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A*Men Pure Havane by Thierry Mugler

Esta fragancia de comienzos del año 2011 corresponde a la tercera edición limitada de la serie relativamente anual "Pure" de A*Men, que toman el aroma central de pachulí con ámbar, tonka y vetiver del A*Men de 1996 y lo complementan con una nueva nota extra en cada versión, comenzando por "Pure Coffee" del 2008 que se centraba en granos de café y "Pure Malt" del 2009 que agregaban un toque de malta y cebada de whisky. En esta edición se agregan notas de tabaco amielado que recuerdan a los habanos cubanos, lo que inspira el empaque y nombre de la fragancia con el nombre de la capital de Cuba en inglés y con un frasco de un color marrón ligero que busca igualar el color de las hojas de tabaco secas usadas para los cigarros. En el sitio de Thierry Mugler destacan el enfoque centrado en habanos de la fragancia pero sólo detallan que las notas principales del perfume son notas extras de tabaco.

En la partida la fragancia muestra un punto notorio de pachulí confitado, el mismo usado en el A*Men original, agregando variaciones que en los primeros 2 minutos lo acercan al estilo más verde de TL pour Lui de Ted Lapidus, pasando luego a una veta de menta ligera con puntos de vainilla y resina, con un punto base que está entre cacao y cedro, con poca apariencia explícita de tabaco tradicional de perfumería. La fase media ocurre rápido, alrededor de 10 minutos después de aplicado con una caída brusca de las porciones verdes de pachulí, predominando un tono de vainilla ambarado ligeramente amaderado de buena estela y de intensidad menor que A*Men original, presentando también un balance de notas más agradable sin puntos agresivos y manteniendo en la base la porción confitada de pachulí que comparte espacio con resinas ligeramente ahumadas. El aroma se mantiene relativamente estable hasta unas 2 horas después de la partida, con aparición de puntos dulces ligados a ámbar, cacao, vainilla y acaramelado que dan una impresión similar a la que producía Animale Animale Men, apareciendo al poco tiempo de oler la veta característica de pachulí que vuelve a mostrar tintes un poco más verdes e incluso con mezclas sucias ligeramente florales, con un punto del cedro dando una aproximación a lo que podría ser tabaco rubio seco, más aromático que el tabaco de habanos y menos perfumado y menos fragante que el tabaco de pipas. A 4 horas el aroma tiende a volverse más seco, ascendiendo un punto de ámbar con cedro ligeramente especiado a la canela y bajando el cacao con pachulí a la menta, con capas más atalcadas y un punto acaramelado que está entre miel y polen de madreselva con vestigios de vetiver tipo arbustos, más lineal y con mucha más influencia de pachulí que el tabaco amielado usado en Belle d'Opium de YSL. A las 12 horas el aroma destaca por una mayor tibieza, todavía con la nota de pachulí confitada como dominante pero acompañada de mayores proporciones de resina, granos de tonka, cacao a la vainilla y cedro, con una presencia aparente de tabaco que se ubica aromáticamente entre el cedro y el pachulí. En fase final pasadas 24 horas el aroma se siente más avainillado y amaderado, superando el pachulí que todavía se mueve en un ámbito confitado no verde y mostrando vetas semi gourmand al fondo y de complemento que están entre caramelo tostado, café, moka, cacao y cedro.

La fragancia por el centro recurrente de pachulí da la impresión de ser una variante menos agresiva y menos intrusiva de A*Men pensada en el público que gustaba de la fragancia original pero que se sentía descolocada por su intensidad y gran estela, con un repunte en puntos base ocasionales de cacao y vainilla y un comportamiento en bloque por momentos lineal que la hacen apropiada para ser usada como fragancia de diario atemporal en solitario, tal vez privilegiando exteriores en invierno e interiores protegidos del calor en verano, para evitar que la fragancia se vuelva densa al transpirar y termine ahogando. En oficina el enfoque del perfume se siente correcto y con porciones que están en el aromático y el amaderado y que suelen ser aceptadas como familias aromáticas profesionales, con buena estela en pasillos al caminar y manejando de mejor forma el factor intrusivo que presentaba A*Men como un cruce entre TL pour Lui y Animale Animale Men. En el campo nocturno la fragancia muestra puntos sucios que se proyectan bien en ambientes enrarecidos como pubs y fiestas, con tendencia al semiformal poco dinámico por la densidad de las notas que podrían quedar fuera de control al sudar en exceso, mostrándose también como una alternativa joven no recargada para una gala o matrimonio. Por el lado romántico también presenta mejoras con respecto a A*Men, resultando menos chocante o irritante a corta distancia y consiguiendo mejores resultados con pocas aplicaciones para mantener la curiosidad e invitar a oler de cerca. Rango de edad entre 25 y 50 años.