Hervé Léger Femme by Avon

Este perfume del 2010 corresponde a una nueva colaboración entre Avon y una casa de modas o diseñador invitado, siguiendo el mismo esquema planteado en años anteriores cunado se trabajó con Ungaro y Christian Lacroix. En esta ocasión la asociación es con la casa Hervé Léger, fundada en 1985 por el francés Hervé Leroux quien fue pionero en el concepto de crear vestidos basados en cortes tipo vendaje que se amoldaban al cuerpo de la mujer realzando su figura, siendo comprada esta marca en 1998 por el grupo BCBG de Max Azria quien tomó el control creativo de la casa y relevó a Leroux de la dirección. La botella sigue líneas rectangulares simples, destacando en el relieve una serie de bandas cruzadas que recuerdan el sello del vestuario estilo vendaje de la marca. En el sitio de Avon declaran las siguientes notas aromáticas para este perfume: magnolia, bergamota, flor de azahar, cedro, benjuí, ciprés y vainilla.

La fragancia muestra dentro del primer minuto una evolución rápida, desde una mezcla de florales imprecisos al alcohol hasta una magnolia bastante luminosa y con toques frutales, con capas cremosas algo lácteas intercaladas y un ligero frescor cítrico tenue cercano a una bergamota neutra y que la hace oscilar incluso hacia el lado de las fresias. En fase media la parte cremosa se estabiliza como nota de complemento, aumentando el punto cítrico ligado a la flor de azahar que aquí se siente más cercana a un brote de naranjas o mandarinas que a un tono plástico, manteniendo las vetas frutales de magnolia que se sienten frescas y ligeras con una cercanía a gardenias jóvenes. Sobre las 2 horas el perfume muestra un cambio, conservando la línea cremosa de magnolia pero con la flor de azahar asumiendo su aroma clásico cercano al plástico y produciendo interferencia sobre la magnolia, cayendo la influencia de la flor de azahar alrededor de 4 horas después de la partida y permitiendo que la magnolia vuelva a brillar con tonos cremosos parecidos a los presentes en In Bloom by Reese Witherspoon también de Avon. A 5 horas se agrega una veta paralela al floral que recuerda a pachulí tipo bosque con un resinoso a la vainilla que parece ser el que aporta la idea de crema, muy cerca de una idea de azucarado rojo floral, pero sin opacar a la capa floral. A 8 horas se mantiene la magnolia como nota principal y con el perfume conservando un carácter lineal, con el cremoso también destacando pero dando la impresión de una fragancia clásica conocida en la línea de un Red Door simplificado. En fase final la parte floral llega a un nivel de cremoso máximo, con tintes dulces más cercanos al ámbar y mayor idea de frutales fragantes derivados de las magnolias y gardenias, con una ligera tendencia al azucarado sobre las 24 horas y una presencia de vainilla secundaria al fondo ligada al ámbar.

La fragancia tiene como punto fuerte una capa notoria y dominante de magnolias a la crema intensa y femenina, algo lineal a ratos y opacada por un momento de presencia de una flor de azahar, pero en general mostrándose bien en un uso de diario no complejo donde la potencia del aroma la proyectan para un uso atemporal tanto en interiores en solitario como en las calles de una ciudad bajo un invierno no muy frío. En oficina la mezcla floral con crema se siente profesional y femenina a la vez, con buena presencia a distancias de conversación sin llegar a dejar una estela notoria en pasillos y mostrando una capa clásica que queda bien parada en reuniones, aportando una nota seria no madura. Por el lado nocturno la fragancia tiende a quedarse en un estado lineal más apropiado para reuniones con amigos a nivel semiformal y mostrando suficiente chispa para destacar en eventos informales, aunque tal vez frenándose un poco en actividades demasiado dinámicas. Por el lado romántico el aroma potencia una idea inocente, capaz de atraer y producir un efecto seductor a nivel joven, quedando como fragancia femenina correcta a mayor edad. Rango de edad entre 20 y 60 años.