Pure Custo Woman by Custo Barcelona
Esta fragancia del año 2010 aparece en el mercado 2 años después de la primera incursión de la casa de modas Custo Barcelona en el mundo de los perfumes, realizando un lanzamiento pareado masculino y femenino de la línea Pure, la cual se apega a lo esencial de la marca y a su espíritu creativo con abundancia de colores, diseños, estampados, texturas y mezclas de materiales como reflejo de alegría y atrevimiento. El empaque en la versión femenina se basa en motivos que recuerdan a ojos o plumas de pavo real en gráficos ondeantes de tonos rojos, con la botella llevando un envoltorio de tela de neopreno con los mismos motivos y abrochado con un cierre de cremallera, imitando el traje de un surfista, de acuerdo a la moda surfer californiana que motivó de un comienzo a los hermanos Angel Custodio y David Dalmau, fundadores de la marca. En el sitio de Idesa Parfums, poseedor de la licencia para fabricar perfume de Custo Barcelona, señalan que las notas principales de la fragancia son: bergamota, limón, jengibre, salvia, violetas, frutos, pimienta, hedione (una molécula amplificadora de aromas con rasgos de jazmín), maderas, musk y vainilla.
La fragancia en su partida se siente como una mezcla entrelazada de notas, con puntos aparentes de violetas polvosas y herbales silvestres tipo pasto, tomando unos 10 minutos para alinearse en un tono más floral clásico cercano que roza ideas de Halloween y Duende de J.del Pozo con un jazmín antiguo y dejos de colonia. En fase media las notas aromáticas se sienten mejor ordenadas, con una base de violetas y jazmines en un estilo de colonia clásica montada sobre una capa ligera de agua cítrica de mandarinas y limas verdes, con las mandarinas abriéndose a rasgos de limón con un jengibre mediterráneo ocasional a 1 hora y media de la partida. A 2 horas vuelve la idea de jazmín ligeramente jabonoso pero de baja aromaticidad floral, dando ideas vegetales de colonia antigua que se asocian con las violetas e incluso destacando pequeños puntos especiados que complementan al jengibre. A 3 horas el aroma tiende a volverse más vegetal con referencias a tallos y hojas, con las violetas volviéndose más polvosas y asumiendo un comportamiento tipo talco, con un repunte de una veta suave no estridente de frutal rojo fresca hacia las grosellas, que nuevamente recuerda algunas esencias usadas en perfumes de J.del Pozo por el lado frutal del On Él. A 4 horas los frutales tienden a volverse más oscuros, con una caída de las violetas y un ascenso del jazmín clásico, con un cuerpo central de agua fría que guarda cercanía con frutas verdes y calone, seguido de especiados leves e incluso una idea de vetiver fresco, con apariciones casuales de un tono cremoso que compensa la inclinación hacia agua de arbustos. Ya a las 8 horas la fragancia muestra una estabilidad en el aroma, con violetas en el fondo y un centro parte especiado con madera de arbustos, recordando el estilo de fragancias Esprit pero por el lado masculino, rondando un fondo que está entre pimienta y una insinuación de amargo de salvia que se confunde con agua de jazmín. En fase final retornan los tonos florales con un jazmín tipo Imagina de Ágatha Ruiz de la Prada, con pétalos de violeta todavía polvosos un poco masculinos en la línea de The Artist de Gap y con una porción tibia de musk con ambarados, con un carácter menos clásico y perdiendo la parte verde de arbustos, reteniendo en capas medias un frutal rojo.
La fragancia muestra un cambio con respecto a la primera edición de Custo Barcelona, con un aroma que se siente más rústico e inclinado a tonalidades de arbustos y verdes menos brillantes y más ásperas, todavía dentro de un ámbito de diario veraniego pero rondando la idea de tonos frescos personales informales similares a los manejados por la marca Esprit. En oficina el aroma se mueve dentro de lo cotidiano, con florales correctos en torno a una veta de jazmín pero que no apuntan a conseguir un efecto memoria y que por momentos se sienten muy serios y con poca chispa como para destacar profesionalmente. Por el lado nocturno los tonos florales se apegan demasiado a un estilo de agua de flores clásica, nuevamente quedando en un punto medio donde la fragancia no se inclina ni por puntos alegres de fiesta informal ni por una elegancia formal, perdiéndose también en ambientes enrarecidos. Por el lado romántico las mezclas de polvoso, arbustos y flores clásicas tampoco hacen gran aporte en conseguir atracción del sexo opuesto o de mantener la curiosidad a corta distancia. Rango de edad entre 15 y 60 años.