Scottish Lavender by Monotheme

Esta fragancia del año 2003 es parte de la colección clásica de la marca Monotheme, filial de la casa italiana Mavive y con sede en Venecia, la cual se propuso al establecer esta marca crear fragancias que se centraran en una nota única característica de la perfumería clásica y en torno a la cual se agregaran notas secundarias de complemento, con Scottish Lavender haciendo homenaje a la lavanda en su variante inglesa (Lavandula angustifolia) como base de la perfumería actual. El envase se apega a la forma de botella estándar de la colección Monotheme en su formato inicial, con una botella cilíndrica transparente con acabado esmerilado en sus paredes y adornada con un tapón de plástico también transparente que tiene un disco a modo de manilla recordando un frasco de laboratorio o botica antigua. En el sitio de Mavive y de Monotheme ya no figura esta fragancia debido a que fue descontinuada en favor de nuevas líneas aromáticas, sin que se cuente con un listado de notas oficial.

En partida la fragancia toma un enfoque muy natural con un aroma a lavanda silvestre bastante profunda e intensa que incluye sensaciones de romero por una idea de goma o savia que se desprende del frotar o apretar con los dedos las hojas de esta planta, seguida a los 5 minutos por capas similares a menta y mentol que parecen derivar de ambas plantas a la vez, con la fragancia dando una sensación untuosa que se mantiene al menos hasta los 15 minutos. En fase media a 30 minutos la fragancia reduce su intensidad al bajar la capa de romero en favor de lavanda mentolada con un untuoso de savia que recuerda un tipo de resina fresca y que va ligado con nuevas profundidades de menta que se sostienen hasta 1 hora y media después de aplicado, momento en que el perfume agrega tonos dulces de bergamota y naranja. A las 2 horas la fragancia sufre una baja de intensidad en la capa de lavanda que permite el ascenso de la naranja en un formato de agua fría natural, moviéndose en paralelo ambas líneas aromáticas con intensidades similares hasta las 3 horas cuando se suma un punto de jengibre a la naranja. Sobre las 5 horas la fragancia sigue una evolución lenta, con retornos de la lavanda en un formato más mentolado que se confunde con un estilo clásico de vetiver o sándalo concentrado, agregando por el lado del jengibre nuevos puntos más verdes cercanos a semillas de cilantro, marcando a las 7 horas una nueva variación con una lavanda profunda que se mantiene en la base creando una interferencia de resina y menta sobre las capas de naranja que ahora recuerdan cáscaras secas al absorber los terrosos de jengibre. A las 9 horas la fragancia se siente mucho más amaderada y con impresiones de sándalo, cedro e incluso pachulí al pino con un punto terroso y frío de jengibre notorio, variando a las 12 horas partes de estos verdes a mentoles más intensos de eucalipto, con la lavanda manteniéndose presente en la base como una resina fragante y tibia. En fase final a las 24 horas el perfume reduce notoriamente su intensidad en comparación con su fase inicial, reduciendo la lavanda a un nivel de base y dejando en la capa superior grupos más dulces de ámbar con influencia de bergamota que dan una idea de aroma mucho más unisex y fresco, intercalando puntos verdes de la familia del pino y con ascensos de un seco terroso de jengibre combinado con resina de romero al oler por más tiempo.

El aroma por momentos se aleja del enfoque masculino que ha tenido la lavanda a nivel de perfumería, teniendo momentos unisex más notorios que se presentan a partir del punto medio de naranja, siguiendo una línea de uso muy cercana al de diario relajado y artesanal elegante que se siente atemporal pero alejado de situaciones dinámicas o deportivas por una capa mentolada densa que se presenta frecuentemente, con una preferencia de uso más bien social y madura. En oficina la fragancia puede adquirir matices intrusivos en espacios cerrados, con la lavanda mentolada pudiendo malinterpretarse como una fragancia masculina demasiado antigua o confundirse incluso con esencias también de origen natural usadas en productos de limpieza, tendiendo a tener un mejor potencial de uso en el escenario de diario. A nivel nocturno el aroma vuelve a presentar una impresión algo agresiva y con las capas herbales verdes perdiendo terreno tanto a nivel informal donde se siente rígido y maduro, como en el formal donde se siente demasiado natural y cercano a un uso de diario. A nivel romántico la fragancia presenta líneas intensas que pueden molestar a corta distancia y que se apegan a un uso de disfrute personal tanto masculino como femenino. Rango de edad entre 30 y 60 años.