Arlésienne by L'Occitane en Provence

Este perfume del año 2014 aparece como una línea de productos independientes dentro de la marca L'Occitane, incluyendo geles de ducha, lociones corporales y cremas de manos basadas en un aroma que refleja la personalidad de la mujer autóctona de la comuna de Arlés al sur de Francia dentro de la zona de la Provenza, que ha despertado la creatividad de los artistas locales con una personalidad única, usando en particular 3 notas básicas de rosas, violetas y azafrán para representar su gracia, misterio y temperamento fuerte, respectivamente. El envase consiste en una botella rectangular de frente plano en vidrio con hombreras en diagonal, tapón dorado cilíndrico y un vidrio transparente que deja ver un líquido de color rosado y un grabado de flores en la cara posterior, con el nombre del perfume cubriendo la cara frontal y escrito en una sílaba por línea. En los sitios de L'Occitane, en particular el de Reino Unido, destacan las siguientes notas: azafrán, mandarinas, rosas, lirios del valle, leche de higo, violetas y sándalo.

En partida la fragancia se mueve a lo largo de una nota dominante de rosas frescas que se mezclan con dulzores de peonías con un ácido de limón fresco que baja en presencia dando paso a capas polvosas derivadas de las rosas y que apuntan a iris y violetas, incluyendo a 5 minutos un punto dulce de moras que se abre a 10 minutos a un acabado de frutos rojos en crema dentro de la línea de las rosas y sumando a 15 minutos un aporte tibio de rosas mucho más clásicas y aterciopeladas que siguen unidas a violetas, colocando en la base a 20 minutos aportes de ámbar y grosellas rojas. En fase media a partir de los 30 minutos el perfume desarrolla un efecto de frambuesas con violetas al fondo que refuerzan un origen en rosas más oscuras, sumando secos de tallos de flores que aportan una aspereza breve a las violetas y las aíslan de las rosas, llegando a 1 hora con un formato más dulce y frutal de las rosas en torno a peonías, con las violetas tendiendo a iris terroso. A las 2 horas el perfume separa las notas florales principales en un agua clásica de rosas que sirve de base a peonías frutales más dulces que contienen brillos que no llegan a frambuesas, bajando la potencia de las peonías a las 3 horas en favor de violetas frescas con ámbar y base de madera fresca, ocasionalmente recordando porciones de aromas de cremas corporales clásicas de mujer, destacando a las 4 horas porciones ácidas más verdes que se desligan de las rosas y se sienten cercanas a lirios del valle, nerolí y naranjas. Sobre las 6 horas se siente un balance entre las rosas y las violetas que aparecen montadas sobre porciones verdes que están entre lirios del valle con bajo poder de limón y tallos de jazmín, incluyendo en la base un áspero de madera de baja proyección y separándose por momentos las rosas del grupo permitiendo que las peonías aporten tonos cremosos frutales, presentando a las 9 horas una mayor proporción de mandarinas con grosellas que se sustentan sobre variantes ligeras de las rosas unidas con ámbar, llegando a las 12 horas con una versión más amielada y verde en violetas y frambuesas sobre tallos con un aire de menta. En fase final después de 24 horas la fragancia cambia el balance de sus notas privilegiando un cálido de la familia del ámbar que relega al fondo a las rosas y violetas, manteniendo una línea verde ligeramente alimonada al lirio del valle con un frutal tibio de peonías.

La fragancia se mantiene cercana a un estilo de perfumería clásica sin época en rosas frescas con aportes de violeta que se suavizan con el tiempo, con una estructura no compleja que se siente grata de usar a nivel de diario en épocas de primavera y verano, por la forma en que se presentan las flores sin encajar en la realización de actividades deportivas. En oficina el perfume resalta un perfil correcto, cambiando una impresión adolescente por una inocente pero dentro de un rango relajado y no extremadamente exigente o profesional, con un efecto memoria que comienza en bueno en lo potente de la mezcla de rosas con violetas pero luego disminuyendo al recordar el aroma de cremas corporales. En el caso nocturno la presencia de las rosas dista del dinamismo de fiestas juveniles o de reuniones con amigos, y a la vez deja una impresión fresca para eventos socialmente estrictos o de mayor formalidad, mostrando un mejor potencial de uso en el día. En lo romántico algunos puntos de las rosas y las violetas escapan y se muestran punzantes a corta distancia, a nivel general mostrando un mejor desempeño como fragancia de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.