Royal Marina Diamond by Princesse Marina de Bourbon

Esta fragancia del 2013 aparece en el mercado acompañada de una versión par también orientada al público femenino y ambas determinando una nueva línea de perfumes llamada Royal Marina dentro de la marca Princesse Marina de Bourbon, apelando a las raíces monárquicas del apellido Bourbon e inspirándose en joyas de la corona de las cuales reciben ambos perfumes el nombre de una piedra preciosa: rubíes para Royal Marina Rubis y diamantes para Royal Marina Diamond. El envase sigue un diseño de botella común con su par Rubis y que consiste en un frasco esférico que es más plano en su cara frontal y que contiene grabados por los costados, frente y cara trasera que recuerdan cintas con gemas de un adorno de corona, usando un tapón plateado con una flor de lis como símbolo de la realeza francesa y con la caja manteniendo un motivo de decorados en joyas donde se nombra al perfume como "Royal Marina Marina Diamond", con la fragancia distinguiéndose de la versión Rubis a nivel de botella sólo por el color amarillo del líquido en su interior. En el sitio M. de Borbon destacan para el perfume las siguientes notas aromáticas: grosellas rojas, iris, jazmín, madera de copaiba (un árbol sudamericano de la familia de las Copaiferas, donde el término copaiba corresponde a una resina medicinal aromática que se extrae de ellos), vainilla y musk.

En partida la fragancia tiene un inicio que gira en torno a un par de notas de vainilla y tintes rojos frutales breves cercanos a vino, con parte de la vainilla tomando un matiz que pasa por cuero y se aproxima rápido hacia maderas al superar los 5 minutos, estableciendo en este punto una nota de pachulí que toma un carácter dominante y que sigue oscureciéndose, retomando la idea de cuero a los 15 minutos pero con trasfondos de bosque, agregando pequeños aportes especiados a los 20 minutos. En fase media a los 30 minutos se mantiene el enfoque de bosque en torno a madera, musgo y pachulí con cuero mojado, sumando resinas inciensadas más oscuras y con tintes quemados cercanos a algunas características del cuero y pachulí y que incluso se sienten como una versión femenina de Fahrenheit de Dior, agregando puntos dulces de vainilla al pachulí a 1 hora de aplicado. A las 2 horas el perfume mantiene una presencia basada en vainilla combinada de cerca con pachulí que incluye una madera húmeda de bosque en reemplazo del cuero y de los inciensos, apuntando hacia cedro y con rasgos bajos de almendras, tomando un carácter más invernal y clásico que trae recuerdos de otros perfumes como Dune de Dior y Euphoria de Calvin Klein, aumentando el aporte dulce acaramelado en la vainilla a las 3 horas que se separa de un fondo más seco de pachulí, conservando un aroma de almendras que se acerca a flores que pasan por un polvoso de tierra de iris, aumentando el aporte de resina tostada a las 4 horas que tiene un carácter dulce ligeramente acaramelado al pachulí, con fondos de violetas e iris que acompañan a una vainilla más notoria. A las 6 horas el perfume tiene un momento de linealidad al estabilizarse en una nota de pachulí de bosque que incluye acaramelados como los de Angel de Thierry Mugler, demorando en agregar resinas inciensadas tostadas que siguen recordando el cuero de Fahrenheit y que tienen un momento de dominio al llegar a las 9 horas, rebalanceándose las mismas notas a las 12 horas con un privilegio del tono de vainilla que va alineado con las resinas tostadas, destacando al fondo una veta de aspecto frutal ácido cercano a una piña que vuelve a dar una similitud con Angel de Mugler en su versión Eau de Toilette. En fase final a 24 horas de aplicado el perfume se estabiliza en un pachulí con praliné que tiene rasgos terrosos como los de CH de Carolina Herrera, con un poco de madera que tiene aproximaciones verdes al borde del musgo de bosque donde destaca una vainilla de bizcochos, más un punto de fruta madura ocasional solapado al fondo.

El perfume por sus tonos dominantes de vainilla, pachulí, resina y madera tiene a nivel de diario una presencia que apunta con más comodidad a épocas frías invernales, con una preferencia más cercana a lo social que a lo personal cotidiano y de paso evitando situaciones deportivas que hagan transpirar en exceso. En oficina el aroma se siente elegante y distinguido pero con un carácter de bajo dinamismo, consiguiendo un buen efecto memoria por las capas más notorias de vainilla y resinas con vainilla que tienen un comportamiento lineal, dando una imagen profesional relajada que se sostiene en reuniones sin pretender ser el centro de atención o asumir el rol protagónico. A nivel nocturno el perfume apunta a ocasiones semiformales no adolescentes, como cenas íntimas y reuniones sociales que pueden llegar a alcanzar una notoriedad formal de matrimonios. En lo romántico la fragancia plantea un ambiente distinguido para salir con una pareja conocida, entregando un aroma que puede interpretarse como una propuesta seductora correcta en un ámbito social. Rango de edad entre 25 y 60 años.