Viva by Fergie by Avon
Este perfume del año 2012 es la tercera fragancia creada por Avon en asociación con la cantante estadounidense Fergie, estableciendo una periodicidad anual de lanzamientos al mercado para esta serie al acompañar a los productos anteriores Outspoken del 2010 y Outspoken Intense del 2011, proponiendo en esta ocasión un aroma menos floral que se aleja de las características dulces y frutales intensas de sus predecesores en favor de tonos más serios con un rasgo masculino, manteniendo a nivel publicitario la imagen de una mujer femenina que se sale de los esquemas convencionales y llama la atención de los demás, siempre teniendo la situación bajo control. El envase del perfume sigue líneas rectas en ángulos inclinados, con una pieza triangular central con surcos que recuerda un decorado Art Deco de los años 30, destacando el color del líquido en tonalidad violeta. En el subsitio de Fergie ubicado dentro de Avon internacional destacan que las notas aromáticas del perfume son: hierbas frías, cáscara de bergamota, lavanda, narcisos blancos (o "Narcissus papyraceus", en inglés "paperwhites"), musk, maderas gamuzadas y vetiver.
En partida el perfume presenta un inicio fresco que recuerda una colonia floral juvenil clásica, con ideas de lirios del valle combinadas con jazmines bajos que se afinan hacia peonías con rastros frutales en un formato tenue sobre los 5 minutos, con una segunda línea un poco más marcada que trae ideas masculinas basadas en rasgos de madera y nuez moscada que se hacen presente a los 10 minutos, sumando una impresión de lavanda asociada a la menta y las maderas que se afina a los 15 minutos. En fase media a 30 minutos la fragancia mantiene un punto de menta y lavanda que enfoca a la fragancia hacia un estilo chiprés al combinarse con variantes más secas de la nuez moscada e ir en paralelo con las peonías, con un pequeño brillo de frutos rojos en un formato no azucarado que definen un cremoso que se abre a duraznos y en parte a gardenias complementadas por musk, con la lavanda absorbiendo a la menta en un tono frío de tipo floral que presenta rasgos secos de rosas que se aproximan a lotos, llegando a una idea de cremoso frutal a 1 hora que se abre a tuberosas ligeras con damascos y tallos de flores amaderados un poco más verdes y con un punto de granos de cereales. A 2 horas la fragancia se mueve en un segmento mixto, con una base que conserva líneas de lavanda con rasgos verdes de pradera y secos de madera, conservando en la parte superior un floral dulce en ascenso basado en tonos cremosos que todavía está inserto dentro de un efecto chiprés de madera seca que se acerca a vetiver no verde o sándalo, y que presenta picores ligeros de la familia de la canela y la nuez moscada, llegando a las 3 horas a una variación en el desarrollo del tono de crema que se inclina mayoritariamente hacia ámbar con efectos de chocolate de pachulí y que baja en favor de repuntes de flores al durazno y damasco, manteniendo una intensidad en general baja y apegada a la piel, teniendo el grupo verde un nuevo repunte a las 4 horas con un tono mentolado frío ahora mucho más cercano a pachulí que compensa las líneas de chiprés, moviéndose a la par con un dulzor de picor leve basado en maderas ligeras al cedro con un punto de durazno. A partir de las 6 horas la fragancia mezcla la mayoría de las notas en un hilo central, con un dulzor de musk con más proporción de madera y menor cantidad de frutas y flores que se sostiene sobre un picor que se confunde entre mentol y especiado, con un alza repentina de algunas notas que favorecen una mejor intensidad pero todavía sin superar la distancia de conversación y que en torno a las 9 horas apuntan hacia ámbar especiado con pachulí y dejos de chocolate seco, volviendo a las 12 horas un punto de rosas y tallos de flores con un picor de anís y un frío de menta más natural asociado a líneas masculinas, con flores secundarias derivadas de lavanda que rondan unas violetas polvosas. En fase final a las 24 horas el perfume presenta una nueva faceta más delicada de florales que arrastran dejos frutales y que se mueven en torno a gardenias apagadas por una capa de musk y ámbar, conservando ideas de madera especiada al fondo de picor leve que van por un anís al agua, y con un menor carácter masculino al reducir a un mínimo las vetas verdes de menta y pachulí.
La fragancia muestra un giro con respecto a los dos productos anteriores creado en Avon para Fergie, con un aroma que tiene un matiz inicial entre clásico y unisex y que en la mayoría de sus etapas presenta un formato apegado a la piel bastante íntimo y personal que admite sobreaplicaciones, con una primera aproximación a un escenario de diario que podría admitir un uso atemporal pero que por intensidad tiene mejor potencial en primavera y en interiores de verano, con un apego a un estilo ligero más floral y dulce derivado de Ô de Lancome, pero que tiende a mantener un enfoque no deportivo. En oficina el aroma se siente discreto y requiriendo de sobreaplicaciones, con la ventaja de no presentarse como un perfume intrusivo, manejando un perfil cotidiano un poco clásico al comienzo y con rasgos serios a cargo de la lavanda y los puntos especiados, relajándose con el paso de las horas pero sin repuntar de manera destacada y apegándose a una intención limpia perceptible a distancia de conversación y con un bajo efecto memoria. En el caso nocturno el perfume necesariamente requiere de una sobreaplicación o reaplicación antes de salir de casa, con las vetas oscuras expresándose de mejor manera en ambientes limpios y frescos y teniendo una impresión breve de elegancia a corta distancia en situaciones semiformales, quedando corto en eventos de mayor formalidad y pudiendo restar chispa o dinamismo en fiestas informales. En lo romántico el perfume maneja una línea íntima más personal que conquistadora, con las vetas unisex sin apuntar a intenciones de atracción. Rango de edad entre 25 y 60 años.