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Love in Black by Creed

Este perfume de la casa Creed del año 2008 sigue a otro del año 2005 llamado Love In White, uno de los perfumes de mujer mejor vendidos hasta la fecha y caracterizado por unas líneas en general inocentes, proponiéndose esta nueva versión como un aroma opuesto más oscuro y nocturno, con mayores cargas sensuales a cargo de frutos negros intensos y florales más densos. El frasco sigue las líneas características de las botellas de perfume para mujer de la marca, con una base estrecha y hombros anchos en bajada, siendo uno de los pocos en llevar un vidrio coloreado no transparente. En el sitio web de Creed señalan que las notas aromáticas de este perfume son: violetas blancas, iris, clavos de olor, casis, rosas y violetas.

La partida tiene características florales intensas y clásicas, con un grupo que oscila entre el iris con rasgos de violeta inclinada a la idea de raíces, con un punto frutal confuso que parece provenir de una segunda línea floral más fresca y viva cercana a las rosas aterciopeladas, con una capa secundaria de polvo como base. En fase media la idea de frutal destaca bastante, incluso rondando por encima del iris que ahora presenta más características de violetas aunque sin brillar como una flor pura, con rasgos especiados que la opacan junto con los polvosos. Sobre las 2 horas se afinan algunas notas, con el frutal tendiendo a frutos oscuros que sumados a un especiado dan la idea de una rosa aterciopelada, acompañado de un iris que se complementa con el especiado para dar una veta más intensa en el polvoso y con la fruta alineándose con las violetas. A 4 horas de aplicado la fragancia se mantiene con una buena intensidad, con la sensación de notas muy densas a ras de papel y con estela media a mayor distancia, agregando en la línea especiada sensaciones de madera, canela y una mezcla entre nuez moscada y clavos de olor que por momentos punzan y otorgan un picor al perfume parecido al de una pimienta suave. A las 6 horas de aplicado se mantienen intactas varias notas, en especial la mezcla de frutos negros con especiado que son el grupo dominante, con los florales en segundo plano mostrando un paso de violetas hacia iris terroso casi amaderado que se alinea con el especiado que parece tomar más fuerza e inclinar el perfume hacia un estilo chiprés. En fase final los frutales oscuros tienden a la mora, que ahora se siente seca y muy concentrada, con especiados en la línea de la nuez moscada acompañada de sándalo e incluso algo de comino, con el iris terroso proporcionando rasgos de raíces parecidos al de un vetiver fresco con polvo, sin llegar al estilo chiprés. Se sienten pocas violetas las que parece fueron absorbidas por el concentrado de iris.

El perfume explota una mezcla de frutos negros con especies que parecen imitar la idea de una rosa clásica aterciopelada muy fragante, similar al efecto que producen las rosas en otros perfumes pero que al unirse con la nota de iris terroso forman una amalgama fácil de reconocer y que se diferencia de estos perfumes parecidos. Debido a la intensidad del aroma por momentos da la idea que el perfume tiene características sociales demasiado marcadas y vetas especiadas densas que podrían ser molestas en un uso de diario, optando por asumir otro escenario durante estas horas del día o comenzando su uso más tarde. En oficina el perfume consigue destacar y llamar la atención con un perfil algo clásico y con rasgos tradicionales que compensa con los rasgos atrevidos y más osados de los frutos oscuros, bordeando la intrusividad pero consiguiendo llamar la atención en un piso, ya sea como orador principal en una reunión con una vestimenta formal tipo sastre, o mostrando autoridad sin caer en rasgos masculinos. Como aroma nocturno el perfume toma preferencia hacia escenarios formales como galas o matrimonios de corte elegante, mostrado una buena estela que sobrepasa los aromas ambientales. Algo parecido ocurre en el campo romántico donde repite características del escenario nocturno como la noche y los eventos elegantes, mostrándose sensual e intrusivo, con una buena estela aromática y con frutales agresivos aunque mesurando la cantidad de perfume aplicado para no exceder el efecto agresivo y alejar al sexo opuesto. Rango de edad maduro, fomentando la idea de una mujer ya formada no adolescente, entre 35 y 60 años.