Ibisco by L’Erbolario

Esta fragancia unisex del 2013 forma parte de los productos preparados por la marca italiana L'Erbolario, dedicada a elaborar cosméticos, perfumes, jabones y cremas que aprovechan esencias naturales con un fin terapéutico, con Ibisco centrándose en el uso de un hibisco proveniente de África que combinado con aportes cítricos y de ámbar buscan imaginar un viaje cruzando los límites de una tierra misteriosa y antigua, con una visión dedicada al espíritu masculino y al alma femenina. El envase sigue un formato de botella rectangular ancha similar a la usada por Papavero y Méharées, con un vidrio opaco en color rojo ladrillo, destacando al frente la frase "un fiore per l'Africa" ("una flor para África") asociado a una campaña de la Cruz Verde italiana en apoyo a la creación de trabajos para las mujeres de Senegal para ayudar a la nutrición de sus niños y su comunidad. En el sitio Erbolario señalan que las notas básicas del perfume son: naranja, limón, cilantro, resina de elemí, cardamomo, jazmín, rosas, manteca de iris, vainilla, ylang-ylang, pétalos de hibiscos, ámbar, pachulí y musgo.

En partida la fragancia sigue un perfil polvoso que gira en torno a una primera impresión de iris neutro, desarrollando una segunda capa dulce que se desenvuelve de manera rápida y alcanza niveles altos a los 5 minutos en forma de un tinte de duraznos y damascos, sosteniendo este aroma por sobre los 10 minutos mezclándose con aportes secos de madera que contienen un aire de tallo de rosas que pasan a los 15 minutos a un musgo con vestigios de mora de bajo dulzor, presentando a los 20 minutos una variante del iris inicial apegada a violetas. En fase media a los 30 minutos la fragancia refuerza la idea de tintes secos derivados de iris y violetas secas con un aire de perfumería clásica antigua que reúne jazmín seco con vestigios de moras y polvo de pétalos, desarrollando una base de madera con un dulzor floral neutro que aparenta ser un hibisco pero que se combina con cristales de resina limpia después de 1 hora de aplicado. A las 2 horas el aroma se mantiene centrado en un iris a la mora con referencias a madera y a una resina en desarrollo que contiene un acabado incipiente al incienso, conservando a las 3 horas la base de iris más densa y más polvosa que se funde con jazmín y violetas dejando espacio para la aparición de ácidos de cáscara de mandarinas junto con una madera tibia de acabado ambarado que tiene ecos breves de notas de fragancias de la marca Lush de manera muy mesurada, tomando a las 4 horas un carácter más femenino por un aumento de la capa floral centrada en violetas que se ubica al fondo, acompañado de resinas ahumadas y una bergamota más viva y más notoria. Al pasar de las 6 horas el grupo de iris pierde la presencia de violetas y adquiere un matiz más dulce que mantiene un acabado terroso que se asocia con maderas bajas, dando un paso a las 9 horas por un verde de bosque al pachulí que se sigue sosteniendo en una base de iris, retornando a las 12 horas a maderas dulces con resinas frescas que recuerdan a almendras ligeramente confitadas con un vestigio de cacao, con el iris tomando un matiz de jabón parecido al de un jazmín. En fase final después de 24 horas el perfume cambia el aporte de resina al incienso por un pachulí más notorio y denso que se acerca mucho al acabado de Angel de Thierry Mugler, reduciendo al fondo la veta de iris y presentando apariciones dulces ocasionales como un residuo de la resina y las naranjas.

La fragancia presenta un patrón unisex donde la capa central de iris es la que establece un enfoque masculino y que se relaja hacia el final, presentando momentos femeninos altos en su punto medio en naranjas con violetas y que para el caso de un hombre se asumen como un agua fresca o una variante de jabón, asumiendo un perfil de diario atemporal que es indiferente de las épocas del año optando por una preferencia de uso en interiores, lejano a la realización de actividades deportivas. En oficina el perfume sigue una faceta elegante artesanal, encajando de manera más natural en un hombre y entregando matices más oscuros y serios en una mujer, sosteniendo una imagen pulcra no del todo empática y que sigue un patrón más personal que profesional, consiguiendo un buen efecto memoria por una cercanía a aromas de perfumería clásica que siguen una evolución relativamente lineal. En el campo nocturno el aroma se desarrolla de manera más seria y calmada, acotado a situaciones semiformales no adolescente como cenas y eventos apegados a protocolos sociales como visitas a conocidos en casa, alejándose de un perfil formal. En lo romántico el perfume vuelve a asumir una imagen seria que se siente como una propuesta más bien de disfrute personal que como un vehículo que facilite una conquista, en ambos sexos, principalmente por las tonalidades ásperas del iris. Rango de edad entre 30 y 60 años en hombres, entre 25 y 60 años en mujeres.