Lapidus pour Homme Gold Extreme by Ted Lapidus

Esta fragancia del comienzos del 2015 se agrega a la línea de productos basados en Lapidus pour Homme de 1987 y siguiendo a la versión Black Extreme del 2012, con Gold Extreme inspirándose en el concepto de mármol sólido e imponente planteado por la botella de Lapidus pour Homme pero imaginando la presencia de vetas o un filón de oro que convierte una roca simple en una joya que deslumbra frente al sol. El envase se basa en la forma de frasco de Lapidus pour Homme de frente plano y costados de perfil en ángulo con un tapón ranurado que incluye la válvula del spray, cambiando el plástico gris tipo mármol del original por un baño de pintura dorada. En el sitio de Ted Lapidus destacan en la descripción del perfume las siguientes notas: pomelo rosado, cardamomo, bayas de pimienta roja, canela, nuez moscada, clavo de olor, ámbar, vainilla, cuero y vetiver.

En partida la fragancia deja una impresión floral parecida a la de un jazmín de perfumería masculina, rodeado de brillos tibios cercanos a frutales rojos acotados a grosellas con un punto dulce que está al borde de un especiado y que sólo sobre los 5 minutos deja impresiones de una canela tibia que precisa un aporte al ámbar suave a 10 minutos, sintiéndose aportes verdes ligeros que pasan por un limón con lavanda limpia sobre los 15 minutos y que terminan mezclándose con una nueva resina más turbia de la familia del ámbar gris que contiene a la lavanda y se mueve en paralelo a la canela dejando una idea de bizcocho de pastelería a la vainilla a los 20 minutos. En fase media a 30 minutos la fragancia presenta capas tibias asociadas a resina sobre una canela de picor mesurado, aumentando la presencia de lavanda en hojas que se desliga de la primera impresión de ámbar gris y agrega similitudes con verdes de romero y tintes florales que repiten el jazmín del comienzo, dejando como base una vainilla dulce menos notoria que es absorbida por la canela, mostrando a 1 hora una variante más licorosa del ámbar gris que asociada con los frutales rojos deja una vaga similitud con One Million de Paco Rabanne, pero con más presencia de lavanda. Al pasar de las 2 horas la fragancia suaviza varias de sus notas centrándose en una lavanda sobre una base más simple que gira en torno a una vainilla, cambiando las impresiones de One Million por Le Male de Gaultier con un extra alimonado dulce no ácido tipo pomelo, sintiéndose grupos especiados que se organizan en torno a la lavanda y que amplían la canela hacia nuez moscada y variantes suaves de clavo de olor no picante, volviendo a 3 horas la apariencia tibia a la lavanda del ámbar gris pero en un formato polvoso y atalcado que contiene a la vainilla y ocasionalmente proyecta puntos verdes de pachulí de baja potencia con plástico de flor de azahar, suavizándose el aroma a las 4 horas combinando líneas de perfumería clásica terrosa de los años setenta con una resina a la vainilla aislada y dulce que combina ámbar gris con ládano y puntos de naranja roja licorosa. A las 6 horas el perfume sostiene una impresión plástica que proviene tanto de resinas como de una flor de azahar que surge de un tinte de la familia de las naranjas y las mandarinas más discreto que la naranja roja, con la lavanda reapareciendo como una capa de jabón que repite las ideas de jazmín masculino y con la vainilla desviándose hacia un cuero húmedo de baja presencia, compactándose el aroma a las 9 horas en una resina que absorbe la veta plástica y se orienta hacia un lado licoroso donde vuelven a resaltar los puntos de canela con una variante acaramelada de la vainilla, simplificándose el aroma a las 12 horas donde el perfume se estabiliza en resina licorosa con frutas rojas. En fase final a las 24 horas la fragancia asume un formato de resina plástica con base en ámbar gris e interferencia de frutos rojos imprecisos y amalgamados con aportes especiados que se sienten más picantes, pasando por canela pero agregando líneas de pimentón como en Jacomo de Jacomo Rouge que se mezclan con jazmines densos.

Dentro de la evolución que han presentado las fragancias de la serie Lapidus pour Homme, Gold Extreme equivale al resumen de la época de perfumería posterior a la década del 2000 al combinar puntos inspirados en One Million con un acabado plástico de resinas y especiados mesurados que evitan las proporciones de la década de los años 80, más una flor plástica que hace un vago eco a la calidez de Altamir también de Ted Lápidus y remata en Jacomo de Jacomo Rouge, por formato apuntando a nivel de diario como un aroma atemporal lo bastante fresco para usarse en primavera y verano en exteriores y aportando una calidez en interiores en invierno con mayores dosis, con el punto plástico pudiendo molestar en la realización de actividades deportivas. En oficina el aroma se siente menos profundo que Altamir pero mostrando el mismo tipo de desplante cálido y llamativo que se cruza con aires de One Million que le restan presencia y originalidad, afectando el efecto memoria que es bueno por lo lineal del aroma y lo persistente de su estela, pero que reduce su capacidad de retención precisa diferente al promedio al asociarse con la idea de un perfume conocido que posee varios clones y derivados. En el caso nocturno el perfume se sostiene en ambientes medianamente contaminados con un aire licoroso de fiestas, con un matiz que puede sentirse serio o poco fresco para un adolescente y favoreciendo un uso en edades medianas en salidas con amigos y reuniones con un grado protocolar mayor, perdiendo fuerza y elegancia en eventos formales. A nivel romántico el aroma puede marear o cansar a distancias muy cortas, teniendo mejor potencial como aroma de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.