Verdon by L'Ocitane en Provence
Esta fragancia del año 2010 forma parte de un conjunto de productos de cuidado personal e higiene orientados al público masculino, como hidratantes, limpiadores de rostro, productos de afeitado y geles de ducha, inspirados en los cañones o gargantas del río Verdón en Francia en la zona alpina de la zona provenzal, el cual es uno de los principales suministros de agua potable para esta zona y que recibe este nombre por una tonalidad verde turquesa que presentan sus aguas. Todos los productos de esta línea Verdon cuentan con ingredientes naturales provenientes del valle del Verdón, como por ejemplo extractos de espino marino, extractos de ajenjo, aceite esencial orgánico de menta piperita y agua de manantiales, y aprovechando el nombre se apegan a normas ecológicas como la venta de los envases en forma suelta para evitar usar empaques de cartón, el uso de vidrio reciclable en las botellas y el uso de alcohol de origen orgánico. En la página de L'Occitane señalan que las notas aromáticas de este perfume son: bergamota, cáscara de limón, menta piperita, lavanda, agua fresca y cedro.
La partida es bastante fresca, con un aire principal de menta herbal ligera, lejos de la idea de mentol y proyectándose más como un aire frío vagamente aromatizado, con rasgos de bergamota con un comportamiento intermedio y casi como vehículo o complemento, sin proyectar tintes alimonados o a la mandarina notorios, y con vetas aromáticas naturales hacia el fondo. En fase media aumentan los grupos verdes cercanos a la menta y albahaca, con un punto especiado cercano al jengibre que destaca más después de 1 hora de aplicado y que ofrece un efecto curioso parecido al de un agua mineral gasificada, con picores ligeros similares al del anhídrido carbónico. Al cabo de unas 2 horas de aplicado se mantiene el jengibre en conjunto con la menta, con una capa de agua que recuerda aires de lavanda fresca rozando el agua especiada, todas estas notas resaltando la idea de un picor general. A unas 4 horas de aplicado se agrega una nota de madera seca como evolución del jengibre, con rasgos de aires marinos y una capa verde que sale del promedio, parte menta ligera y parte ajenjo diluido, más fresco y menos seco que el presente en Jazz, con trazas de vetiver también fresco y cargado al agua como posible causante de la idea de aire marino. Sobre las 6 horas de aplicado una parte de la línea de lavanda proyecta la idea de enebros, con rasgos vagos de madera muy al fondo y con la menta más apagada. Hacia las 8 horas la fragancia vuelve a la idea de herbales, parte menta con albahaca y rasgos de agua especiada con residuales de cítricos aromáticos que incluso ahora bordean la cáscara de pomelo. En fase final la fragancia se siente como una mezcla de tonos de enebro al agua con menta ligera, con rasgos de jengibre con naranjas muy bajo que dan la idea de picor de agua mineral gasificada y mostrando puntos más intenso de menta rozando el mentol al oler por más tiempo. Paralelo al jengibre se siente una base suave de maderas tenues y un poco secas, que se mantienen en segundo plano y como nota de complemento.
La fragancia en general presenta un enfoque natural energizante, orientada fuertemente al estilo de diario veraniego que puede aceptar usos invernales no muy fríos por la mezcla de menta fría con especies, con un corte cercano al agua de colonia tradicional masculina no deportiva basada en vetiver con mentol. En oficina el aroma se siente limpio, manteniendo la sensación de energía aportada por la menta, tal vez algo semiformal por un enfoque frío especiado que le resta dinamismo y lo aleja de lo informal. La idea de diario que ronda al perfume no se enfoca bien en un uso nocturno, donde las líneas de menta recuerdan rasgos de lociones antiguas cotidianas y faltándole una estructura que le de un mayor desplante en el aspecto semiformal o formal, cayendo a la idea de aroma de diario tardío en un uso informal. Lo mismo ocurre en el lado romántico donde la menta está más orientada a proteger la piel que a atraer al sexo opuesto, tendiendo nuevamente a lo cotidiano y sin abarcar la idea de aroma especial para una situación especial. Rango de edad entre 30 y 60 años.