o peonías muy tenues y que aportan idea de pétalos dulces, conservando la veta de bergamota y conservando impresiones de un floral clásico ligero con porciones de Charlie. A 7 horas se siente un predominio de flores secas y polvosas tipo loto con dulzores de mandarina también secos que recuerdan el aroma de vitamina C efervescente con una cercanía a jengibre terroso o maderas suaves, con la mandarina dando un efecto de agua parecido al existente en Animale Black de hombre y análogo al que presenta Sea & Sun in Cadaqués de Salvador Dalí, pero diferenciándose de ambos por el punto seco polvoso, repuntando la idea de jengibre algo picante a las 9 horas y arrastrando las notas de rosas frescas que se mantienen polvosas pero que se vuelven más densas. En fase final aumenta la sensación de pétalos jóvenes de jardín que superan al agua de mandarina, con fondos que están entre ámbar, musk y un jazmín mezclado con tallos vegetales y polvoso de pétalos tipo loto que recuerdan una versión apagada y más simple del L'Eau d'Issey de mujer de Issey Miyake.

La fragancia se siente como un experimento dentro de Nautica, considerando su origen orientado en un comienzo sólo a vestuario masculino, al tantear terreno dentro de lo que se busca proyectar hacia el público femenino recogiendo ideas que se mueven dentro de lo marino, veraniego y floral clásico, estableciendo conceptos que serían utilizados en perfumes posteriores como el punto tipo Charlie presente en Nautica Bermuda Blue o el agua de frutas cítricas que se intensificó y volvió más tropical en My Voyage, repitiendo en ambos casos un centro de rosas frescas y polvosas que bordean las peonías. En el ámbito de diario la fragancia consigue mostrar una veta fresca e incluso alegre a cargo del agua de mandarinas secas tipo cáscaras que tiene como propósito refrescar en verano sin dejar de lado una imagen femenina reforzada por florales no densos, apta para un uso en solitario en la ciudad y en exteriores. En oficina el aroma consigue ajustarse al estilo laboral por las flores, por momentos algo personal por el agua de mandarinas secas y sin mucha proyección en pasillos, manteniéndose en un ámbito discreto no complejo de verano. Por el lado nocturno la fragancia se sostienen en las flores polvosas que tienden a volverse más densas hacia el final, manteniéndose en un estilo semiformal calmado de ambientes limpios tipo reuniones de camaradería y cenas, sintiéndose simple en eventos más formales tipo matrimonios y con las flores dando una idea clásica en fiestas informales. Por el lado romántico el floral polvoso no aporta ideas sensuales o empáticas, destacando con una intención de disfrute personal más que como perfume de conquista o seducción. Rango de edad entre 25 y 60 años.