Kaiak by Natura

Esta fragancia del año 1996 es la primera de una serie masculina desarrollada por la marca de cosméticos naturales Natura de Brasil, bajo un formato de desodorante colonia fresca y limpia que acompaña a un hombre de comportamiento dinámico y en parte aventurero que se refleja en el nombre que se acerca al de un bote kayak (en portugués "Caiaque") que se maneja de manera individual y está diseñado para enfrentar corrientes fuertes de agua. El envase consiste en una botella rectangular de costados planos y vidrio transparente que incluye hombreras de plástico gris que se curvan hacia la válvula del spray, la cual está cubierta por un tapón transparente que tiene una pequeña lengüeta al costado, con el líquido en su interior siendo de color celeste. En el sitio de Natura en Brasil destacan que las notas básicas de la fragancia son: cítricos, gálbano, notas acuáticas, maderas transparentes y musk.

En partida el perfume se apega a un centro verde con acabados herbales, con una primera impresión de enebros con aportes de madera de sándalo y menta ligera que dan un aroma parecido al del gel de afeitar Mach 3 de Gillette, incrementando a 5 minutos la potencia de la menta que se sostiene con pocos cambios a los 10 minutos pero incluyendo secos de tallos al vetiver que contiene referencias a madera y especiados suaves tipo nuez moscada, adquiriendo a los 15 minutos un acabado de jabón como una consecuencia del vetiver o de un floral neutro tipo lirios del valle o geranio, manteniendo a los 20 minutos la idea de un lirio del valle con retornos de menta dominante. En fase media a los 30 minutos la fragancia incluye nuevos acabados alimonados ligeros que mantienen un centro verde marcado por la menta, elevando el tinte floral que se siente más cercano a flores, llegando a 1 hora con una veta secundaria más tosca de manzanilla que acompaña a la menta que se vuelve más natural y cercana al aroma de un chicle. A las 2 horas la fragancia baja el dominio de menta en favor de florales jabonosos al lirio del valle con un seco de geranio alineadas con un agua especiada basada en madera de sándalo y que no llega a características de lavanda, con un comportamiento lineal que se sostiene a las 3 horas con una variación de la menta que roza la lavanda e incluye acabados más densos que un calone que parecen una variante no plástica de flor de azahar, elevándose de paso el aporte de geranios, tomando a las 4 horas un matiz más marino que favorece aproximaciones a lavandas por encima de la menta e incluyendo un aporte menor de limones verdes al lirio del valle. A partir de las 6 horas el perfume cambia la menta por un formato de jabón cercano a florales de jazmín y lirios del valle con aportes de lavanda ligera que resaltan un fondo de limón verde, con el calone tendiendo a una flor de azahar plástica que en parte se siente como el origen de los alimonados sobre las 9 horas, conteniendo referencias a maderas suaves y vetiver ligero que se asocia con musgo seco, volviendo a las 12 horas a menta de enebro y lavanda con combinaciones frías y al agua de sándalo con un dejo especiado mínimo que se confunde con salvia amarga. En fase final después de 24 horas la fragancia coloca en la capa superior un acabado mucho más acuático de calone qué sigue complementado por menta sintiéndose presencias florales neutras al agua que incluyen una violeta qué aporta una sensación limpia ligeramente infantil sustentada sobre un agua especiada con tintes de madera ligera

La fragancia se apega a un perfil fresco y dinámico no complejo que se mantiene relativamente constante en potencia, moviéndose en torno a un centro de menta con florales al agua que logra un buen potencial de uso a nivel de diario en épocas cálidas y a pleno sol en primavera y verano, entregando un aporte funcional refrescante en actividades deportivas intensas. En oficina el aroma en parte recuerda porciones de perfumes clásicos masculinos y agregando un tinte nostálgico que se interpreta como seriedad y pulcritud limpia semiformal dentro de los cotidiano, teniendo un efecto memoria ligeramente sobre lo mediano por lo simple y lineal del aroma. En el caso nocturno la fragancia se aleja del segmento adolescente juvenil, por momentos dando una impresión de desodorante de fiestas con una apariencia limpia de verano, conservando un estilo cotidiano y refrescante de salidas con amigos que no alcanza a cubrir las exigencias de un uso formal. En lo romántico la menta se siente grata, con la combinación verde tendiendo más a un disfrute personal que a mostrar una sensualidad compleja. Rango de edad entre 20 y 60 años.