Ferrari Uomo by Ferrari

Este perfume de comienzos del año 2009 marca una nueva tendencia mucho más esencial dentro de la línea Ferrari, desligándose casi por completo del concepto de lujo y automóviles en los que giraban las ediciones anteriores y apuntando a lo básico con un nombre que se traduce simplemente como "Hombre", aspecto que se refleja en la forma de la botella completamente diferente a sus predecesores, de líneas rectas más elegantes inspiradas en el diseño y estilo, abandonando el escudo plástico amarillo de la marca que iba adherido al frente de las botellas y cambiándolo por un grabado minimalista sobre metal del caballo de Ferrari en la parte superior del tapón. En el sitio de venta de productos que mantiene Ferrari se destacan las siguientes notas aromáticas: limón, bergamota, enebro, cuero, nuez moscada, maderas, resina de ládano, granos de tonka y pachulí oscuro.

La fragancia en su partida muestra unas breves notas de tabaco y cuero fresco, las cuales migran gradualmente en cosa de minutos en nuevas notas de carácter resinoso, particularmente mezclas de resinas que varían entre los tonos de incienso y plástico. En fase media se mantiene la resina como nota dominante agregando ahora una componente un poco más dulce, conservando la idea de inciensos y resina aromática de palosanto mezclada con cera depilatoria de abejas que bordea el olor a plástico. Entremezclado con la resina se siente madera de cedro como base al oler por más tiempo y conseguir saturación de la nota de resinas. A las 2 horas y media de aplicado las resinas bajan en intensidad aunque siguen manteniéndose dominantes, dejando espacio para que se muestren notas de la familia de la madera cercanas al cedro e incluso con algo de nuez moscada que actúa más como madera que como especie. A unas 5 horas de la partida las resinas bajan bastante quedando en un segundo plano como base, con mayor presencia de madera seca y notas incipientes de nuez moscada que comienza alineada con la madera pero que luego toma líneas más picantes. A unas 9 horas de aplicado la fragancia baja de intensidad algunos grados, con madera especiada como nota dominante y con un aumento de tonos dulces basado en las resinas pero con notas de pachulí y trazas de vainilla ambarada a la cabeza. Por momentos el pachulí toma características de raíces, mostrando líneas polvosas y terrosas que se asocian con unos cítricos perdidos de la partida y que quedaron ocultos por las resinas, dando una similitud a jengibre con bergamota terrosa como en Tuscani per Uomo de Aramis, pero desapareciendo esa sensación cuando reflotan las resinas. En fase final el aroma es mucho más seco y tenue, principalmente cáscara de nuez moscada con rasgos de madera y residuos de resina que tienden a un tono de raíces. Se sienten líneas vegetales de pachulí que junto con un poco de vainilla también seca aportan un aire final dulce y que refuerzan la idea de un cuero seco con picante.

La fragancia da un primer golpe hacia las resinas y se mantiene así por bastante tiempo opacando a las notas secundarias las cuales aparecen con diferente intensidad y tiempo dependiendo del tipo de piel que use la fragancia. Si bien las resinas tienden al invierno, la densidad que tienen no es tan alta como para causar tibieza a flor de piel, perfilándose como un aroma de diario atemporal. Las resinas son llamativas y con algo de autoridad, destacando en el campo semiformal en oficina donde se sienten limpias y con estela no intrusiva, con buena capacidad de memorización por una nota básica y algo lineal resinosa que a veces recuerda a otros perfumes. En el escenario nocturno se comporta de manera parecida que en oficina, dando un toque algo oscuro y misterioso a una presencia semiformal a formal joven, para alguien no protagónico invitado a un matrimonio o para una persona que se reúne con colegas o amigos en un bar o cena. Por el lado romántico las resinas son intensas apuntando a una imagen más masculina presencial que empática, más apegado a la situación de salir con una pareja conocida que aventurarse a conquistar mujeres en un salón. Rango de edad entre 30 y 50 años.