Skull & Roses for Woman by Ed Hardy

Este perfume del año 2012, de la marca asociada a los productos del artista gráfico y tatuador Don Ed Hardy, aparece en el mercado acompañado de una edición masculina y ambas haciendo referencia a uno de los temas recurrentes del artista de calaveras y flores, junto con los animales y los temas orientales, con la fragancia siendo la primera distribuida bajo el alero de Elizabeth Arden quien adquirió la licencia de distribución de fragancias manos del empresario y diseñador francés Christian Audigier, con este último conservando los derechos sobre los productos de vestuario. El envase destaca una botella hecha en plástico opaco blanco con forma de una calavera y que afirma entre sus dientes una rosa roja con tallo y hojas verdes, con esta calavera teniendo una sección removible en su parte superior a modo de tapón que permite tener acceso al spray, con la caja también presentando un color blanco con el que se distingue a simple vista de la versión masculina y repitiendo la imagen de la calavera con la rosa pero dibujada a manos de Ed Hardy. En los sitios relacionados con la marca Ed Hardy no se encuentra información sobre este perfume, sin que se cuente con un detalle de sus notas aromáticas.

En partida la fragancia presenta un aroma dulce muy azucarado que se abre gradualmente a frutales de la familia de las golosinas de frambuesa, pasando antes de los 5 minutos a un jugo de frambuesas estable y relativamente puro que comienza a agregar vetas verdes silvestres que se aproximan a menta, con esta mezcla sosteniéndose hasta los 20 minutos con bajas graduales de la frambuesa en favor de los tonos verdes que adquieren matices más aterciopelados propios de hierbas aromáticas como las hojas de tomate, con un aire indefinido de florales a la peonía por la influencia de las frambuesas. En fase media a los 30 minutos el grupo frutal disminuye privilegiando un nuevo desarrollo afín a florales con un dejo a duraznos y damascos con una veta al fondo de caramelo, combinando a 1 hora grupos silvestres unisex de origen herbal que recuerdan pétalos neutros y polvosos. A las 2 horas el grupo frutal muestra una apertura a un mayor rango de frutos rojos, incluyendo fresas o frutillas y guindas dentro del punto de frambuesa y que siguen asociándose a un aroma de golosina o jugo aunque con un matiz más sintético, con interferencias de un punto frío vegetal que recuerda a menta, enebro, hojas de tomate o un tipo de pimienta por un picor ligero en nariz, conservando en el fondo una capa dulce que se acerca a chocolate de pachulí, con el aroma reduciendo a las 3 horas la intensidad de la nota de frutos rojos y concentrándola en la base mientras mantiene un aire frío que parece venir de flores rosadas con tintes alimonados de la familia de las fresias y las peonías pero sin destacar un carácter femenino clásico, presentando a las 4 horas la idea de hojas verdes de plantas frutales con complementos de grosellas rojas y negras sobre una base fría de madera con un tinte acaramelado que se sigue confundiendo con pachulí confitado. Sobre las 6 horas la fragancia inclina el balance frutal hacia grosellas oscuras montadas sobre un ácido de frambuesas con fresas desarrollando también un aire dulce que se acerca a algodón de azúcar, con las capas verdes complementarias presentando una evolución a las 9 horas que parece ir hacia aportes de pera con cruces de rosas y violetas que no alcanzan a determinar una familia floral pero que crean efectos ácidos oscuros, afinando a las 12 horas un acabado más cremoso sobre los grupos de azúcar que se confunden con damascos maduros y se mezclan con grosellas negras levemente ácidas. En fase final al llegar a 24 horas el perfume se acerca a líneas rojas más dulces, cambiando el ácido de frambuesas por fresas y frutillas y de paso apagando las ideas de florales afines a peonías y rosas, con un fondo verde un poco más profundo y que recuerda a pachulí e incluso enebro, cruzando unos tonos oscuros de mora dulce al fondo que dan una cercanía a violetas apagadas.

El perfume ofrece una mezcla que se apega a una línea segura y ya conocida dentro del público juvenil femenino y que se centra en frutales rojos con efectos azucarados, sumando un efecto vegetal unisex frío intercalado que calza en un uso de diario atemporal urbano y mayoritariamente de interiores, evitando un exceso de calor o estadías prolongadas a pleno sol y presentando un carácter que se mantiene dentro de un semiformal que evita una chispa excesiva alegre e informal pero que a la vez carece de una complejidad más social. En oficina el aroma hace un balance entre juventud y seriedad sin caer en el segmento clásico laboral, como una propuesta atemporal que está dentro de lo limpio y correcto aunque con cierto grado de personalidad independiente en el trato con colegas, con un efecto memoria mediano debido a la confusión que presenta con otros productos similares centrados en frutas rojas. En lo nocturno el perfume muestra una mayor soltura de uso en fiestas informales con cierto grado de contaminación ambiental, sintiéndose a distancia de conversación y pudiendo llegar a situaciones semiformales tipo reuniones con amigos, pero sin sostenerse a nivel formal por tener una estructura más bien simple. En lo romántico la fragancia tiene un inicio atractivo y receptivo pero que a partir de las 2 horas comienza a presentar mayor independencia apegándose a un estilo frutal rojo que se entiende como más personal que sensual o conquistador. Rango de edad entre 20 y 60 años.