In The Mood For Love by Gianfranco Ferré

Este perfume del año 2009 destaca por el rescate del color blanco como emblema del diseñador italiano Gianfranco Ferré, fallecido en el 2007, quien lo usaba como distintivo de pureza y delicadeza con una base elegante y atemporal en la línea de blusas que caracterizaba a la marca, dándole este perfume un nuevo significado al blanco símbolo de un ambiente inocente y puro para un desarrollo romántico. El envase hace también referencia a la base arquitectónica del diseñador con una botella redonda de base plana y tapón de borde curvo que deja un espacio al unirse con el frasco a modo de escultura, todo en color blanco con las letras del perfume en rojo, ambos colores como los enfoques opuestos de inocencia y pasión con respecto al amor. En el sitio de ITF Cosmetics, fabricante de las fragancias de Gianfranco Ferré, destacan las siguientes notas aromáticas: tamarindo, bergamota, naranja amarga, magnolia, rosas blancas, flor de azahar, lirios del valle, jazmín, rosas rojas, cedro, ámbar, musk y sándalo.

En la partida la fragancia muestra una nota muy dominante de flor de azahar, de características naturales y con cercanía a vegetales y alimonados por el lado de la bergamota, solapando a la mayoría de las notas secundarias que no alcanzan a ser percibidas en esta etapa. En fase media la fragancia sigue mostrando la nota de flor de azahar a los 40 minutos del inicio, con pequeñas inclinaciones a polvosos de pétalos que siguen en la misma línea del azahar y se mantienen por bastante tiempo, sintiéndose una apertura a nuevos aromas a 2 horas y media con una nota de almendra muy suave que deriva del polvoso y que da espacio a ideas de mimosas, la cuales se amplían también a rasgos de magnolias a las 4 horas de la partida, con partes de fresias que comparten el alimonado inicial. A las 7 horas la nota dominante de flor de azahar tiende a volverse más cremosa, absorbiendo a las almendras y cambiándolas por un tono de jabón por el lado del jazmín, con pequeños puntos de tallos especiados al fondo y vetas de ámbar suave, manteniendo un pequeño grupo aromático de magnolias con fresias al fondo, más una mimosa con polen que trae un recuerdo vestigial y muy al fondo de Anais Anais de Cacharel. Hasta las 12 horas sigue dominando la flor de azahar, incluso sufriendo bajas en varias de las notas secundarias, quedando un aroma bastante natural parecido al de algunos perfumes de L'Occitane en Provence y desarrollando un pequeño punto plástico, volviendo a dar recuerdos esporádicos de Anais Anais. En fase final la nota principal de flor de azahar toma un carácter más cremoso, manteniendo el dominio de la fragancia pero permitiendo pequeños puntos de madera y ámbar residual más un ligero repunte de magnolias, abriéndose a tonos de polen que son los que dan la idea de un Anais Anais simplificado y más moderno.

La fragancia, principalmente por el centro de flor de azahar y el manejo de tonos florales delicados en torno a ideas de jardín, da un primer enfoque orientado a un uso de diario primaveral de exteriores bastante relajado, apto para usar como fragancia de salida de ducha e inicio del día, aguantando situaciones medianamente deportivas aunque pudiendo ahogar o saturar bajo condiciones de calor y sudor extremo. En oficina el aroma vuelve a sentirse relajado y con ideas de primavera y verano, distinguible en pasillos por la nota central de flor de azahar que crea un buen efecto memoria y que por sí sola ya es bastante llamativa, dando una idea de perfume artesanal elegante en reuniones y conversaciones en el ámbito semiformal a informal pulcro. En situaciones nocturnas el perfumes es lo suficientemente intenso para sentirse en ambientes no contaminados, tipo cenas e incluso matrimonios sin mucha gala o de corte íntimo, tal vez percibiéndose como un aroma denso y poco flexible en fiestas informales. Por el lado romántico la fragancia asume un corte inocente y limpio, atractivo a pesar de tener un aroma por momentos lineal en torno a una nota central, despertando curiosidad por las variantes delicadas que presenta la flor de azahar. Rango de edad entre 20 y 60 años.