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Sexy Florever by Ágatha Ruiz de la Prada

Esta fragancia aparecida durante el 2016 es la primera variante que prepara la marca de la diseñadora española Ágatha Ruiz de la Prada para Florever del 2015, la cual a su vez era una propuesta actualizada de Flor del año 2000, con Sexy Florever manteniendo una línea de estilo juvenil alegre y ligera pero con un giro más sensual cambiando el enfoque más fresco y verde de su predecesor por tintes rojos cremosos. El envase repite la forma de botella con un perfil superior con forma de flor de 5 pétalos y base de vidrio curva, pero cambiando los tonos azules por dorado. En el sitio de Ágatha Ruiz de la Prada sólo describen la aparición de la fragancia, existiendo en el sitio de Facebook de la marca imágenes que señalan las siguientes notas: yuzú, té, jengibre, pimienta rosada, magnolia, flores silvestres, cedro, madera de hinoki, ámbar y musk.

En partida la fragancia presenta un aroma centrado en dulzores de duraznos y gardenias sobre una base de frambuesas que incluye indicios de limón verde, conservando a los 5 minutos la misma estructura base pero con nuevos tonos de cereales tipo avena y puntos apagados de mandarina, agregando a los 10 minutos un aporte paralelo polvoso de violetas que tiene corta duración y pasa a los 15 minutos a líneas de fresias y frutales rojos que terminan reducidos a azúcar, sosteniendo a los 20 minutos un aroma más cítrico donde destacan centros de fresias, mandarinas y un cruce entre pomelo y flor de azahar. En fase media a los 30 minutos el perfume sigue sobre un hilo central de mandarinas menos ácidas que incluye referencias polvosas de flores derivadas de frutales rojos que apuntan a mezclas de magnolias con lichís, con tonos cálidos menos precisos en ámbar con gardenias, llegando a 1 hora a una versión más alimonada del fondo de gardenias que refuerza la idea de fresias con tallos amaderados y retornos del punto de cereales hacia loto y pimienta rosada. A las 2 horas la fragancia se acerca a aromas de frambuesas rodeados de tallos con mayor proporción de madera, elevándose líneas azucaradas de la familia de la frambuesa que contienen vestigios de violetas dulce y una crema de duraznos más alimonada y verde, tendiendo a un aroma más polvoso y floral neutro a las 3 horas que combina vestigios ácidos de frambuesas con secciones al limón verde y mandarinas, resaltando a las 4 horas un atalcado de violetas que arrastra un punto de jazmín levemente sintético como el usado en otros perfumes de la misma marca. Sobre las 6 horas el perfume vuelve a un cuerpo floral verde y alimonado, apagando las referencias de jazmín e incluyendo un nuevo tono dulce de la familia de las rosas y peonias sobre capas dulces discretas de polen y musk, decayendo por un momento el jazmín a las 9 horas en favor de polvosos de violetas con un dulce de rosas de jardín suaves, con las violetas tomando un matiz metálico de moras sintéticas a las 12 horas. En fase final a las 24 horas de aplicado la fragancia conserva un aroma de fondo verde con base en musk, elevando los tonos dulces que se sienten menores a una rosa que absorben a las moras cambiando el punto metálico por madera de tallos.

La fragancia mantiene un estilo aromático joven que combina aportes de fruta roja con una base cálida, descendiendo con el tiempo a líneas florales todavía cálidas pero ligeras y con un tinte verde alimonado que privilegia a nivel de diario un uso primaveral y veraniego, con puntos frescos que aguantan actividades dinámicas en exteriores pero no a nivel de un esfuerzo deportivo tipo gimnasio. En oficina la fragancia posee un matiz optimista y alegre no intrusivo que incluye una base floral verde amaderada lo suficientemente notoria para apegarse a un lineamiento laboral, teniendo un efecto memoria mediano que se ve afectado por combinaciones de notas estables que están presentes en otras fragancias jóvenes. En el caso nocturno el perfume posee matices verdes que en parte frenan su expresión recordando un aroma de día, requiriendo de sobreaplicaciones para reforzar la capa de crema dulce con frutas rojas que apunta a reuniones sencillas con amigos y fiestas, dando una presencia ligera en eventos protocolares semiformales y perdiéndose como un aroma sencillo en el caso formal. En situaciones románticas la fragancia vuelve a agregar puntos verdes alimonados que privilegian un desplante fresco de disfrute personal de verano en lugar de ser una propuesta de corte sensual. Rango de edad entre 20 y 60 años.