Green Tea Bamboo by Elizabeth Arden

Esta fragancia del 2014 se suma a las ediciones periódicas que prepara la marca Elizabeth Arden a partir de Green Tea de 1999, siguiendo al lanzamiento del año anterior Green Tea Honeysuckle y tomando en esta ocasión una nota de bambú que enfoca al perfume hacia un estilo de relajo centrado en tonos verdes de acabado mucho más vegetal y rústico. El envase mantiene la forma de botella rectangular de perfil ovalado y vidrio en tono verde con un decorado central de una hoja de té, agregando imágenes de troncos de bambú con hojas más un sello circular rojo con 2 caracteres orientales en su interior. En el sitio de Elizabeth Arden presentan el siguiente listado de notas: limón, bergamota, pomelo, bambú, hojas de árbol de tamarindo, gálbano, té verde, hojas de violeta, pomelo, lilas (en inglés Syringa), musk, abedul blanco, resina de lentisco, musgo, iris y mate.

En partida el perfume establece un cuerpo de agua fría con indicios diluidos de limón de té verde a los cuales se agrega a los 5 minutos una madera seca que se combina con té acercándose a ideas de calone, incrementando a los 10 minutos una sensación de humedad similar a la de una nota de manzana verde de duración acotada que se desvía a a los 15 minutos hacia herbales oscuros, tomando a los 20 minutos una apariencia mucho más turbia que se acerca a acordes marinos no salados de algas. En fase media a los 30 minutos el aroma se mantiene tosco recordando variantes de iris mezclado con nerolí y aromas de comida china que se aproximan rápido a una savia vegetal concentrada, manteniendo una impresión de pasto de jardín húmedo y recién cortado con tallos vegetales densos e infusión de hierbas medicinales. Sobre las 2 horas el perfume amplía el rango vegetal en hojas de plantas de jardín, claveles, savia y pulpa de áloe o sábila, dando una idea más concentrada de la nota de bambú usada en perfumería, aligerándose por momentos este tono por una referencia a alimonados de té verde con lirios del valle, suavizándose a las 3 horas los tonos marinos y enfocándose en interiores de flores de violetas e iris con una sección de pepino de calone, llegando a las 4 horas con vetas más suaves que incluyen ideas florales al jazmín. A las 6 horas la fragancia recupera el alimonado al té verde de la versión original de Green Tea combinando ideas de nerolí con alga japonesa nori y un aporte de interior de flores neutras al polen, destacando a las 9 horas variantes de pimienta rosada de tallos con violetas y un aire de lavanda donde reaparece en el fondo el rasgo de té verde pero en un formato más áspero como en hojas de mate, presentando a las 12 horas una nota de bambú concentrada de aspecto amaderado que contiene referencias a té verde fresco con una violeta que se desvía a loto. En fase final a las 24 horas la fragancia baja en intensidad colocando una nota central de bambú que se siente más limpia en una combinación de madera con vetas vegetales al pepino, sintiéndose una base alimonada compuesta por té verde al pomelo y lavanda con porciones toscas de mate y musgo.

El perfume por momentos se distancia de la línea Green Tea al proponer un paseo independiente mucho más silvestre y con matices toscos donde el bambú se siente como una nota en parte marina y en parte savia vegetal, con estos rasgos determinando a nivel de diario un uso de exteriores en primavera y verano, pudiendo soportar algunas actividades dinámicas mesuradas por el efecto frío del bambú. En oficina el perfume por momentos está al borde del enfoque laboral, siguiendo una línea más bien personal que empática y que necesita de varias horas para acomodarse y tomar un cuerpo más clásico, cubriendo el segmento informal y semiformal con un efecto memoria bueno al sentirse diferente a la mayoría de los perfumes de oficina girando en una idea de segmentos verdes de un jardín. En el escenario nocturno el perfume no parece enfocarse en situaciones sociales, como fiestas, salidas con amigos o cenas en los escenarios informal o semiformal, dejando la idea de ser un aroma orientado al día. En el caso romántico el centro vegetal marcado apunta a ser un viaje de introspección y disfrute personal casi en solitario en lugar de pretender se un aroma sensual. Rango de edad entre 25 y 60 años.