Trussardi Black Extreme by Trussardi
Esta fragancia del año 2014 aparece como una propuesta más oscura de Trussardi Uomo del 2011, el cual ya era una reinterpretación moderna del descontinuado Trussardi Uomo de 1983, enfocándose el aroma hacia una presencia misteriosa y de imagen más fuerte que se apega a las líneas clásicas de diseño italiano y en particular de la casa de artículos de cuero de lujo Trussardi al incluir una veta de cuero. El envase repite la forma de botella de Trussardi Uomo del 2011, similar a una cantimplora plana en vidrio negro con tapón dorado y un escudo impreso al frente, cambiando el color del tapón y del detalle del borde dorado que recorría el costado de la botella y que ahora pasan a negro. En el sitio de ITF Cosmetics destacan que la pirámide olfativa del perfume es: limón, acorde marino, gálbano, ciprés, iris, ciruela, hojas de violeta, pachulí, vetiver y cuero.
La fragancia tiene un inicio de apariencia tradicional y fresca que recuerda la perfumería limpia de los años ochenta y noventa con una nota de limón frio combinado con sándalo y herbales discretos al enebro, incluyendo una capa fresca de agua que combina aportes de hojas de violetas con pimienta sin llegar a polvosos florales explícitos, mostrando mayor notoriedad a los 5 minutos en notas de menta derivadas de los grupos verdes y con mayor proximidad a vetiver limpio con indicios de ciprés y musgo tenue que a 10 minutos da un paso por un cuero ligero con madera, enfocándose a 15 minutos en bayas de enebro que se mueven a la par con limones fríos, repitiendo a los 20 minutos un acabado al agua distante de calone o de notas marinas y que se centra en hojas de violeta. En fase media a los 30 minutos la fragancia mantiene el acabado de agua pero teniendo derivadas en la capa verde que se vuelve más turbia y cercana a ciprés con musgo apagado, incluyendo apariciones esporádicas de manzana verde medianamente húmeda combinada con cruces de fruta madura atribuibles a granos de tonka, llegando a 1 hora como un tinte clásico de agua de lavanda donde las capas verdes se inclinan a un pachulí que contiene tintes de madera con chocolate. A las 2 horas la fragancia presenta mezclas de tibios de madera y musgo con cuero que se ubican en la base, elevando una impresión de agua de lavanda con un pachulí confitado cercano a tibios de tonka con tabaco que rondan una canela, teniendo puntos verdes bajos que quedan a medio camino de una salvia y se estabilizan en pachulí, tomando a las 3 horas una apariencia más tibia que gira en lavanda con tonka junto con ácidos más cercanos a pomelo que a limones que absorben la apariencia de salvia e incluyen un dejo salado que no llega a un acorde marino, volviendo la menta de enebro que se aleja del turbio de pachulí y reapareciendo a las 4 horas variantes más turbias de canela al agua con una lavanda que se siente más sucia por efecto del chocolate de pachulí tipo salvia que va a la baja, surgiendo variantes de calone de la edición original pero combinadas con menta de bayas de enebro y tintes de ajenjo que recuperan vetas de cuero del comienzo. A las 6 horas la fragancia se siente más ligera, reduciendo las porciones oscuras de bosque y destacando enebro combinado con ajenjo sobre madera cálida y secos de cuero asociados con un pomelo, enfocándose a partir de las 9 horas en tonalidades frías centradas en bayas de enebro qué incluyen un aporte de alimonado al vetiver discreto inserto en un agua de lavanda ligera, recuperando una tonalidad más seca que oscila entre musgo y cuero sin variar el cuerpo principal a las 12 horas. En fase final al pasar de las 24 horas el perfume baja en intensidad, perdiendo la mayoría de los aportes de lavanda en favor de un pomelo con dejos de salvia, centrándose en tonos todavía cálidos y más turbios de musgo y pachulí que contienen una veta ligera de cuero.
Comparado con Trussardi Uomo, esta edición rescata algunas notas en común como el aporte de tonka con lavanda pero favoreciendo un enfoque más verde de bosques en menta y pachulí, dando la idea de un aroma más serio que se abre a nivel de diario a situaciones atemporales de corte social por la menta, sin tener un dinamismo apto para actividades deportivas. En oficina el perfume se siente correcto aunque muy serio en actividades con equipos de trabajo y agregando una impresión de personalidad madura o más independiente, más cercana a un vestuario pulcro tipo traje que a prendas de manga corta, con un efecto memoria que se mantiene en mediano por una tendencia de la fragancia a moverse de manera compacta en un segmento verde de bosques. A nivel nocturno la fragancia se apega a eventos oscuros tipo salidas a pubs o reuniones en espacios contaminados con un matiz social pulcro, sin mucha chispa en salidas con amigos y apartándose del segmento juvenil, perdiendo fuerza o quedando corto en complejidad en el segmento formal. En lo romántico varias de las notas de bosque se sienten lejanas a una idea empática de cercanía sensual y conquista, favoreciendo una imagen elegante y correcta algo rígida de disfrute personal. Rango de edad entre 25 y 60 años.