Uomo Absolute by Ermenegildo Zegna

Esta fragancia del año 2014, de la marca italiana de vestuario masculino Ermenegildo Zegna, aparece 1 año después del lanzamiento de Uomo, proponiéndose esta versión como una variante más tibia del original manteniendo un enfoque de hombre moderno. El envase se apega a la forma de botella rectangular usada en Uomo, incluyendo los diseños de líneas horizontales grabados en la cara frontal, cambiando el tapón translúcido por uno opaco y con el vidrio asumiendo una tonalidad oscura. En el sitio de ventas de Zegna destacan para este producto que las notas aromáticas principales son: bergamota, violetas, vetiver, cedro, vainilla y maderas ambaradas.

En partida la fragancia presenta un inicio oscuro en resinas que traen un recuerdo de Fahrenheit de Dior combinado con aportes de madera seca tipo arbustos, rebajando el acabado oscuro pero manteniendo una línea en resina con tintes volátiles de violetas sobre los 5 minutos, presentando a los 10 minutos un aroma en parte confuso que deja una impresión de aroma corporal sin llegar a comino que se mantiene en un rango de resinas con madera, definiendo las porciones secas hacia sándalo a los 15 minutos y sumando un frescor neutro cercano a floral que pasa de violetas a jazmines a los 20 minutos. En fase media a los 30 minutos la porción de madera de arbustos entrega un picor ligero tipo pimienta rosada que se mesura con inclusiones de verdes tradicionales de cocina tipo tomillo y eneldo con un rasgo bajo de limón o lima que está entre bergamota y vetiver, volviéndose más fresco y presentando tonos de perfumería masculina de los años 90 en torno a sándalo con un frescor de enebro que al cabo de 1 hora se vuelve más seco con una impresión de cuero con violetas insertas en el enebro, sumando una tibieza de granos de tonka con un dejo de bergamota. A las 2 horas la fragancia cambia su enfoque, manteniendo una línea de madera seca centrada en sándalo que asume características de vetiver sin tintes verdes y que incluyen aportes de limón en cáscara, apagando el aporte de tonka y volviendo a presentar aromas de violetas como los de Fahrenheit, reinsertando a las 3 horas estas violetas en un acabado polvoso que se aleja de la primera impresión de cuero y tiende a confundirse con bayas de enebro menos frescas, retornando a las 4 horas a un aroma similar a Fahrenheit en violetas con madera seca al vetiver, con una aparición ocasional del punto de olor corporal. A las 6 horas el aroma sigue evolucionando hacia tonos secos bajando el aporte de violetas e incrementando tibios de ámbar y tonka rebajada, con una sensación verde que contiene características de vetiver pero que también aporta un áspero silvestre tipo ajenjo que coincide en parte con el aporte de olor corporal mezclado con cuero, tomando matices florales neutros a las 9 horas que aligeran el acabado oscuro simplificando el fondo en una madera similar a nuez moscada sin picor, llegando a las 12 horas con un frescor de la familia de la bergamota en reemplazo de las flores, la cual se abre a mandarina suave y tonka que crean un efecto de agua fría tipo cáscara de naranja que continúa con un acabado seco atribuible a madera, aislándose el enebro en un polvoso bajo que está entre cuero y menta. En fase final a las 24 horas el perfume mantiene una base de la familia de las maderas secas que apunta a tintes de arbustos tipo vetiver con una nuez moscada de bajo picor que parece más cercana a canela, sumando un dulzor extra que va entre musk, bergamota y vestigios de tonka que se combina con una capa todavía superior de enebro diluido.

La fragancia sigue un perfil correcto de tendencias clásicas en torno a secos de madera y resina ligera inicial, lo bastante tenue para cubrir en el segmento de diario un uso atemporal, sin apegarse a un enfoque deportivo. En oficina el aroma sigue un lineamiento laboral de aspecto serio la mayor parte del tiempo y cumpliendo con no ser intrusivo en reuniones con colegas, sufriendo en el efecto memoria al traer recuerdos de Fahrenheit y dejar una impresión de ser un clon en algunos aspectos, llegando a un nivel mediano que se ve afectado también por una intensidad mesurada que termina en aromas secos más compactos. En el campo nocturno la fragancia presenta rasgos cercanos a salidas semiformales en ambientes de baja contaminación que faciliten su proyección, alejándose del segmento no adolescente por una apariencia general seria y no del todo viva o chispeante, pudiendo adoptar un enfoque formal no estridente y con cierto aire nostálgico y clásico. En lo romántico la combinación de notas se mueve en un rango seco clásico, sin puntos extras que favorezcan intenciones acogedoras o sensuales que salgan del promedio, apuntando a una intención principal de disfrute personal y apariencia pulcra. Rango de edad entre 25 y 60 años.